La iniciativa del presidente venezolano Hugo Chávez de crear PETROCARIBE en 2005 permitió a las naciones integrantes, solventar los graves problemas económicos mundiales de los últimos años y preservar la soberanía de sus pueblos al no tener que acatar las medidas neoliberales extremas diseñadas por el Banco Mundial (BM) y Fondo Monetario Internacional (FMI). Del […]
La iniciativa del presidente venezolano Hugo Chávez de crear PETROCARIBE en 2005 permitió a las naciones integrantes, solventar los graves problemas económicos mundiales de los últimos años y preservar la soberanía de sus pueblos al no tener que acatar las medidas neoliberales extremas diseñadas por el Banco Mundial (BM) y Fondo Monetario Internacional (FMI).
Del 14 al 17 de junio se desarrolló en Porlamar, Isla Margarita, Venezuela, la jornada técnica de PETROCARIBE, «Desafíos y perspectivas sociales y operacionales» con el objetivo de revisar el desarrollo de los asuntos operativos acordados y a la par fortalecer los proyectos de cooperación, tanto conjunto como binacionales, entre los países de Centroamérica y el Caribe.
Durante el evento se dio impulso a la creación de empresas mixtas entre sus miembros con el fin de contribuir al desarrollo equitativo de sus pueblos y elevar la calidad de vida de sus habitantes.
Esos acuerdos y proyectos de desarrollo económicos eran difíciles de concebir en esta región hace apenas unos años debido al control económico, político y social que por décadas ejerció por diferentes vías Estados Unidos en una región considerada como su traspatio.
PETROCARIBE se convirtió en el pulmón de los países con que sin yacimientos petrolíferos y pocos recursos económicos no podrían haber enfrentado la profunda crisis económica que ha elevado considerablemente los precios del crudo.
Los 17 miembros del grupo estuvieron presentes en Isla Margarita: Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y Las Granadinas, Santa Lucía, Surinam y Venezuela.
Desde su fundación el 29 de junio de 2005, esas naciones reciben petróleo venezolano en condiciones ventajosas con un financiamiento que llega al 40% cuando el precio del petróleo supera los 50 dólares, al 50% si sobrepasa los 80 dólares y al 60% cuando la barrera se sitúa, como en la actualidad, en más de 100 dólares. El plazo de financiamiento es de 25 años y la tasa de interés que se aplica es de solo 1%.
El intercambio comercial alcanza alrededor de 11 000 millones de dólares y los suministros de crudo han pasado de 59 000 barriles día en 2005, a 200 000 barriles diarios en 2011, según informó el vicepresidente de refinación, comercio y suministro de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Asdrúbal Chávez.
Recientemente, el ministro venezolano del Poder Popular para la Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, informó que debido a ese mecanismo ya existe un ahorro de 2 000 millones de dólares en esas naciones lo que ha permitido incrementar las inversiones en los 17 miembros para apoyar el desarrollo, además de eliminar los intermediarios y la especulación en materia energética.
El viceministro Asdrúbal señaló al término de la reunión de Isla Margarita que estos intercambios han permitido a las naciones integrantes desligarse de las transnacionales que antes las explotaban y tener un mecanismo de integración que va más allá de la energética para propiciar el intercambio de bienes que saldan las deudas por suministro petrolero. Puso como ejemplo que mediante esos acuerdos, Nicaragua suministra a Venezuela, carne, leche y granos; República Dominicana proporciona diversos alimentos y próximamente Jamaica aportará cemento, lo cual mejora la integración de las economías regionales.
Para estos países pobres que carecen de yacimientos petrolíferos en sus suelos, el gasto y la dependencia resulta mucho mayor pues deben importar derivados de todo tipo con los altos valores que ha alcanzado el petróleo en el mercado internacional.
Con la asesoría y transferencia tecnológica de Venezuela se estan construyendo o renovando refinerías en algunas de estas naciones como en Cuba, Nicaragua, Haití, Jamaica y República Dominicana.
Durante los cuatro días que sesionó el evento en Isla Margarita, los participantes actualizaron las estrategias de negocios entre las empresas del Caribe, analizaron temas de exploración y refinación de hidrocarburos, definieron rutas para instalar plantas de almacenamiento y distribución de combustibles y la transferencia de tecnología.
Además, según fuentes de PDVSA, consideraron la importancia de la promoción y fomento de comercio equitativo de productos químicos y petroquímicos. En la amplia agenda, fueron abordados temas como el suministro de gas, mejoramiento de la logística de provisión de combustible, provisión de urea para fortalecer el sector agrícola de esas naciones, así como se analizaron políticas comunicacionales, energías alternativas y la dimensión social como aspecto central en los acuerdos.
PETROCARIBE se ha convertido en uno de los nuevos mecanismos de cooperación, integración y solidaridad que han surgido en los últimos años en el hemisferio sur de América Latina, debido a los esfuerzos llevados a cabo por la Revolución Bolivariana en estrecha coordinación con Cuba.
El deambular de la organización en estos seis años de vida, ha permitido a sus miembros enfrentar la profunda crisis capitalista mundial y a la par brindar beneficios para el progreso económico y social de esos países.
Este mecanismo de intercambio ha aportado millones de dólares para un centenar de proyectos de desarrollo que se ejecutan en 12 de los países miembros, los cuales se realizan sin presiones y amenazas por parte de los organismos capitalistas financieros que aupan políticas neoliberales y de privatizaciones en beneficio de las grandes compañías transnacionales.
La integración y la solidaridad latinoamericana avanzan con organismos afines a las necesidades de los pueblos del área y PETROCARIBE va a la avanzada económica de la región.
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