Cerca del 60% de las niñas y niños de Latinoamérica y el Caribe viven sumidos en la pobreza, que es creciente y desproporcionada, reveló un informe de la UNICEF. Mientras un 44% de la población total en esta región es pobre, este rezago afecta entre el 56 y el 59% de los menores de 19 […]
Cerca del 60% de las niñas y niños de Latinoamérica y el Caribe viven sumidos en la pobreza, que es creciente y desproporcionada, reveló un informe de la UNICEF.
Mientras un 44% de la población total en esta región es pobre, este rezago afecta entre el 56 y el 59% de los menores de 19 años, constata el análisis sobre el Estado mundial de la infancia 2005.
El subcontinente agrega ‘es además la parte del planeta más desigual del mundo, pues en promedio un 20% de los más ricos obtienen el 60% de la riqueza generada y un 40% de los más pobres sólo un 10%’.
El análisis llama también la atención sobre el hecho que aún cuando constituyen cerca de un 40 por ciento de la población total de la zona, los afrodescendientes y las comunidades indígenas sufren mayores niveles de exclusión y falta de acceso a servicios básicos.
Se estima, puntualiza, que el 92% de los afrodescendientes de la región viven por debajo de la línea de pobreza.
El informe se centra en otros dos elementos que, además de la pobreza, constituyen serias amenazas para la infancia en los próximos años: los conflictos armados y la violencia, y el VIH/SIDA.
En ese sentido subraya la gravedad de la confrontación bélica en Colombia, donde sólo durante 2004 la cifra de desplazados fue de 115.000 personas y en los últimos años cerca de 14.000 niños y niñas fueron utilizados por los grupos armados y las milicias urbanas.
De acuerdo con el reporte, más de 3.000 personas resultaron muertas o heridas en ese país desde 1990, como consecuencia de la presencia de minas antipersonales en cerca de la mitad de los mil 100 municipios de la nación.
Respecto a la incidencia del VIH/SIDA sobre la infancia latinoamericana y caribeña, el informe precisa que de los alrededor de dos millones que viven con el virus, 740.000 son jóvenes de entre 15 y 24 años de edad.
Destaca también el alarmante aumento en el área del número de adolescentes contagiadas mediante el abuso sexual en el entorno familiar y revela que, según estimaciones de la UNICEF, en el 2010 habrá en la región más de un millón de huérfanos menores de 15 años debido a este flagelo.