El primero (NAFTA) fue firmado al iniciarse el nuevo siglo entre EEUU, Canadá y México y provocó la insurrección en Chiapas del Ejército Zapatista de Liberación Nacional encabezado por el subcomandante Marcos. Sus efectos en México pueden resumirse así: · Incrementó el desempleo hasta un 63% (solo 15 millones de personas de una población laboral […]
El primero (NAFTA) fue firmado al iniciarse el nuevo siglo entre EEUU, Canadá y México y provocó la insurrección en Chiapas del Ejército Zapatista de Liberación Nacional encabezado por el subcomandante Marcos.
Sus efectos en México pueden resumirse así:
· Incrementó el desempleo hasta un 63% (solo 15 millones de personas de una población laboral de 41.5 millones tienen empleo)
· Elevó la pobreza hasta el punto que de 104 millones de habitantes el 53% no cubren sus necesidades básicas.
· Aumentó desde el 2002 en un 48% las fortunas de las once familias más ricas de México.
· Redujo en un 25% el salario en el sector privado.
· Elevó la inflación en un 25%.
· Incrementó la diferencia entre el salario en EEUU y el salario en México de manera brutal (p.e. en empresas automovilísticas los estadounidenses reciben 17 dólares por hora y los mexicanos solo un dólar y medio).
· Los precios de venta de los productos nacionales desprotegidos se redujeron en un 70%.
· Un millón de campesinos abandonaron sus tierras.
· Tres millones de pequeños propietarios del campo quebraron.
· La migración hacia EU creció contra todos los pronósticos y en el trayecto han muerto cinco mil.
· La desprotección ecológica ha conducido a un grave deterioro, incluida la contaminación masiva por desechos tóxicos.
· Los servicios privatizados se han deteriorado y encarecido.
El segundo TLC (RD-CAFTA) está por aprobarse en los congresos de EEUU y República Dominicana y ya se aprobó en los parlamentos centro-americanos.
¿Cuál podría ser el impacto de esta imposición en Dominicana?
En el sector agropecuario, impotente para sobrevivir en esta competencia entre desiguales, podrían perderse 521 mil empleos directos y dos millones de empleos indirectos, en un país de 9.1 millones de habitantes.
Esto así porque además de la elevada tecnología disponible por los productores estadounidense (parte de ella secuestrada y reforzada la protección de su autoría por el TLC), el gobierno de los EEUU aprobó subsidios para su producción agropecuaria en el periodo 2003-2008 por un total de 190 mil millones de dólares.
Casi 87 millones de dólares diarios están destinados a subsidiar la producción de trigo, cebada, oleaginosa, algodón, azúcar, granos, arroz y productos lácteos.
· En materia de arroz expertos y funcionarios estadounidenses estiman que los productores de ese país lograrán duplicar las exportaciones de arroz a República Dominicana (de 59,600 toneladas en el momento actual a unas 120 mil toneladas).
· Los ingresos adicionales de EU con la ejecución del RD-CAFTA han sido estimado en 17 mil millones, mientras que todos los países de la región solo lograrían unos cinco mil millones.
· En cuanto al desempleo las perspectivas son aun peores si al desempleo agropecuario estimado se le agrega la pérdida de 46 mil puestos de trabajo en la industria del mueble y más de millón en el resto de la industria, el comercio y las microempresas quebradas.
· La total desprotección ambiental y ecológica será una consecuencia directa de las cláusulas que hacen demandable por las corporaciones transnacionales todo lo que sea defensa del interés nacional en materia de ambiente y derecho de los(as) trabajadores(as) y consumidoras.
· La exigencia de privatización de todos los servicios públicos, incluidos los relacionados con la bioprotección de la diversidad, la caza, la pesca deportiva, las concesiones marítimas y terrestre y la explotación petrolera… conlleva un mayor deterioro y un encarecimiento de la salud, la educación, la energía, el transporte…
· La reducción de los ingresos estatales en unos 30 mil millones de pesos, forzando a una reforma tributaria que dada las ataduras del gobierno habrán de cargar con más impuestos al consumo a los sectores de bajo y medianos ingresos.
Esto tendrá lugar en medio del aumento de la deuda externa y su carga insoportable, del control del circulante y la caída de las ventas y la inversión, de la inflación heredada del periodo anterior y de una pobreza ascendente al 61% de la población y una pobreza extrema del orden del 33%.
Salvar las zonas franca ha sido el pretexto para imponer el RD-CAFTA, pero la realidad es que sin o con TLC ese proceso está en marcha. Sólo por los efectos de la liberación del comercio de textiles y ropas y de la competencia China y centroamericana, han cerrado 40 empresas en el primer semestre del 2005, con una perdida de empleos del orden de los 20 mil.
Entre China y el ALCA (si se impone) se encargarán de liquidar de todas maneras ese sector, mientras que los salarios en Centroamérica por debajo de República Dominicana está provocando un flujo de los contratos de confección de ropa a esa región.
Se miente para construir un futuro próximo de más miseria, desempleo, deterioro de servicios delincuencia, violencia y muerte. Todo esto para imponer un laboratorio cara al ALCA que le garantice a los intereses corporativos de las transnacionales mayores controles comerciales, financieros e industriales y mayores ganancias.
Mintió el ex-presidente Hipólito Mejia.
Miente el actual presidente Leonel Fernández, privatizador y neoliberal consumado.
Procede que todos(as) los afectados enfrenten con decisión y rebeldía creadora esa imposición.