La Habana, 7 feb (AIN) La Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) es el único modelo de integración válido que puede generar desarrollo social y humano para los 500 millones de latinoamericanos aseguró hoy aquí el catedrático y luchador social Claudio Katz. En el VIII Encuentro Internacional sobre Globalización y Problemas del Desarrollo, afirmó que […]
La Habana, 7 feb (AIN) La Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) es el único modelo de integración válido que puede generar desarrollo social y humano para los 500 millones de latinoamericanos aseguró hoy aquí el catedrático y luchador social Claudio Katz.
En el VIII Encuentro Internacional sobre Globalización y Problemas del Desarrollo, afirmó que la integración en este siglo XXI tiene dos nombres: ALBA y Socialismo.
En una de las ponencias más aplaudidas del segundo día del evento, el autor expuso que el futuro de la región se dilucidará, en gran medida, por el proyecto integracionista que prevalezca: el Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA), el Mercado Común del Sur (MERCOSUR) o el ALBA.
Sobre esta última abundó que está en fase inicial de ideas, propuestas y estrategias, pero ya captó el interés de los pueblos al hablar el lenguaje del antimperialismo, la complementación de las economías, la equidad, el respeto al medio ambiente, la solidaridad y las reivindicaciones sociales.
Katz consideró que al dar los primeros pasos como la creación de Empresur, PetroCaribe y las acciones de intercambio productivo y social entre Venezuela y Cuba, entre otros, el ALBA exhibe un potencial demostrativo de que una integración popular es posible.
En ese camino debe seguir perfilándose, en aspectos como la creación de un Banco del Sur, la necesidad de que los pasos que se dan en la rama energética vayan en favor de la sociedad y que se profundice el intercambio comercial, dijo.
Ya este proyecto ha desafiado el sistema hegemónico vigente, especificó el autor al debatir el tema con participantes provenientes de varios de los 35 países presentes, pero insistió que su legitimidad estará en que realmente genera cambios sociales.
Consideró que el momento es favorable, pues las tesis neoliberales están desprestigiadas, el imperialismo yanqui se empantanó en Irak, y como resultado de las rebeliones sociales la correlación de fuerzas va cambiando a favor de la izquierda y sectores progresistas.
Sin embargo, Katz alertó que el ALCA está herido, pero no derrotado, pues hay una fuerte contraofensiva de Estados Unidos que ha firmado tratados bilaterales de libre comercio con varios países y discute su rúbrica con otros.
Como la asimetría de las economías es tan profunda, el ALCA solo aumentará la pobreza, la dependencia y el saqueo de la región, aseveró.
Acerca del MERCOSUR lo calificó de unión aduanera con múltiples limitaciones por ser la expresión de sectores de poder de los cuatro países que lo fundaron en 1990, aunque la reciente incorporación de Venezuela como miembro pleno le dan un nuevo matiz a sus proyectos.
De todas formas, el ALBA es un modelo popular postliberal para integrar naciones hermanas, y por esencia debe ser anticapitalista, concluyó.