La temática del desarrollo económico encierra una serie de problemas desde el momento mismo en que se busca definir este concepto. Su estrecha vinculación con el crecimiento económico ha vuelto muy importante la necesidad de diferenciar a ambas categorías y comprender las relaciones existentes entre ambas. Este ensayo busca brindar un aporte más a esta discusión.
INTRODUCCIÓN
Crecer: aumentar de tamaño. Aumentar algo en cantidad o importancia.
Desarrollar: hacer que (algo) crezca en tamaño o importancia. Crecer un organismo hasta convertirse en adulto. Progresar o crecer una comunidad humana.
Estas son definiciones generales de los conceptos de crecer y desarrollar, aplicables tanto al sistema económico como a cualquier sistema, organismo, estructura, etc. De hecho son definiciones dadas por la Real Academia Española donde podemos ver dos fenómenos clave en la problemática del análisis de crecimiento y desarrollo en el sistema económico:
- El ‘crecer’ se asocia a una categoría cuantitativa.
- El ‘desarrollar’ no se encuentra claramente separado de la categoría cuantitativa relacionada con el ‘crecer’. De hecho se podría entender que desarrollar significa hacer crecer algo.
- El ‘desarrollar’ se asocia a un cambio cualitativo (´crecer un organismo hasta convertirse en adulto´).
Si nosotros, omitiendo todo tipo de análisis económico y limitándonos (quizá de forma muy superflua) a un análisis morfológico de cada palabra y de sintaxis al asociarlas al concepto de Economía, podríamos suponer bajo un enfoque objetivo1 que crecimiento económico es el aumento en tamaño de alguna magnitud asociada a los procesos de producción, circulación y/o consumo de bienes materiales (mercancías) y que desarrollo económico es el proceso consistente en hacer crecer a susodicha magnitud y convertir o transformar cualitativamente los procesos de producción, circulación y/o consumo.
Es bastante interesante ver que tan solo con un análisis ´de diccionario´ ya nos hemos acercado bastante a las definiciones que comúnmente se escuchan respecto a crecimiento y desarrollo económico tanto como a su relación. Claro que quedan implícitamente aceptados los intereses de clase que llevan consigo las ´inocentes´ definiciones de la RAE, además de no explicitar las condiciones históricas en las que los conceptos de crecimiento y desarrollo económico adquieren importancia (dígase un contexto capitalista industrial, tal vez uno en decadencia o incluso un capitalismo periférico).
EN TÉRMINOS ECONÓMICOS
Es completamente claro2 que el crecimiento en términos económicos se liga con una variable cuantitativa que es el PIB (proceso de producción) por lo que al crecimiento económico se lo define como el aumento sostenido del producto de un país o región. Usualmente se mide como el incremento del PIB real en un periodo de varios años o décadas (Larrain, p36), es decir:
Este concepto es claro: la variación porcentual del Producto, un concepto descriptivo. Pero ¿acaso este concepto incluye a los cambios cualitativos que sufre un sistema económico? Para uno de los pensadores más influyentes dentro de la Teorización Modernizante del desarrollo económico, Walt Whitman Rostow, respecto a la definición de crecimiento económico, él sostiene que este es «delimitar los estados en que la ciencia y la tecnología modernas son absorbidas y difundidas a través de varios sectores y subsectores de la economía» (Lluch).
Pero… ¿asociar a una variable meramente cuantitativa elementos cualitativos no esconde un interés (de clase) en este ejemplo? Cabe recordar que Rostow habla del proceso de crecimiento de una economía por etapas desde una sociedad ´tradicional´ hasta una sociedad ‘moderna’ de consumo a gran escala, con lo que se crea una imagen de crecimiento directamente asociada al desarrollo (por así decirlo) del sistema capitalista graficado en el modelo ideal de, por ejemplo, el American way of live.
Rostow habla de transformaciones en las cualidades dentro del sistema económico (claro que no necesariamente estas transformaciones implican un cambio de sistema). Por eso y remitiéndonos a la idea inicial de que ‘desarrollo’ se asocia (aunque no exclusivamente) al elemento cualitativo, entonces en realidad W. W. Rostow nos da un acercamiento de lo que podríamos aceptar como desarrollo económico, bajo el enfoque de la modernización.
Las transformaciones (¿saltos cualitativos?) parecen ser elementos inherentes al desarrollo. Por ejemplo, acorde a la perspectiva presentada por J. Stiglitz, el desarrollo refiere a una «transformación de la sociedad de una manera integral […] cambiando relaciones (¿sociales de producción?) tradicionales y viejas formas de pensar (¿cambios superestructurales?)» (ÍCONOS 2002, p81)
Pero estas transformaciones no surgen en todos los países poseedores de tasas positivas de crecimiento a lo largo del tiempo. Entonces, ¿qué relación debe existir entre crecimiento y desarrollo? Stiglitz afirma «si es que vamos a hablar sobre desarrollo tenemos que ir más allá de la economía» Y si vamos más allá todavía como sugiere Stiglitz, ¿qué tal un poco de filosofía?
Tal vez la definición de desarrollo económico requiere establecer una relación (al menos general) entre crecimiento económico y cambios cualitativos. Desempolvando una de las ‘leyes’ del materialismo dialéctico, la del tránsito de los cambios cuantitativos a cualitativos3, podemos intuir que los cambios pequeños en los niveles de crecimiento no crean un ambiente propicio al desarrollo, pero si estos cambios superan ciertos límites y generan un nivel tal de acumulación (específicos quizá para cada país o región), se crean las condiciones que vuelven viable el surgimiento de un desarrollo económico expresado por los saltos cualitativos del sistema económico.
Entonces el desarrollo económico es el resultado de ese salto cualitativo dentro del sistema económico facilitado por tasas de crecimiento que se han mantenido altas en el tiempo y que han permitido mantener procesos de acumulación. Evidentemente que los saltos cualitativos no se dan si y solo si se dan acumulaciones cuantitativas de una única variable, pues los saltos pueden ser incluso de carácter exógeno4 y no solo depender de las condiciones internas de un país como supone la visión modernizante.
Pasando a un enfoque estructuralista, se reconoce la importancia del sector externo en las posibilidades de alcanzar el salto cualitativo. Así, el desarrollo económico se expresa (fenomenológicamente) en el aumento del bienestar material, reflejado en el aumento del ingreso real por habitante y condicionado por el incremento de la productividad de la fuerza de trabajo lograda por el aumento gradual de la acumulación de capital, el cual debido a los ‘desfases’ entre los procesos de acumulación de unos países respecto a otros, generan una difusión de la tecnología desigual entre países (enfoque más amplio que el de la absorción y difusión propuestas por Rostow)
La difusión ‘desfasada’ genera una dependencia tecnológica expresada en un proceso de ‘desarrollo hacia afuera’ de los países dependientes de la tecnología durante una primera instancia y el ‘desarrollo hacia adentro’ provocado cuando existe la incapacidad de acceder a los mercados internacionales. (Rodríguez, p105-106).
Como puede observarse, se mantiene en este enfoque la necesidad de hacer crecer la producción (por medio del aumento de la productividad) para alcanzar un mejor bienestar. Así en el fondo se expresa que la relación entre crecimiento y desarrollo es la oportunidad que tasas altas de crecimiento brindan para generar procesos de acumulación que a su vez generen saltos cualitativos en el sistema económico. Estos procesos permiten aumentar por ejemplo los stocks de capital vía inversión real, lo que a su vez incrementa la productividad de la fuerza de trabajo.
Pero repitamos, lo que se crea es una oportunidad, no se crea el desarrollo en sí. Es más, hay quienes ven en el decrecimiento económico una oportunidad para el desarrollo, implicando reducir las dimensiones de las infraestructuras productivas, administrativas y de transporte, a más de generar una sobriedad y simplicidad voluntaria (Taibo)
En este caso, el salto cualitativo exigido podría darse por ejemplo a través de una mejor distribución de la riqueza ceteris paribus. Por ende no hay una relación única y fija en el tiempo entre crecimiento y desarrollo, sino, al igual que este ensayo, una relación sombría, tipo telaraña confusa quizá similar a la relación entre una estructura y una superestructura que supera la esfera económica, pues en realidad al hablar de desarrollo económico, paradójicamente no solo hablamos de saltos cualitativos en el sistema económico, sino una mejora en la calidad de vida de las personas (especialmente en términos materiales), procesos de sustentabilidad, estabilidad política y demás factores que en realidad asocian al término de ‘desarrollo’ a un carácter normativo que no puede ser estático (y por ende, no puede ser único).
Pero de algo sí se puede estar seguros en cuanto a la relación crecimiento-desarrollo económico: «El crecimiento por el crecimiento es la ideología de la célula cancerígena»5
TEXTOS CONSULTADOS
- «Diccionario práctico del estudiante«. Real Academia Española. 2009
- LARRAIN FELIPE, Macroeconomía en la práctica, Pearson Educación, 2004
- LLUCH ERNEST, El desarrollo económico, entrevista a Walt Whitman Rostow, Biblioteca Salvat, 1974
- STIGLITZ JOSEPH, El desarrollo no es solo crecimiento del PIB, ICONOS, 2002
- AFANASIEV VÍCTOR Fundamentos de Filosofía Marxista, Editores Mexicanos Unidos, 2000
- RODRÍGUEZ OCTAVIO, Fundamentos del estructuralismo latinoamericano, Instituto de Economía, Montevideo Uruguay, 2001
- TAIBO CARLOS, En defensa del decrecimiento, http://www.ecoportal.net/
content/view/full/84959
- SAMUELSON PAÚL, Microeconomía, Mc Graw Hill, 2004
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