A pocos días del cambio de mando en el Banco Mundial, un informe interno critica el tipo de proyectos que priorizó el presidente saliente Wolfensohn.
El Banco Mundial, el mayor financiador de proyectos para países en desarrollo, no está cumpliendo su misión de reducir la pobreza en los países pobres, ya que no presta suficiente atención al crecimiento económico, según una auditoría interna.
En los últimos quince años el banco puso demasiado énfasis en el desarrollo social y bajó el gasto en puentes, represas, oleoductos y otros proyectos que tienen más impacto en el crecimiento, según el informe, al que tuvo acceso Bloomberg News.
El modelo del Banco para sacar de la pobreza a los países pobres «en la práctica ha prestado poca atención a las cuestiones del crecimiento», según el informe de 115 páginas. «Sin crecimiento, no es probable una reducción sostenible de la pobreza».
El presidente del Banco, James Wolfensohn, que deja su cargo a fin de mayo, redujo en un 40% la financiación para proyectos de infraestructura desde 1995 e invirtió el dinero en programas centrados en el cambio climático e iniciativas poco verificables, muestran los informes anuales.
Algunos economistas dicen que el presidente electo del Banco, Paul Wolfowitz, reducirá algunos de los proyectos de Wolfensohn y reestructurará las actividades de financiación del banco, que totalizan 20.000 millones de dólares anuales.
«De alguna manera en los últimos años se volvió políticamente incorrecto hablar de crecimiento en el Banco, y sólo se podía hablar de reducción de la pobreza», dijo el profesor de la Universidad de Nueva York y ex economista del Banco William Easterly.
Sólo una tercera parte de las economías en desarrollo han crecido más del 2% per cápita en los últimos diez años, según el auditor. Aproximadamente en el mismo período, el número de personas que viven con menos de un dólar diario aumentó en más de 40 sobre cien países en desarrollo, dijo el banco.
El estudio sale cuando faltan sólo dos semanas para la asunción de Wolfowitz, que fue elegido personalmente por el presidente George W. Bush para suceder a Wolfensohn. Desde 2001 el gobierno de Bush intenta que el banco se centre más en proyectos de infraestructura.
«El informe subraya que el Banco Mundial debe centrarse en el crecimiento económico, la forma más efectiva de sacar a la gente de la pobreza, y de que se midan resultados en cada fase para mejorar la efectividad de los programas», dijo el subsecretario adjunto del Tesoro de los Estados Unidos, Tony Fratto. Aseguró que, aun cuando mejorar la salud y la educación es importante, crear crecimiento mediante el sector privado es «la única forma de producir un aumento permanente del nivel de vida».
Un aumento de 1% en el ingreso per capita reduce en un 2% promedio la proporción de personas que viven con menos de un dólar diario, según el informe.
Más control
El banco debería desarrollar mejores formas de determinar si las ayudas se emplean para su propósito, dijo el informe.
Jim Adams, vicepresidente del banco para políticas operativas y servicios a los países dijo que, según otro informe del Banco Mundial, el índice de éxito de sus proyectos ha aumentado del 15% en 1993 al 63% en la actualidad.
Adams dijo que el banco también reconocía la necesidad de aumentar el gasto en puentes, represas, puertos y rutas y que invertirá mil millones de dólares en ese tipo de proyectos este año.
Aun así, la auditoría interna subrayó que el énfasis en la reducción de la pobreza ha mostrado escasos resultados y se necesita más evaluación. «El Banco ha relacionado el aumento del gasto en educación y salud con la reducción de la pobreza, con frecuencia sin una consideración adecuada del impacto real de esos gastos», según el informe.