El próxima lunes (28), se cumplen cuatro años desde la Matanza de Unaí, en la cual fueron muertos tres Auditores Fiscales del Trabajo, un conductor y un empleado del Ministerio del Trabajo. Los cinco fueron asesinados en un camino rural del municipio de Unaí (Minas Gerais), mientras se dirigían a una fiscalización de haciendas de […]
El próxima lunes (28), se cumplen cuatro años desde la Matanza de Unaí, en la cual fueron muertos tres Auditores Fiscales del Trabajo, un conductor y un empleado del Ministerio del Trabajo. Los cinco fueron asesinados en un camino rural del municipio de Unaí (Minas Gerais), mientras se dirigían a una fiscalización de haciendas de la región para evitar la explotación de trabajadores.
Los familiares de las víctimas, el Sindicato de Auditores Fiscales del Trabajo (Sinait) y la Asociación de Auditores Fiscales del Trabajo de Minas Gerais (AAFIT/MG) realizarán una manifestación exigiendo que los responsables del asesinato de Eratóstenes de Almeida Gonsalves, João Batista Soares Lage, Nelson José da Silva y Ailton Pereira de Oliveira sean castigados por el Poder Judicial.
Además, piden que la población adhiera al petitorio y que los sacerdotes celebren las misas del día 28 en memoria de las víctimas. El petitorio firmado debe ser enviado lo más rápido posible al Sinait, que está programando para el próximo día 28 su entrega a las autoridades, pero las firmas podrán continuar siendo recogidas ya que serán entregadas en cualquier oportunidad, pues cuanto mayor es el número de quienes apoyan la causa, más fuerza ella tendrá.
La Policía Federal y el Ministerio Público Federal concluyeron las investigaciones de la Matanza de Unaí, en julio de 2004, a sólo seis meses después de cometido el crimen. La investigación policial dio a conocer la trama del crimen y señaló a nueve personas acusadas de involucramiento como autores intelectuales, intermediarios y ejecutores de los asesinatos. Sin embargo, después de casi cuatro años de la tragedia, los acusados todavía no fueron a juicio.
Los nueve acusados por la policía ya fueron pronunciados por la Justicia, de los cuales seis permanecen en la Penitenciaría Nelson Hungria (en Contagem) y tres se encuentran en libertad. Uno de ellos hasta fue elegido prefecto (alcalde) de Unaí. La impunidad y lentitud que rodea al caso causa indignación en las familias e integrantes de las entidades del gremio de los Auditores Fiscales.
El Sinait y la AAFIT denuncian la demora del Poder Judicial para realizar el juzgamiento. En nota pública, el Sindicato refuerza la lucha de las familias no sólo divulgando las injusticias del caso, sino también apoyando a instituciones que, como la Fiscalización del Trabajo, «son atacadas por su postura en defensa de la parte más débil de un sistema que se apoya en la lógica economicista, en detrimento de la dimensión humana de las relaciones».
«Muchos son los crímenes que todavía están impunes en Brasil, una gran parte cometida u ordenada por empresarios, especialmente del agronegocio, cuando el latifundio y la explotación de seres humanos son motivos de cuestionamiento», agrega la nota.
En carta destinada al presidente Lula, la presidente del SINAIT, Rosa Maria Campos Jorge, dijo que si los crímenes de esta naturaleza no son castigados, «otros que utilizan los mismos modos operativos de violencia se sentirán alentados a practicar nuevos actos de cobardía contra agentes del Estado». Por eso, ella pide además que Lula exija al Poder Judicial agilidad en el proceso para que el juicio sea realizado.
«La Fiscalización del Trabajo, como Vuestra Excelencia bien sabe y de eso ya hizo reconocimiento público, es la institución más cercana del trabajador, que combate las infracciones laborales, contribuye a la generación de empleos formales que generan recaudación para los cofres públicos y directamente para el aumento de la recaudación del FGTS, y colabora en la detección de fraudes fiscales», dice además la carta.
Traducción: Daniel Barrantes – [email protected]