Una verdadera clase magistral sobre integración, y las diferencias del concepto para Latinoamérica y Estados Unidos, ofreció el presidente venezolano Hugo Chávez en la Universidad Federal de Río de Janeiro. El mandatario venezolano, quien asistió aquí a la XVIII Cumbre del Grupo de Rio, fue declarado anoche presidente de honor de la Unión Nacional de […]
Una verdadera clase magistral sobre integración, y las diferencias del concepto para Latinoamérica y Estados Unidos, ofreció el presidente venezolano Hugo Chávez en la Universidad Federal de Río de Janeiro.
El mandatario venezolano, quien asistió aquí a la XVIII Cumbre del Grupo de Rio, fue declarado anoche presidente de honor de la Unión Nacional de Estudiantes (UNE), título que antes recibió el mandatario cubano Fidel Castro.
«La integración es el único camino hacia nuestra liberación», dijo y se preguntó de qué tipo de integración hablamos, porque desde Norteamérica también hablan de ello, «y hay una propuesta llamada ALCA, pero es desintegradora, aniquiladora, colonialista».
Señaló que el 9 de diciembre se celebrará en Perú una cumbre para crear la Comunidad Sudamericana de Naciones, al cumplirse 180 años de la batalla de Ayacucho.
Desde entonces (1824) se comenzaba a perfilar la lucha entre dos modelos, dijo y señaló que el Libertador Simón Bolívar convocaba a la integración de los pueblos que estaba liberando y casi al mismo tiempo el presidente estadounidense James Monroe proclamaba «América para los americanos».
«Bolívar lanzó una frase lamentablemente profética: «Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad», recordó.
Chávez dijo que hasta ahora se ha impuesto la doctrina Monroe, pero de este siglo no pasa sin que la derrotemos y digamos Latinoamérica para los latinoamericanos.
Estamos -señaló- en un punto crucial, en una verdadera encrucijada, con dos opciones: seguir el mismo camino por el que nos han venido empujando durante siglos, o torcer el rumbo, y existe potencial para torcer el rumbo de la historia en estas tierras.
A continuación recordó la sentencia popular de que a la tercera es la vencida, al referirse a cómo fueron escamoteadas las guerras por la independencia y cómo fracasaron los movimientos revolucionarios de las dos primeras décadas del siglo pasado.
El mandatario expresó que la tercera oleada ya comenzó, pero aclaró que la victoria no está a la vuelta de la esquina, porque será una larga jornada hacia una América Latina unida, libre e igualitaria.
Seguidamente se refirió a propuestas integracionistas formuladas por su gobierno, en primer lugar la creación de Petrosur, como alianza petrolera energética de los países sudamericanos, a partir de los recursos de Venezuela, Bolivia, Argentina, Brasil y otros.
Reveló que esto se está conversando con Lula, avanzando en el diseño, y con ese fin la próxima semana viajará a Caracas la ministra brasileña de minas y energía, Dilma Rousseff.
Tras comentar que recomendó a sus colegas del Grupo de Río, por dignidad, no hacer más pedidos de flexibilidad al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial, fundamentó la propuesta de crear un banco sudamericano.
Explicó que este recibiría una parte de las reservas de la región y con ellas concedería préstamos en condiciones favorables a los países y sus empresarios.
Chávez indicó que los países sudamericanos tienen depositados unos 200 mil millones de dólares en bancos del Norte, que operan con ese dinero y hasta se lo prestan a sus dueños, quienes así contraen deudas impagables.
Se refirió también a su propuesta de crear la Televisora del Sur y dijo que inclusive se puede integrar a las Fuerzas Armadas en una organización militar del sur de América.