El presidente George W. Bush presentó al Congreso un proyecto de presupuesto ascendente a 2,5 billones de dólares para el año fiscal 2006, con fuertes recortes en los programas sociales bajo responsabilidad federal.La poda incluye drásticas reducciones a los subsidios agrícolas, la atención médica y los proyectos educacionales dirigidos a los estadounidenses más pobres.El presupuesto, […]
El presidente George W. Bush presentó al Congreso un proyecto de presupuesto ascendente a 2,5 billones de dólares para el año fiscal 2006, con fuertes recortes en los programas sociales bajo responsabilidad federal.
La poda incluye drásticas reducciones a los subsidios agrícolas, la atención médica y los proyectos educacionales dirigidos a los estadounidenses más pobres.
El presupuesto, sin embargo, concede al Departamento de Defensa 19.000 millones de dólares adicionales, sin tomar en cuenta los 80.000 millones solicitados por Bush para las operaciones en Irak y Afganistán.
Unos 150 programas domésticos serán recortados o eliminados, sobre todo en esferas como la salud, la educación y la protección ambiental.
Entre las reducciones se destacan los mil millones de dólares menos que tendrá el programa de subsidio a las ventas de alimentos a los más pobres.
En su propuesta, el gobernante establece a favor de los más ricos las reducciones de impuestos por 1,9 billones de dólares.
Por otra parte el proyecto traza como meta reducir en 2006 el déficit presupuestario a 390.000 millones de dólares, pese a que en 2005 debe alcanzar el récord histórico de 427.000 millones de dólares.
El pasado año el agujero fiscal de la nación llegó a los 412.500 millones de dólares, lo cual disparó el balance negativo en las finanzas de la nación, que al llegar Bush a la Casa Blanca disfrutaba de un superávit.
Este lunes el diario The Washington Post dijo que el mandatario debería pensar en los sectores de la población estadounidense más desposeídos.
En un editorial titulado Recuerde a los pobres, el rotativo señala que entre los años 2000 y 2003 el número de personas en condiciones de pobreza en el país se incrementó en un 14%, y uno de cada ocho era un niño.