La actividad parlamentaria en Brasil está cada vez más asociada a los grandes negocios. El poder económico de propietarios rurales, comerciantes y empresarios traza el perfil de la nueva bancada del Congreso Nacional. Es lo que constata el Departamento Intersindical de Asesoría Parlamentaria (Diap). Con base en declaraciones de los parlamentarios al Tribunal Superior Electoral […]
La actividad parlamentaria en Brasil está cada vez más asociada a los grandes negocios. El poder económico de propietarios rurales, comerciantes y empresarios traza el perfil de la nueva bancada del Congreso Nacional. Es lo que constata el Departamento Intersindical de Asesoría Parlamentaria (Diap).
Con base en declaraciones de los parlamentarios al Tribunal Superior Electoral (TSE) el Diap ha elaborado el estudio «Radiografía del Nuevo Congreso», concluyendo que uno de cada tres parlamentarios tiene propiedad rural o sociedad en empresa. La cantidad de esos parlamentarios en la última composición del Congreso era de 145 y en esta nueva legislatura es de 170. Para el asesor del Diap, responsable por la publicación, Antonio Augusto de Queiroz, esta nueva bancada se ha formado favorecida por las nuevas reglas electorales.
«La reglas electorales que han regido las elecciones de 2006 favorecieron a aquellas personas que tenían mayor poder económico. Aquellas que podían contratar punteros políticos para distribuir materiales de casa en casa, ya que fue prohibido el uso de carteles. Además, aquellos parlamentarios vinculados a los movimientos populares también fueron perjudicados porque no tuvieron el mismo espacio que antes tenían.
Este nuevo perfil, según Queiroz, podrá causar un choque entre Congreso y Poder Ejecutivo.
«La tendencia natural sería tener una posición más favorable a medidas liberales y más conservadora en los aspectos sociales. El Presidente de la República aclaró que no haría un gobierno con tendencia liberal, ni tampoco promovería un retroceso en el área social. El Congreso tendrá, entonces, que debatir, analizar y discutir la agenda del gobierno».