(1´51´´ / 438 Kb) – Después de casi un año en vigor, la Ley Maria da Penha – que prevé una pena de hasta tres años de cárcel en casos de agresiones domésticas contra las mujeres – ya redujo en casi 20% el número de denuncias en las Delegaciones Policiales de Mujeres en el estado […]
(1´51´´ / 438 Kb) – Después de casi un año en vigor, la Ley Maria da Penha – que prevé una pena de hasta tres años de cárcel en casos de agresiones domésticas contra las mujeres – ya redujo en casi 20% el número de denuncias en las Delegaciones Policiales de Mujeres en el estado de San Pablo, al sudeste brasileño. De octubre del año pasado hasta marzo de este año, fueron registradas aproximadamente 133 mil acusaciones y ocurrencias. En el mismo período entre los años de 2005 y 2006, el número era de casi 164 mil.
Aun con esa disminución, no es posible afirmar si hubo menos agresiones a las mujeres o si ellas, por la ley ser más rígida, están con miedo de denunciar a sus agresores. Es lo que explica Nalu Farias, de la coordinación de la Marcha Mundial de Mujeres.
«Una posibilidad es ésta. Algunas mujeres no están denunciando a sus agresores por miedo. Otra hipótesis que tendría de ser investigada es la disminución de hombres con una conducta sistemática de agresión. Pero el debate público sobre la violencia contribuye para la conciencia y para algún nivel de cohibición de la violencia. Yo creo que una de las formas de combatir la violencia es que el debate se torne un asunto público.»
Una investigación realizada por la Fundación Perseu Abramo apunta que cada 15 segundos, una mujer es agredida en Brasil, donde hay más de 300 Delegaciones Policiales de la Mujer, y 125 de ellas están en el estado de San Pablo. De acuerdo con los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 29% de las mujeres brasileñas ya sufrieron algún tipo de agresión física o sexual.