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Amonestan a petroleras por irregularidades fiscales en Venezuela

Fuentes: Prensa Latina

El Servicio Impositivo de Administración Aduanera y Tributaria (SENIAT) de Venezuela amonestó hoy a tres empresa petroleras por irregularidades fiscales en 2005, las cuales arrojaron pérdidas millonarias en tributos dejados de pagar. La fuente precisó que por ese concepto, el fisco dejó de recaudar 57 mil 300 millones de bolívares (equivalentes a más de 26,5 […]

El Servicio Impositivo de Administración Aduanera y Tributaria (SENIAT) de Venezuela amonestó hoy a tres empresa petroleras por irregularidades fiscales en 2005, las cuales arrojaron pérdidas millonarias en tributos dejados de pagar.
La fuente precisó que por ese concepto, el fisco dejó de recaudar 57 mil 300 millones de bolívares (equivalentes a más de 26,5 millones de dólares).
Las compañías requeridas por la división de minas, hidrocarburos y actividades conexas de la gerencia de contribuyentes especiales del SENIAT fueron Repsol YPF Venezuela, Vinccler Oil and Gas, y la Compañía General de Combustibles.
En el caso de la primera el reparo notificado corresponde al ejercicio fiscal del pasado año y suma más de 17 mil 200 millones de bolívares.
Asimismo, para la firma Vinccler Oil and Gas, la administración tributaria reclamó impuestos dejados de pagar por más de 34 mil 200 millones sobre igual ejercicio.
En tanto, a la Compañía General de Combustibles, se le notificó también un acta de reparo sobre similar período por 5 mil 900 millones de bolívares.
Estas empresas petroleras cuentan con 15 días para aceptar y pagar el tributo, más una multa de 10 por ciento, como lo establece el Código Orgánico Tributario venezolano, señaló el SENIAT.
La entidad logró en 2005 una recaudación arancelaria récord al acumular el equivalente a 17 mil 600 millones de dólares, monto que significó el 140 por ciento de lo planificado por el Ministerio de Finanzas.
Estadísticas del ente reflejan que la disminución de los niveles evasivos se ubicó el pasado año en 23 unidades porcentuales, mientras para el actual se pretende reducir un 10 por ciento.
A juicio de autoridades locales, la indisciplina fiscal es reflejo de la corrupción consentida por administraciones anteriores.