Recomiendo:
0

A la búsqueda del socialismo del siglo XXI

Fuentes: Punto Final Nº 733

En momentos en que en casi toda América Latina se buscan formas eficaces de organización político-social para avanzar rumbo al socialismo del siglo XXI, es importante conocer las propuestas que pensadores marxistas como Lenin, Rosa Luxemburgo, Antonio Gramsci, León Trostky, José Carlos Mariátegui, Mao Tse Tung, Ernesto Guevara y otros hicieron en distintas épocas, incluyendo […]

En momentos en que en casi toda América Latina se buscan formas eficaces de organización político-social para avanzar rumbo al socialismo del siglo XXI, es importante conocer las propuestas que pensadores marxistas como Lenin, Rosa Luxemburgo, Antonio Gramsci, León Trostky, José Carlos Mariátegui, Mao Tse Tung, Ernesto Guevara y otros hicieron en distintas épocas, incluyendo el aporte que sigue entregando con sus Reflexiones el líder cubano Fidel Castro. Se trata de una rica y matizada experiencia que los revolucionarios de este tiempo deben incorporar a sus elaboraciones y proyectos.

Algunos idearios, en especial los que profundizaron sobre un socialismo democrático y pluralista -como en el caso de Rosa Luxemburgo-, fueron ignorados, sepultados e incluso condenados por la propia Izquierda, en particular por los partidos comunistas de corte stalinista que dominaron la escena hasta el derrumbe del «socialismo real». Hoy, esas vertientes del pensamiento transformador de la sociedad recuperan vigor cuando en América Latina se intenta levantar una alternativa al capitalismo neoliberal. El contenido de esa alternativa necesariamente tendrá que ser un socialismo -«socialismo o barbarie» proclamaba Rosa Luxemburgo- que recupere las banderas de la democracia, las libertades públicas y el respeto a las derechos humanos que legítimamente pertenecen al ideario socialista.

En lo que a Rosa Luxemburgo se refiere, en Asunción, Paraguay, se efectuó el seminario «La actualidad del pensamiento de Rosa Luxemburgo en América Latina». Lo organizaron la Coordinadora Nacional de Organizaciones de Mujeres Trabajadoras, Rurales e Indígenas (Conamuri), el Servicio Paz y Justicia de Paraguay y Base-Investigaciones Sociales, con apoyo de la Fundación Rosa Luxemburgo de Alemania. Asistieron alrededor de cien personas procedentes de Argentina, Uruguay, Chile, Brasil, Paraguay y Alemania. En los debates intervinieron los chilenos Alicia Muñoz Toledo, presidenta de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (Anamuri); Claudia Pascual, concejala comunista de la Municipalidad de Santiago y el director de Punto Final , Manuel Cabieses. También de Chile participaron la actriz Ana María López y el actor Marcos Morales, del Teatro El Riel, con una representación escénica de las cartas de Rosa Luxemburgo.

El seminario debatió no sólo el pensamiento de Rosa Luxemburgo (la revolucionaria nacida en Polonia en 1871 y asesinada en Alemania el 15 de enero de 1919 junto a Karl Liebknecht, ambos fundadores del Partido Comunista Alemán, KPD). El debate sobre sus ideas acerca de un socialismo democrático sirvió también para examinar la realidad latinoamericana, en particular la de los países representados en la reunión. Sobre todo, por supuesto, se conoció la realidad paraguaya a través de las exposiciones de numerosos delegados, en especial jóvenes, mujeres y dirigentes campesinos. Paraguay vive la declinación del gobierno del presidente Fernando Lugo, un ex obispo que ha decepcionado a muchos de sus seguidores hasta el punto que se considera un hecho que el derechista Partido Colorado -vinculado a mafias del narcotráfico y del contrabando- recuperará la Presidencia en las próximas elecciones.

El seminario -que se efectuó en la Quinta Ykva Sati, en las afueras de la capital paraguaya- escuchó interesantes conferencias del historiador alemán Jörn Schütrumpf («Rosa Luxemburgo o el precio de la libertad»); del traductor polaco de la obra de Luxemburgo, Holger Politt («Democracia, revolución y organización de la clase trabajadora»), y de la encargada de la Fundación Rosa Luxemburgo-Cono Sur en Sao Paulo, Kathrin Buhl («Rosa y la participación de la mujer en política y el papel de Rosa en el debate feminista»).

El director de Punto Final participó en el debate sobre «Desafíos actuales en la búsqueda de una democracia radical y un proyecto popular» junto con la senadora del Frente Amplio de Uruguay, Constanza Moreira, Vito Giannotti, del Núcleo Piratininga (Brasil) y Elizabeth Duré, del grupo feminista Frida, de Paraguay.

Señaló Manuel Cabieses que el ideario de Rosa Luxemburgo constituye la utopía más pura y admirable del socialismo. No obstante, la realidad histórica demuestra que el imperialismo y la burguesía no vacilan en usar la fuerza y el crimen para derrocar a los gobiernos que persiguen objetivos socialistas. No es solo el caso de la desaparecida Unión Soviética, sobre el cual polemizaron Rosa Luxemburgo y Lenin. También lo demuestran ejemplos más cercanos: Chile de Salvador Allende -cuyo modelo socialista fue bastante próximo a la propuesta de Rosa Luxemburgo-; Venezuela de Chávez, donde la refundación de un proyecto socialista latinoamericano otorga todo tipo de garantías a la oposición. Sin embargo ésta, asociada con EE.UU., insiste en el camino golpista. Lo mismo ha ocurrido al gobierno de Evo Morales en Bolivia, donde incluso se ha intentado dividir al país. Otro tanto puede decirse de Ecuador cuyo presidente, Rafael Correa, ha superado con éxito un intento de golpe de Estado. Por lo tanto -añadió el director de Punto Final -, si bien la utopía luxemburguista debe ser el paradigma que nos permite reivindicar los valores más nobles y humanistas del socialismo y construir una nueva propuesta de masas, hay que hacer conciencia de las agresiones y amenazas que se levantan contra los pueblos cuando éstos deciden liberarse de la explotación del capitalismo. Los pueblos y gobiernos que inician el camino del socialismo deben estar preparados para enfrentar a quienes intenten romper las normas de la democracia.

En general los debates destacaron las luchas liberadoras de la mujer e indígenas en América Latina. Asimismo, apuntaron a los requerimientos orgánicos e ideológicos que plantean las organizaciones políticas y sociales que abren nuevos caminos hacia el socialismo democrático que propugnaba Rosa Luxemburgo. En ese sentido se hicieron numerosas referencias a las experiencias de Venezuela, Ecuador y Bolivia, que se orientan en esa dirección.

(Publicado en «Punto Final» edición Nº 733, 13 de mayo, 2011) www.puntofinal.cl

 

www.pf-memoriahistorica.org

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.