El progreso encoge. Lo demuestran los ordenadores portátiles, los móviles y los chips. Esa evolución hacia lo nano también ha llegado al desarrollo de satélites, que han pasado de ser mastodontes de varias toneladas a poder sostenerse en una mano. Su capacidad es aún limitada, pero los nanosatélites, picosatélites y femtosatélites están llamados a sustituir […]
El progreso encoge. Lo demuestran los ordenadores portátiles, los móviles y los chips. Esa evolución hacia lo nano también ha llegado al desarrollo de satélites, que han pasado de ser mastodontes de varias toneladas a poder sostenerse en una mano. Su capacidad es aún limitada, pero los nanosatélites, picosatélites y femtosatélites están llamados a sustituir a muchos de los antiguos gigantones. El ingeniero de la Universidad de Vigo Fernando Aguado ha liderado el desarrollo del primer picosatélite español.
¿Tendrán estos satélites uso comercial?
«En los próximos años, esta será una solución natural»
Necesitamos empresas con las que coordinarnos. En EEUU, la NASA y la industria ya han visto que estos satélites tienen un potencial comercial. En Europa no tanto, pero en los próximos años será una solución natural. Los experimentos que resultan carísimos en satélites normales son mucho más baratos con este tipo de aparatos. El lanzamiento cuesta unos 50.000 euros por kilo, cuando un satélite normal cuesta millones de euros. Nosotros podemos proporcionar capacidades de experimentación de forma rápida y con fiabilidad, y será más barato que el método tradicional.
¿Qué aplicaciones tienen?
Experimentación de software y comunicaciones. El uso de estos aparatos para vigilancia y recepción de señales de balizas en el mar ya se está estudiando. Hay un satélite de la NASA que iba a pesar 12 kilos y se logró reducir a 1,2 kilos. En satélites de observación de la Tierra, lo que antes se hacía en 700 kilos ahora se puede hacer en cien.
«Se pueden usar satélites aún más pequeños, de 250 gramos»
¿Qué hará Xatcobeo’?
Su objetivo era la formación y hemos educado a 60 ingenieros, por lo que el objetivo ya está cumplido 100%. Respecto a los experimentos, uno de ellos trata de rediseñar el hardware del satélite en base a comandos enviados desde tierra. El INTA ha incluido otro experimento que analizará los niveles de radiación en los anillos de Van Allen.
¿Qué próximos proyectos tienen?
HUMSAT. Se trata de usar picosatélites, que son muy baratos, para estudiar el cambio climático o detectar contaminación en agua en África gracias a sensores que cuestan un euro. Es una red de monitorización humanitaria coordinada por la ONU.
¿Puede reducirse más el tamaño de estos aparatos?
Entre los proyectos de futuro tenemos el Femtosat. La idea aquí es demostrar que se pueden realizar ciertas operaciones con satélites aún más pequeños, de unos 250 gramos, como repetidor de comunicaciones. Sería el primer femtosatélite de España.
http://www.publico.es/ciencias/421565/haremos-un-picosatelite-de-ayuda-humanitaria