El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, lanzó hoy aquí una propuesta de integración energética para todos los países del Caribe, con la cual prevé suministrar directamente crudo y derivados con facilidades de financiamiento, y ofreció además 50 millones de dólares de capital inicial para formar lo que definió como ALBA-Caribe, similar a la Alternativa Bolivariana […]
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, lanzó hoy aquí una propuesta de integración energética para todos los países del Caribe, con la cual prevé suministrar directamente crudo y derivados con facilidades de financiamiento, y ofreció además 50 millones de dólares de capital inicial para formar lo que definió como ALBA-Caribe, similar a la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
Con la presencia de los presidentes de Cuba, Fidel Castro, y de República Dominicana, Leonel Fernández, y los primeros ministros de Trinidad y Tobago, Patrick Manning; de Granada, Keith Mitchel, y de Jamaica, Percival Patterson, y representantes de otras ocho naciones del área -además del anfitrión Hugo Chávez-, se creó aquí la multiestatal Petrocaribe.
La reunión cumbre para constituir Petrocaribe finalizó este miércoles con la firma de un acuerdo de 14 de las 16 naciones asistentes, excepto Trinidad y Tobago y Barbados.
«Entendemos las razones de los países que piden más tiempo, eso es natural para revisar el documento, para hacerle un aporte», afirmó Chávez momentos antes de estampar su firma y dar fin al encuentro.
«Con esta firma estoy comprometiendo una acción y pido a mi equipo la máxima eficiencia para comenzar rápido y bien las distintas tareas en las áreas más diversas para ayudar a nuestros pueblos del Caribe», apuntó.
Los países que apoyaron la petrolera regional son República Dominicana, Granada, Jamaica, Surinam, Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, Belice, Bahamas, San Vicente y Granadinas, Guyana, Dominica, Cuba y Venezuela.
Antes de finalizar la cumbre, Venezuela y República Dominicana firmaron un acuerdo en que el país sudamericano se compromete a suministrar 50 mil barriles de petróleo a República Dominicana en condiciones financieras calificadas de «muy ventajosas».
La nueva empresa es filial de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), que garantizará el suministro directo de sus productos en toda la región del Caribe con la intención, indicó Chávez, de «no sólo resolver un problema energético sino consolidar la estabilidad política de la región».
Analistas señalaron que con estos proyectos Chávez, quien es acusado por sus detractores de utilizar la riqueza energética de su país como arma para ganar simpatías en la región, afianzará la influencia de Venezuela en el Caribe y su agenda política apoyada por Fidel Castro, quien arribó sorpresivamente el martes anterior a Puerto La Cruz.
En su turno, Castro afirmó que la crisis energética que se avecina afectará en el mundo básicamente a los países pobres, porque los desarrollados tiene medios para hacerle frente; reiteró que la guerra de Irak obedeció a la búsqueda de crudo por Estados Unidos.
«Ahora (ese país) acapara todo el petróleo. ¿Qué va a quedar para el tercer mundo si además sus recursos se van para los países desarrollados, que alimentan el derroche?», se preguntó el mandatario cubano.
Al explicar su iniciativa para crear un «arco energético», Chávez aseguró que Venezuela asumirá los costos de transporte y el desarrollo de la infraestructura energética para los 15 países caribeños que participan en la nueva petrolera regional.
Agregó que Venezuela, quinto exportador mundial de crudo, constituirá un fondo social ALBA-Caribe a partir de 50 millones de dólares que -dijo- asistirá financieramente a las naciones pobres de la región.
Informó también que PDVSA transportará ese crudo en sus buques y cooperará en la construcción de centros de almacenamiento de algunos de los socios de Petrocaribe que no cuentan con infraestructura suficiente.
Señaló que las propuestas de Venezuela serán coordinadas por una Secretaría Ejecutiva que tendrá Petrocaribe para que «tenga que ver con la producción, refinación, transporte y suministro de energía» a las naciones caribeñas.
Informó también que Venezuela mantendrá la venta de crudo a las naciones del área en condiciones preferenciales, estipuladas en los acuerdos energéticos de Caracas y el tratado de San José, que mantiene con México.
Mediante el Acuerdo de San José, Venezuela y México garantizan 80 mil barriles diarios de petróleo con facilidades a naciones del Caribe y Centroamérica; y mediante el de Caracas, Venezuela ofrece cantidad similar o más en condiciones preferenciales a países caribeños y otras naciones de la región, incluyendo Cuba.
Alí Rodríguez, canciller venezolano, afirmó que Petrocaribe es «expresión de la política petrolera venezolana», y adelantó que dará aún más facilidades que los acuerdos de San José y Caracas.
Por su parte, el mandatario venezolano señaló que si el precio del crudo rebasa los 50 dólares por barril, como ocurre actualmente, Venezuela financiará 40 por ciento de la factura petrolera.
«Y en la hipótesis que sube a los 100 dólares el barril, Dios no lo quiera, ofreceríamos financiamiento de 50 por ciento de la factura a los países signatarios (…) con un periodo de gracia extendido de uno a dos años», apuntó.
Castro, por su parte, advirtió que una inminente crisis energética mundial afectará sobre todo a los países pobres, porque «los desarrollados tienen soluciones» para hacerle frente, y mencionó que Estados Unidos cuenta ya con todo el petróleo de Irak.
El líder cubano felicitó a su colega venezolano, y sostuvo: «A él (Chávez) lo acusan de estar regalando el petróleo de Venezuela. Así andan la intriga, las mentiras y las campañas. No son capaces de ver la grandeza, el sentido de responsabilidad con su país, con el hemisferio (…) no son capaces de ver que la supervivencia de Venezuela y de nuestras naciones no es posible sin la unidad, sin la integración».
En cuanto a su sorpresiva aparición en la cumbre, el martes, Castro señaló: «Que nadie se extrañe que yo tome medidas cuando viajo (…) que tenga que usar dos aviones. He tenido que estar toda mi vida inventando cosas para sobrevivir, lo cual es un milagro y una casualidad bastante grande, y una fortuna de poder reunirse con ustedes después de 50 años de revolución».
Elogios dominicanos
El gobernante de República Dominicana, Leonel Fernández, alabó la creación de la empresa Petrocaribe, al considerarla una «iniciativa (que) no sólo contribuye a resolver el problema energético del Caribe, sino que consolida la estabilidad en la región».
De su lado, el primer ministro Manning, de Trinidad y Tobago, aseguró que su país necesita analizar detenidamente la propuesta venezolana y comentó que en las demás islas del Caribe que participaron en la cumbre los sistemas de almacenamiento de petróleo pertenecen a empresas privadas.
Previo a la cumbre, Chávez destacó el papel de la región del Caribe en la Organización de Estados Americanos, y agradeció la postura de estos países en la última asamblea para impedir el avance de una propuesta estadunidense de «monitorear» Venezuela.
El ministro de Energía y Petróleo venezolano, Rafael Ramírez, dijo que su país se opone a un nuevo aumento de la producción de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), de la cual Venezuela es el único miembro latinoamericano; añadió que Caracas no ha sido consultado sobre la posibilidad de un incremento del bombeo, pero adelantó que Venezuela «no apoyará el aumento en la producción».
La OPEP anunció la semana pasada que aumentará su producción a medio millón de barriles diarios, para tratar de controlar el alza permanente de los precios en el mercado mundial.