Introducción
El 1º de mayo del año 2021, en Madrid, el sindicato Solidaridad[1], vinculado a Vox, celebraba por primera vez el día internacional de los trabajadores. En esta concentración, separada de la tradicional manifestación que llevan a cabo este día el resto de sindicatos y partidos políticos de izquierdas, junto al secretario general del sindicato y diputado de Vox por Almería Rodrigo Alonso, participó el líder ultraderechista Santiago Abascal. En los discursos de los dos líderes se realizaron duras críticas contra los sindicatos “tradicionales”, como Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO), así como también contra inmigrantes, feministas, políticos progresistas e incluso con algunos empresarios y líderes de asociaciones empresariales como la banquera Ana Botín y el presidente de la CEOE Antonio Garamendi.
Solidaridad se autodefine como un sindicato patriótico, social y ajeno a la tradicional conciencia de clase que se le atribuye a toda organización de este tipo. Es interesante destacar el hecho de que no se esfuerzan en disimular la influencia de la tradición “izquierdista” del falangismo. En este sentido, la proclama abiertamente obrerista, solo los ricos pueden permitirse no tener patria, utilizada tanto por los líderes y medios de comunicación del sindicato como por Santiago Abascal, es original de Ramiro Ledesma, fundador, junto con Onésimo Redondo, de las Juntas Ofensivas Nacional-Sindicalistas (JONS), partido que más tarde se fusionó con la Falange de Primo de Rivera, dando paso a Falange Española de las JONS.