Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens
China está convirtiendo parte de sus masivas tenencias de monedas extranjeras en oro y se aparta del dólar estadounidense, debilitando el papel del dólar como moneda de reserva del mundo, según un cable recientemente publicado por WikiLeaks.
«Ellos [EE.UU. y Europa] se proponen debilitar la función del oro como moneda de reserva internacional. No quieren ver que otros países se vuelvan hacia reservas en oro en lugar del dólar estadounidense o el euro», señaló el cable de 2009, citando a Chinese Radio International. «Las crecientes reservas de oro de China actuarán por lo tanto como un modelo y llevarán a otros países a poseer más oro».
El cable lleva el título «China aumenta sus reservas de oro para matar a dos pájaros de un tiro». Al considerarlo junto con recientes anuncios de política de los funcionarios bancarios chinos, puede anunciar acciones de China para acabar reemplazando al dólar estadounidense como moneda de reserva mundial.
La semana pasada, funcionarios empresariales europeos anunciaron que China planifica hacer que su moneda, el yuan, sea totalmente convertible para comercio en mercados internacionales en 2015. Zhou Xiaochuan, gobernador del banco central de China, dijo que el mercado offshore del yuan «se desarrolla más rápido de lo que habíamos imaginado», pero no existe un itinerario definitivo para hacer que la moneda sea totalmente convertible. En la actualidad, el yuan no puede convertirse fácilmente en otras monedas por restricciones gubernamentales.
Las grandes tenencias en oro de China son pequeñas en comparación con otras economías importantes. Tiene 1.054 toneladas, las sextas reservas por su tamaño en el mundo, según datos del Consejo Mundial del Oro.
El dilema del dólar
La compra de oro y hecho de que se permita la libre comercializacióndel yuan debilitarían la dominación del dólar estadounidense como moneda de reserva internacional. La acción tendría importantes implicaciones, al hacer que al gobierno de EE.UU. le cueste más pedir dinero prestado y mantener perpetuos déficit comerciales y presupuestarios.
«EE.UU. está acostumbrado a tener la posición de poseer la moneda clave de reserva, pero otros están ansiosos de reemplazarla», dijo Josh Aizenman, profesor de economía en la Universidad de California y presidente de la Sociedad Internacional de Economía y Finanzas.
Como moneda de reserva, el dólar de EE.UU. está preestablecido para transacciones internacional. Si, por ejemplo, una compañía surcoreana quiere comprar vino de Chile, es muy probable que realice la transacción en dólares. Ambas compañías deben entonces comprar dólares para realizar su negocio, llevando a mayor demanda. El valor de productos básicos globales, como el petróleo, también se marca generalmente en dólares.
Tener una moneda de reserva le permite a EE.UU. pedir prestado a tasas bajas de interés, ya que los bancos centrales de todo el mundo están ansiosos por comprar deuda del gobierno de EE.UU. «Cualquier país que puede financiar sus gastos imprimiendo dinero o vendiendo bonos está esencialmente comiendo gratis», dijo Aizenman a Al Jazeera.
Con el aparente cambio de opinión de China, esa «comida gratis» podría llegar con una cuenta contundente. En vista del masivo déficit comercial de EE.UU., los estadounidenses de a pie podrían acabar en la cocina del restaurante lavando los platos si el dólar pierde su status como reserva monetaria del mundo.
«China se concentraba, hasta hace poco, en la compra de dólares estadounidenses mediante bonos», dijo Aizenman. Desde la crisis económica, el dólar estadounidense ha bajado en comparación con otras monedas importantes, en particular el franco suizo, el dólar canadiense y el real de Brasil. Eso pone a China en un aprieto, dijeron los analistas.
Reservas de divisas
En marzo de 2011, China tenía reservas de dólares estadounidenses de 3,04 billones (millones de millones), informó la agencia noticiosa Xinhua. Es el mayor poseedor de valores estadounidenses, o deuda gubernamental, con 1,166 billones al 30 de junio de 2011, según el San Francisco Chronicle. Por lo tanto, una importante devaluación del dólar afectaría a China, ya que se quedaría con montones de papel sin valor.
«Si uno debe al banco 100 dólares, es su problema. Si uno debe al banco 100 millones, es el problema del banco,» señaló una vez el industrial estadounidense Jean Paul Getty, en una parábola que resume el predicamento de China.
«China se coloca en una posición en la que no puede vender una gran parte de sus reservas en dólares de un día al otro sin dañarse a sí misma», dijo Aizenman. «Por ahora es demasiado tarde para que pueda diversificar rápidamente los valores que ya ha acumulado».
La respuesta: Comprar oro. Todos parecen estar haciendo eso. El valor del metal brillante, inútil para la mayoría de los usos prácticos, aumentó casi un 400%, de menos de 500 dólares la onza en 2005 a cerca de 1.900 en septiembre.
«El oro ha aumentado su valor por la inseguridad en la economía mundial», dijo Mark Weisbrot, codirector del Centro de Investigación Económica y Política, un think-tank en Washington. «Normalmente, el oro subiría debido a una alta inflación. Es un acopio de valor que aumenta si hay inflación. Pero en este caso aumenta porque nadie sabe en qué otra parte colocar su dinero.»
En el cable de WikiLeaks, China afirmó que «EE.UU. y Europa siempre han deprimido el precio creciente del oro», pero ni Weisbrot ni Aizenman piensan que una política semejante tenga lugar o incluso sea posible.
China mantiene actualmente controles estrictos sobre su moneda, y limita que los extranjeros hagan negocios en yuan o comercien en yuan en mercados de divisas extranjeras. Eso podría cambiar en los próximos cinco años, según el reciente anuncio del gobernador
Xiaochuan.
Mediante la posesión de reservas tan grandes de moneda estadounidense, y el control del yuan, China puede mantener más baja su moneda que si fuera flotada libremente. Eso hace que las exportaciones chinas sean más baratas.
La relación, en la cual la inversión china en bonos del gobierno de EE.UU. permite tasas bajas de interés para que los estadounidenses compren productos chinos, ha funcionado bien en los últimos 15 años. En 2010, EE.UU. tuvo un déficit de 273.100 millones de dólares con China.
«Pagamos nuestras deudas en dólares de modo que podemos imprimir dinero para pagar nuestras deudas internacionales», dijo Weisbrot a Al Jazeera. Debido al status del dólar como moneda de reserva, EE.UU. «puede mantener indefinidamente déficit comerciales» mientras pide prestado internacionalmente sin serias repercusiones, otorgando una «gran ventaja» a la mayor economía del mundo, dijo.
Si el oro, el yuan, o una combinación de otras divisas reemplazaran el dólar, EE.UU. perdería esa ventaja.
Sin un sustituto a corto plazo, nada reemplazará al dólar como moneda de reserva del mundo por lo menos en los próximos cinco años. Pero nada dura eternamente. «Cuando ellos [China] quieran que el dólar caiga, dejarán que pase», dijo Weisbrot. «El dólar terminará por caer pero eso podría ser algo muy lejano».
A pesar de la suerte del dólar, otro cable de WikiLeaks muestra algunas de las ambigüedades más amplias de la relación económica más importante del mundo, o «ChinAmérica», como la ha bautizado el historiador Niall Ferguson.
«Nadie habría predicho en 1979 que China se convertiría en la relación más importante de EE.UU. en treinta años», señaló el cable. «Nadie puede predecir actualmente con certeza dónde estarán nuestras relaciones con Pekín dentro de treinta años».
Chris Arsenault está en Twitter: @AJEchris
Chris Arsenault, es productor en la web de Al Jazeera, y vive en Doha. Antes de unirse a Al Jazeera fue periodista de la agencia noticiosa Inter Press Service. También ha informado para CBC radio, Halifax Chronicle Herald y docenas de revistas. Su trabajo se concentra en el norte y el sur de América, geopolítica, mercados energéticos y movimientos sociales. Formado en Canadá, es licenciado en historia y economía de la Universidad Dalhousie y tiene una maestría en historia (tesis pendiente) de la Universidad de British Columbia, donde obtuvo la Beca Phil Lind de 2008/09. Arsenault ha sido profesor invitado en la Universidad de Toronto, Queen’s University, York University, Laurentian, Saint Mary’s University y la Universidad Anáhuac in Ciudad de México. Su primer libro lleva el título Blowback: A Canadian History of Agent Orange and the War at Home.
Fuente: http://english.aljazeera.net/
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