La crisis del mercado hipotecario en Estados Unidos pasó en el cuarto trimestre de 2007 una factura de 9 mil 833 millones de dólares en pérdidas para Citigroup, uno de los cinco mayores grupos financieros del mundo. Los resultados de la multinacional en su casa matriz fueron compensados por sus operaciones en mercados en desarrollo, […]
La crisis del mercado hipotecario en Estados Unidos pasó en el cuarto trimestre de 2007 una factura de 9 mil 833 millones de dólares en pérdidas para Citigroup, uno de los cinco mayores grupos financieros del mundo. Los resultados de la multinacional en su casa matriz fueron compensados por sus operaciones en mercados en desarrollo, de manera destacada en México, que se confirmó como uno de los países más rentables para la banca extranjera.
«Nuestros resultados financieros en este trimestre (el cuarto de 2007) son claramente inaceptables», resumió Vikram Pandi, director general de Citi, según un comunicado emitido ayer.
Se trata de las mayores pérdidas para un trimestre en 196 años de historia del consorcio.
En todo el ejercicio fiscal 2007, Citigroup, el principal banco estadunidense, logró ganancias por 3 mil 617 millones de dólares, unos 39 mil 680 millones de pesos, cantidad que reflejó un desplome de 83 por ciento en comparación con 2006. Un dato a destacar es que la mitad de esas ganancias fue obtenida por sus operaciones en el mercado mexicano, en el que es propietario de Banamex.
Según la información divulgada ayer, Banamex logró en 2007 ganancias por mil 827 millones de dólares, unos 20 mil millones de pesos, cantidad menor en 8 por ciento a la de 2006.
Los resultados de Citigroup son un reflejo de la catástrofe que para varias de las mayores firmas financieras del mundo está representando la crisis de las llamadas hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos. Se trata de préstamos para vivienda otorgados sin garantías y que luego fueron intercambiados a través de mercados secundarios. Préstamos que ahora no se están pagando y que afectan de manera creciente los balances de los bancos en Estados Unidos y Europa.
Entre octubre y diciembre de 2007, Citigroup resintió pérdidas por 9 mil 833 millones de dólares, cifra que contrastó con las registradas en el mismo periodo de 2006, cuando las ganancias sumaron 5 mil 129 millones de dólares.
En el cuarto trimestre de 2006 la rentabilidad de las operaciones en México también destacó en el conjunto. Banamex obtuvo, entre octubre y diciembre pasados, utilidades netas por 482 millones de dólares, unos 5 mil 300 millones de pesos, cantidad que aunque menor en 16 por ciento respecto al mismo periodo de 2006, fue 4.2 veces mayor a, por ejemplo, las ganancias que Citi obtuvo en Japón, la segunda mayor economía del mundo: 91 millones de dólares, en el mismo periodo.
Citigroup explicó que su «pobre rendimiento» en el último trimestre «fue impulsado principalmente por dos factores: cancelaciones y pérdidas significativas en nuestras exposiciones directas subprime (como se refiere a las hipotecas concedidas sin garantía) y un gran aumento en costos crediticios en la cartera de créditos al consumo en Estados Unidos».
El resultado que reportó este martes Citigroup, aunque era anticipado, hizo crecer el temor de que la crisis de los mercados hipotecarios se extienda por más tiempo y con consecuencias todavía difíciles de anticipar.
Citigroup, por ejemplo, anunció que creará una provisión de 18 mil 100 millones de dólares para su cartera de créditos hipotecarios de alto riesgo, a la vez que alista el recorte de 4 mil 200 empleos, aunque no precisó las plazas en las que realizará los ajustes. En México no hay reporte de ajuste de personal.
El inglés Financial Times divulgó que Citigroup y Merrill Lynch, otra firma afectada financieramente por la crisis hipotecaria, aceptarán en conjunto fondos de inversionistas privados o gubernamentales de Asia y Medio Oriente por 21 mil 100 millones de dólares para capitalizarse.
Citi obtendrá 14 mil 500 millones de dólares y Merrill Lynch otros 6 mil 600 millones de dólares de fondos privados o gubernamentales de Asia y Medio Oriente, en lo que el diario británico llama «la mayor transferencia de capital hacia bancos de Estados Unidos».
Un reporte de Bear Stearns, actualizado a diciembre, ubica en 91 mil 100 millones de dólares las pérdidas de instituciones financieras estadunidenses derivadas de la crisis en el mercado hipotecario en aquel país.