El ejecutivo brasileño ha iniciado una reforma legislativa de su ley de derechos de autor, en la que la tendencia es la contraria a la que se está dando en los países europeos o en EEUU. De hecho, la nueva ley sancionará el uso de la Gestión de derechos digitales o DRM (por sus siglas […]
El ejecutivo brasileño ha iniciado una reforma legislativa de su ley de derechos de autor, en la que la tendencia es la contraria a la que se está dando en los países europeos o en EEUU. De hecho, la nueva ley sancionará el uso de la Gestión de derechos digitales o DRM (por sus siglas en inglés, digital rights management) cuando estos se emplean para bloquear el acceso a obras de dominio público.
Destaca la diferencia de esta propuesta, con regulaciones como la norteamericana que prohíbe «sortear» los sistemas DRM incluso cuando no protegen los derechos de autor.
El proyecto de ley brasileño multará el uso de sistemas DRM que puedan limitar el uso libre de obras, transmisiones de radiodifusión y los fonogramas que estén bajo el dominio público. Además, para obras que no estén bajo dominio público, también sancionará los casos en que el uso de DRM dificulte los usos de las obras protegidas garantizados por la ley. Uno de los usos garantizados, cuya limitación por medio de DRM, sería sancionada sería la copia privada. El DRM también deberá permitir la reproducción por cualquier medio de una obra adquirida sin fines comerciales (portabilidad e interoperatividad). La norma también garantiza multitud de derechos públicos sobre obras protegidas como la reproducción firmada de noticias de prensa, representaciones de teatro sin ánimo de lucro, e incluso permitirá la distribución y comunicación pública de obras protegidas para usos educativos, de investigación o como recursos creativo artístico.
De ser aprobada esta ley en Brasil supondría una ruptura con la doctrina seguida en los países europeos y EEUU, permitiendo un mayor aprovechamiento social de las obras culturales, pero también de los avances científico-tecnológicos. Asimismo, la ley dejará bastante limitado el uso del DRM en Brasil, de hecho, posiblemente implique la desaparición progresiva del mismo, al dificultarse enormemente su uso.