I Obama visitará en marzo a Cuba y a Argentina. ¿será esa la muestra de los nuevos acercamientos que calladamente su gobierno cultivó largo tiempo para mejorar la eficiencia del imperio frente a fracasos ya reconocidos en sus prácticas convencionales de torcer brazos de pueblos rebeldes? El actual entorno internacional muestra su tolerancia ante agresiones […]
I Obama visitará en marzo a Cuba y a Argentina. ¿será esa la muestra de los nuevos acercamientos que calladamente su gobierno cultivó largo tiempo para mejorar la eficiencia del imperio frente a fracasos ya reconocidos en sus prácticas convencionales de torcer brazos de pueblos rebeldes?
El actual entorno internacional muestra su tolerancia ante agresiones de hecho respaldadas según prácticas especializadas y aparentemente dispersas y puntuales, resultantes de investigaciones y preparaciones elaboradas por centros de análisis profesionalizados en el estudio integral de preparados tropiezos económicos y políticos contra los grupos sociales bajo ataque.
La ambigüedad de las defensas de los atacados, frecuentemente atadas por prácticas «tradicionales» demasiado vinculadas a lo «seguro» de lo por largo tiempo impuesto a pueblos forzados a cumplimientos de dogmas «apolíticos» incuestionables, como la propiedad privada, determinante en las relaciones estado-familia, han limitado gravemente las defensas de movimientos políticos orientados a jerarquizar la justicia social.
Transcurrió un siglo de experiencias «socialistas» sin ejercicio efectivo de la práctica popular de actuar sensiblemente sobre los recursos estatales, la que al conocer y decidir sobre ellos según actuaciones que llegaran a cada persona según alcances así madurados, convirtieran esos «socialismos» en vivencias personales de propiedad compartida entre millones, y coexistieran con sus tradicionales propiedades familiares.
Ejercitación compleja para sociedades de millones de habitantes, atribuido a las decisiones de grupos de propietarios activos reconocidos como gobernantes o funcionarios ocupados desde el estado en la justeza de sus decisiones a favor de la comunidad, pero sin participación activa de ésta, y en consecuencia sin haber ejercitado y aprendido, en colectivo, un ejercicio participativo social hasta hoy apoyado básicamente en las prácticas privadas, por siglos educadas en diferenciar lo propio y lo ajeno, y así también practicadas sobre lo estatal. [1]
Ello puede ayudar a explicar que la única elección perdida por Chávez en Venezuela fuera la reforma constitucional favorable a un socialismo disfrutado, pero nunca ejercitado por cada persona, y por ello hubiera aprendido a identificarlo como naturalmente coexistente con sus propiedades individuales y familiares. Ejemplos de las nuevas defensas planteadas por la dirección revolucionaria venezolana ante los antes imprevistos triunfos del tradicionalismo incuestionado de la propiedad privada sobre el intangible socialismo participativo sobre la propiedad estatal, parecen derivarse del rechazo al parecer ya activo y responsable a las antes publicitadas inyecciones financieras gubernamentales a empresarios privados, supuestamente cumplidores de su aseguramiento al apoyo inmediato al socialismo popular por su destino social, y que de hecho mantuvieron y reforzaron prácticas privatizantes de lo estatal -de todos- al nutrirse como ejecutores y prestatarios de buena parte de los servicios, como importar, almacenar, distribuir, valorar y vender con su impune y privado criterio.
II En Argentina, con equilibrios ideológicos de justicia no necesariamente socialistas, y cuidadosos del status tolerado por las élites de poder económico y militar, la propiedad privada era intocable para el Estado ante abusos evidentes de los poderes privados, dejados intactos, frente a imposiciones privadas sobre transportes, producciones agrícolas o prensa , ya con la privada ahora adueñándose de la estatal, junto a las reservas financieras estatales largo tiempo acopiadas por el esfuerzo colectivo de la nación. Mermado el relevo generacional de su dirigencia patriótica por la aplicación del bien rectorado Plan Cóndor yanqui, y la inmediata ocupación de los archivos de la trabajosamente rescatada Memoria Histórica, y consecuente intento de reivindicación de represores ya «sin causa confiable». La lenta maduración imperial de acercamientos modernizantes a élites encapulladas en lo legal, lo económico y lo represivo, siempre dispuestas al nuevo asalto, propicia ahora la presentación de una aparente cosecha, significativamente ventajosa para la élite imperial, mientras la población, que ya demostró cómo eliminar gobiernos serviles, se mantenga represiva y silenciadamente «ordenada», no importa si por vía del desempleo selectivo, con cien mil en dos meses, por encarcelamientos impuestos, o por migajas para actualizados revisores de las antes «inaceptables» defensas de los intereses de las multimillonarias entidades privatizantes.
Cuba también ha sufrido la falta de desarrollo en la generalizada formación de propietarios activos de lo estatal en toda su población. Ya evidenciado desde la segunda reforma urbana (1984) en que se cambiaba la propiedad de la vivienda, estatal gran parte de ella a partir de la primera reforma, a propiedad privada de sus ocupantes según la nueva reforma establecida, la que se planteó era respuesta a la demanda popular de hacerlo. No se demostró tal «demanda popular» tras más de un año de exhortaciones públicas a proceder a los pasos legales para formalizar tal demanda, sobre la que no mostraba interés la población, despreocupada por formalidades legales de la propiedad de su vivienda, sabiéndola asegurada según la experiencia y el medio social hasta entonces vividos. [2]
Otra posible motivación para la privatización así generalizada de la vivienda la ofreció como alegre comentario de pasillo un funcionario encargado de informar los cumplimientos estatales en sus planes de mantenimiento constructivo, pues ya no tendría que inventar razones para sus sistemáticos incumplimientos, así trasladados a sus nuevos propietarios privados, para cuando sus condiciones personales, y las territoriales favorables, les propiciaran su ejecución… y el tiempo mostraría en sus resultados urbanísticos, ya con responsabilidad aminorada, por compartida y dispersa, del funcionariado estatal.
III Los objetivos de Obama en relación a Cuba han sido claramente definidos y reiterados en el sentido de lograr el éxito no alcanzado previamente de cambiar las relaciones del pueblo norteamericano con el cubano, de modo de alcanzar el mejoramiento de las condiciones de vida de ambos pueblos, especialmente del cubano requerido de un más aceptable tratamiento de sus derechos humanos. [3] Así también, lograr un mejor acercamiento a otros pueblos y gobiernos distanciados de EEUU por el prolongado tratamiento anticubano de los gobiernos yanquis, desatentos a su creciente rechazo internacional. Obama transfiere la eliminación del bloqueo a la voluntad del congreso, sin mención de los múltiples aspectos que Cuba señala como dependientes de su propia decisión ejecutiva, y que ocasional y selectivamente afloja, manteniendo todo el restante bloqueo condicionado a votaciones congresionales que conoce no cambiarán en el tiempo que le queda de mandato, con dos líneas ejecutivas gubernamentales en que coexisten y actúan paralelamente, una a favor de mejorar las relaciones con Cuba, y otra de terminar impunemente de asfixiarla. Cuba no establece tratamiento diferenciado alguno, salvo el declarativo, ante uno y otro comportamiento.
Los deseos manifestados por Obama de cambiar la mentalidad y estructura de la población cubana de hecho los apoya sin afectar el núcleo de la ley Helms-Burton que sólo dedica una sección al bloqueo. Así facilita la remisión de dinero a cubanos privados, elegidos por sus donantes sin justificación para Cuba y su sistema financiero, o pactar negocios con personas desvinculadas del estado, facilitados por las nuevas leyes cubanas favorables a la captación de divisas, e incluso con el propio estado si renuncia expresamente a beneficiarse con la producción material que facilite crear como maquila, con espacio y obreros, como los que ya sirvan para montar tractores, por ejemplo.
Tras el éxito frustrado de una primera sección orientada al derrocamiento del gobierno de los Castro mediante el publicitado bloqueo ya aplicado desde muchos años antes de su formulación en la ley, sus demandas se seguirán aplicando con toda su internacionalizada «legalidad» yanqui, sin que se trate públicamente por el momento, en apoyo a su objetivo explícito de destruir la sociedad cubana según establecen sus invisibilizadas Secciones 2 y 3.
El facilitar la avalancha de dinero en una población largo tiempo afectada por un mercado desabastecido, y ahora saturado por mercaderes con precios desregulados, promueve una disponibilidad de candidatos nativos para negocios de todo tipo, con ingresos de cualquier magnitud y origen, y propósitos financistas cualesquiera en un medio mercantil prácticamente virgen. Los negocios inmobiliarios, con importantes inversiones en reconstrucciones de viviendas, y prácticamente abierto a significativas ganancias futuras para sus financistas externos, tanto para su disfrute directo como para limpiar ignorados orígenes borrosos, son otra vía de cambiar el estilo de vida cubano sin que la fundamental ley del bloqueo haya tenido que desactivarse totalmente, con sus secciones declaradamente genocidas acompañantes.
Ya el ciudadano común norteamericano podrá contar con una nueva plaza tropical cercana, propicia al esparcimiento en ambiente sano, culto, seguro y económico, con más de cien aviones diarios facilitando breves escapadas familiares o personales que no afecten sus compromisos laborales, o prolongadas estancias que numerosas facilidades habitacionales, rentadas o también propias, regalen el clima y la relajación integral que ingratos inviernos propios inviten a soslayar. Además de la muy cordial convivencia que naturalmente podrán encontrar con la población cubana, también dispondrán de nativos bien formados en la atención al visitante externo y protegidos por sus ingresos privilegiados, [4] y otros relacionados a renglones económicos genéricamente estimulados por financiamientos externos, directa o indirectamente vinculados a interpretaciones del bloqueo.
IV En el siglo XXI, con textos universitarios de economía que todavía justifican el capitalismo de estado por su formato predecesor del socialismo [5], y colaboración de fundaciones como la de la socialdemocracia alemana en la conformación del nuevo modelo socialista cubano, [6] Cuba logra en un trienio más de medio millón de trabajadores por cuenta propia, lo mismo propietarios gerenciales que empleados, hermanados todos en el mismo sindicato, que deberán basar su sustento y de los suyos (más de millón y medio de personas totales) en el lucro personal que el estado ya no les ofrece según lo reclamado por la central sindical nacional de racionalización del aparato estatal, sin una complementaria demanda de trabajo para los así desempleados. [7] Se evidencia el peso ya dado por Cuba a la propiedad privada y a sus motivaciones laborales nuevas, antes adormecidas por el paternalismo estatal, que hacen reconocer y publicitar, en su Conferencia del Partido de 2012, la futura revisión del artículo constitucional que prohíbe la explotación del hombre por el hombre. [8]
V La Ley Helms-Burton, la defendida internacionalmente por el gobierno yanqui como obligación estatal de aplicar a escala mundial, y así se la acepta de hecho sin denuncia ni sanción internacional alguna, establece claramente en sus secciones 2 y 3 lo que deberá asegurar el representante personal que nombre el Presidente de EEUU para Cuba, con asesores instalados en todas las dependencias del así intervenido gobierno cubano sin importar que sea provisional o elegido democráticamente.
Todos los mandatos de esa ley estatal yanqui en sus actuaciones anticubanas deberán mantenerse activos hasta que ese representante personal del Obama de turno le informe que todos los detallados cumplimientos que esa ley exige para la organización social, la economía, la educación, la salud pública, la agricultura, la industria, la policía y el ejército, la prensa, la justicia y cualquier otro aspecto que consideren útil, ya se habrán adoptado por los cubanos, y en consecuencia ya el Presidente podrá recomendar al Congreso la erogación de esa Ley. Ello incluye el mandato de cualquier juez norteamericano que dictamine desde su tribunal la obligación de que el supuesto propietario cubano que esté ocupando una propiedad en Cuba deberá entregársela al norteamericano que el juez le ordene, y las autoridades cubanas así deberán asegurarlo.
El carácter genocida de esta ley es presentado abiertamente por un gobierno, quizás único en el mundo, que así proclama detalladamente la destrucción de la organización social y física de los habitantes de otro país. Por las razones que la diplomacia quizás explique, sus alcances han sido sistemáticamente públicamente invisibilizados para el logro de los acercamientos por años conciliados, limitando la agresión al «bloqueo» de la sección 1 de esa ley.
Genocidio claramente establecido por la convención internacional de la ONU de 1948, la que en modo alguno lo limita a «matanza de población inerme», lo declara imprescriptible para sus ejecutores, tanto directos como colaboradores y promotores, y tanto gobernantes, como funcionarios o particulares. [9] Los no convencionales logros alcanzados en ese acallado genocidio, con miles de muertos e impedidos ya denunciados por Cuba, y las ambiguas formas que hoy adopta para «modernizar desde fuera» su cultura y economía nacional, dependerán esencialmente de la probada sabiduría popular para enriquecer creadoramente sus principios nacionales, e integrarlos a su incuestionado Partido rector.
La compleja situación internacional se caracteriza por genocidios de pueblos enteros que se exhiben sin denuncia ni sanción internacional alguna contra sus promotores y colaboradores individualizados, actuantes desde la dirección de estados nacionales y agrupaciones de ellos, de conjunto con complejos transnacionales de todo tipo, y la colaboración de ejércitos de militares, de publicistas, de financistas y de aplaudidos servidores como políticos, productores, transportistas, distribuidores, intelectuales e investigadores.
Es de reconocer el efecto que arbitrarias sanciones de unos países aplican sobre otros, con apoyos internacionales sordos a las denuncias de su ilegalidad internacional, conducen a ciertas adecuaciones que sin representar derrotas totales para sus agredidos concesionarios, propician las conciliaciones que históricamente siempre han sido ventajosas para los más fuertes, quienes apoyados en imposiciones previas ya actuantes, cumplen o no, a su libre criterio, lo que novedosamente sus negociadores puedan acordar con sus nuevos, bienintencionados y conciliatorios concesionarios.
VI Frente a la división interna del aparato gubernamental yanqui con activos ejecutores de medidas favorables o lesivas a la pac ífica sobrevivencia de una sociedad cubana hoy no encasillada como terrorista internacional aunque ya lo ha sido, y cualquier gobierno yanqui es capaz de atacarla como ya ha hecho con otros, y frente a una ley genocida de vigencia desconocida y hasta ahora invisibilizada en las discusiones públicas para el acercamiento deseado, parece conveniente ir estableciendo una ley cubana de defensa antigenocida, pionera en lo internacional, que establezca el reconocimiento público del comportamiento delincuencialmente genocida de quienes individualmente apliquen contra Cuba cualquiera de las cláusulas de la Ley Helms-Burton, y un tribunal cubano juzgue a los acusados independientemente de su nacionalidad o de su cargo estatal o empresarial.
Quienes resulten condenados, no importa si con un dólar de multa o cadena perpetua, serán reclamados internacionalmente a Interpol y a cuantas organizaciones procedan, internacionales o del país de los sancionados, y así deban responder internacionalmente por su actuación genocida. Las miles de víctimas de la agresión genocida que indefinidamente sufre Cuba serán así mejor visibilizadas con la identificación de delincuentes de numerosos países. Los «escándalos no convencionales» que convencionalmente surjan ayudarán a romper el anonimato de los que se vayan identificando como nuevos a partir de esa nueva ley. ¿Cuántos delincuentes genocidas gubernamentales y empresariales, desde dirigentes hasta ejecutores, serán identificados a partir de la aplicación de una nueva multa bancaria yanqui, o cualquiera otra? ¿Cuántos más se destaparían si más países legalizaran el «ataque genocida no convencional» que de tantas formas se dejan convencionalmente ambiguos y anónimos, como sus creadores imponen?
Otra demanda cubana públicamente ignorada por el gobierno yanqui es la devolución de la Base Naval de Guantánamo robada al pueblo cubano a condición de sólo así retirar sus tropas ocupantes del territorio nacional en 1902, mientras sin conocimiento cubano masacraban la población filipina negada a abandonar la lucha por su independencia nacional. Base naval convertida en cárcel de torturas inhumanas en apoyo a una lucha antiterrorista mundial basada en el derribo de tres torres de muy poderosas estructuras de acero en Nueva York el 11-9-2001 (11S) por el impacto de sólo dos aviones, y otros numerosos hechos inconciliables con su explicación por el gobierno que así se convirtió en el primer promotor del terrorismo internacional del siglo XXI. En el reconocimiento de la actual confrontación surgida por el rechazo yanqui a considerar la liberación para Cuba de la Base Naval de Guantánamo, bien cabe emplazarlo internacionalmente a que explique los hechos del 11S, y los fundamentos históricos y éticos que justifiquen su rechazo a devolver un territorio cubano sólo explicado por su impuesta ocupación militar.
VII Si en Argentina el nuevo gobierno nada prometió, salvo ambiguos cambios que le autojustificaran el desmontaje atropellado de lo construido por lustros de esfuerzo popular, en Cuba ya se anuncia un VII Congreso del Partido para abril de 2016 que definirá el socialismo que todavía no esboza ante la población que deberá apoyarlo masivamente. Ante las confusas y contradictorias interpretaciones hoy dadas a un término que por su trascendencia puede afectar la propia sobrevivencia de la especie humana, será conveniente conocer cómo se conformará para Cuba, en particular, en lo relativo a sus vínculos con la secreta y ya tangible «Unión Mundial de Empresas Transnacionales». Han sido altamente valorados por la prensa cubana los modelos socialistas adoptados por la República Popular China, [10] y por la República Socialista de Viet Nam. [11] Esta última ya es firmante del acuerdo del Tratado de Libre Comercio TransPacífico (TTP), todavía secreto tras años de discusiones internacionales, y denunciado como de entrega de los gobiernos nacionales, los comprometidos supuestamente con sus pueblos, a la muy secreta unión de transnacionales, ya facultadas a imponer sus demandas a los gobiernos firmantes del TTP, que aceptan cumplirlas por dictamen de un Tribunal Colegiado Internacional rectorado, nada casualmente, por el gobierno públicamente gestor del genocidio de Cuba,
Convendrá valorar en la autodeclaración nacional de «Nación bajo agresión genocida no convencional» que pueda legislarse, la práctica sostenida por algún gobierno extranjero que sin ser acusado directamente como «agresor no convencional», pueda señalársele como carente de confianza internacional para el atacado. Ejemplo de posible señalamiento respecto a ´muchos países podría señalarse al norteamericano, al caracterizarlo como Gobierno agresor «convencional», de pueblos no declarados «enemigos», sino «amigos» como Santo Domingo, Granada y Panamá, o sin fundamento probado internacionalmente, como Afganistán e Irak, y «no convencional» , con nada disimulados resultados genocidas de otros como Palestina, Libia, Ucrania y Siria. Reiterado agresor del pueblo hermano de Venezuela con una orden ejecutiva presidencial equivalente a una declaración de guerra no convencional contra un pueblo de demostrados lazos de hermandad con Cuba y otros, y que junto a todos los países caribeños y latinoamericanos se han autodeclarado Zona Internacional de Paz. Gobierno con el mayor presupuesto militar del mundo , con sus bases militares tanto nenúfares como convencionales pendientes de justificar en todo el mundo, el gobierno estadounidense ya ha demostrado, incluso con su presidente todavía en funciones, su capacidad de secuestrar desde esas bases a presidentes de países soberanos en ejercicio, como hizo con Haití y con Honduras,
VIII Al repasar la ponencia de Heinz Dieterich presentada en Berlín en junio de 2010 «El plan para destruir a Cuba», [12] y apreciar sus notables semejanzas con el presente entonces alertado, amerita revalorar el papel mediático de la iglesia católica y su consistente doctrina social, la hoy promotora de perdones entre opuestos indiferenciados, en eternos y prometedores futuros carentes de los siglos de historia que hoy nos dan la vida presente, sin olvidar al no siempre compasivo Dios, y la permanente comprensión y alegría que le debemos por ya haber decidido darnos el reino. [13]
La Habana, marzo de 2016
Notas
[1] Estudio de G. Ortega Mendiburu, «Participación social sobre lo estatal», en http://www.rebelion.org/
[2] Periódico Trabajadores, 6-11-1985 y frecuentes exhortaciones en páginas enteras de revistas, como la semanal Bohemia.
[3] Como pudieran tomar los cubanos, como ejemplo insuficientemente promocionado entre muchos otros equivalentes, con la esclavitud moderna de millones de presos norteamericanos, mayoritariamente negros e hispanos, dejados a la custodia libre de sus guardianes privados.
[4] Per. Juventud Rebelde, 6-9-15 p. 2, «Las dos caras», ejemplo de denuncia de conocidos tratamientos diferenciados entre el turismo nacional, y el extranjero.
[5] Tesis de probados resultados en otros países, todavía sostenida para la formación universitaria cubana, sin mención a Che Guevara en las conclusiones del VI Congreso del Partido. Ver B.B, Boldirev y otros, Las finanzas de los estados capitalistas. Edit. Ciencias Sociales, La Habana, 1984, p. 3 y 454-460), y «Economía política de la construcción del socialismo» , Edit F. Varela, La Habana, 368 págs. con 4 ediciones hasta 2007, hace 44 menciones totales a Che Guevara, sólo 12 en sus últimas 243 páginas de perfeccionamientos, junto al total de 170 referencias a Marx y el marxismo, y 107 a Lenin y el leninismo.
[6] Con talleres y ediciones conjuntas, a saber entre 1999 y 2015 , y en colaboración con la Universidad de La Habana, el Ministerio de Economía y Planificación y el Banco Central de Cuba, la Fundación Friedrich Ebert sostiene su declarada promoción de sus principios fundacionales y valores básicos de la democracia social, en Cuba vinculados a microcréditos, cooperativas, dualidad monetaria, inversión extranjera directa y otros . Lo más reciente : http://www.juventudrebelde.cu/
[7] Pronunciamiento de la Central de Trabajadores de Cuba, http://www.cubadebate.cu/
[8] Aquí merece particular atención lo dos veces presentado por TV y no localizado por la prensa escrita relativo a la prohibición constitucional de la explotación del hombre por el hombre, tratado en la Conferencia del Partido, y soluble por la unánime seguridad anunciada, y callada aceptación, de su oportuno cambio en la Constitución (Cubavisión, 1 y 3- 2- 2012).
[9] Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, ONU, 1948,
page 21 / 22, http://www.acnur.org/t3/
[10] Según ejemplifica Granma sobre el socialismo chino en artículo de Chen Haxing «Sistema político de China, sostén de sus avances extraordinarios» (23-7-2011, p. 5), donde, en lo concreto, «…China… país capaz de atraer a las 500 principales empresas del mundo… constituye una prueba fehaciente de la aprobación universal del sistema chino… y demuestra el voto favorable que el mundo otorga al sistema chino…»
[11] Con reiterada mención a las ventajas del socialismo vietnamita discutido en su XII Congreso del Partido (Granma, enero 5, 6, 15, 19, 22, 26 y feb. 1 y 11 de 2016) ninguna se refiere al TTP ya firmado por ese país..
[12] En http://www.rebelion.org/
[13] Homilías del Papa Francisco en América Latina, y Declaración conjunta del Papa Francisco y del Patriarca Kirill de Moscú y de Toda Rusia. Granma, 13-02-2016, pp. 4-5, párr. 29.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.