Miles de agricultores protestaron el martes con bloqueos de vías contra un pacto de libre comercio con Estados Unidos, porque consideran que los perjudicará el ingreso sin aranceles de productos de ese país. La policía dispersó con bombas lacrimógenas a decenas de campesinos que quemaron llantas en las principales carreteras de la ciudad norteña de […]
Miles de agricultores protestaron el martes con bloqueos de vías contra un pacto de libre comercio con Estados Unidos, porque consideran que los perjudicará el ingreso sin aranceles de productos de ese país.
La policía dispersó con bombas lacrimógenas a decenas de campesinos que quemaron llantas en las principales carreteras de la ciudad norteña de Tumbes, cerca de la frontera con Ecuador; mientras en el sur del país los agricultores impidieron el tránsito de vehículos con piedras y troncos.
El ministro de Comercio Exterior de Perú, Alfredo Ferrero, dijo que en lugar de realizar protestas los agricultores deberían presentar propuestas para impulsar el comercio.
»El TLC es parte de una estrategia de desarrollo, no es un fin sino un medio (…) para garantizar con éxito la apertura comercial», declaró Ferrero a la radio local CPN.
El Congreso peruano ratificó la semana pasada el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, el cual fue promulgado rápidamente por el presidente Alejandro Toledo, quien lo considera vital para sostener el auge económico del país.
»La agricultura de Estados Unidos está subsidiada; en Perú no hay una política agraria, cada uno invierte su propio capital y siempre salimos perdiendo. Las negociaciones se han hecho a espaldas del pueblo», indicó a Reuters el presidente de la Confederación Nacional Agraria, Antolín Huáscar, uno de los organizadores de la protesta.
El TLC con Estados Unidos fue negociado durante 18 meses por los gobiernos de Perú y Estados Unidos, y entraría en vigencia en el 2007, si el Congreso estadunidense también lo ratifica.
Toledo planea viajar el viernes a Estados Unidos, en un intento de persuadir a los legisladores de ese país para que ratifiquen el TLC antes de que culmine su gobierno, a fines de julio. Los congresistas estadunidenses esperan reunirse en una audiencia el 12 de julio para hablar sobre el tema.
»La idea es que el TLC sea aprobado antes del 28 de julio o la primera semana de agosto, para que no tengamos que retomar el tema en noviembre, después de las elecciones estadunidenses porque puede haber un escenario incierto», afirmó Ferrero.
Bloqueo de vías
El tratado entre Perú y Estados Unidos, así como el que alcanzó Colombia, provocó la ira del presidente venezolano, Hugo Chávez, un declarado enemigo de Washington, que anunció como respuesta el retiro de su país de la Comunidad Andina, que integra también Ecuador y Bolivia.
»Esperamos que el Congreso de Estados Unidos rechace el acuerdo. No queremos un TLC porque es excluyente, se va a vulnerar a la población peruana, va a haber hambruna y se van a beneficiar sólo los que tienen dinero», agregó Huáscar.
Junto con el visto bueno del pacto comercial, el Congreso peruano aprobó leyes que permitirán destinar en cinco años 172 millones de dólares en compensaciones para los productores de algodón, maíz duro amarillo y trigo, sectores que serían los más perjudicados con el convenio.
El gobierno considera clave un TLC con Estados Unidos, país que recibe alrededor de 30 por ciento de los envíos locales, que el año pasado sumaron 17 mil 200 millones de dólares.
Pero los campesinos peruanos afirman que el monto es insuficiente y que el pacto quebrará la agricultura local, debido al ingreso sin aranceles de productos altamente subsidiados por el gobierno de Washington.