El presidente de Ecuador, Rafael Correa, insistió el sábado en la creación de un sistema financiero regional para echar a «la basura de la historia» organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM). «La situación económica mundial ofrece a América Latina una oportunidad histórica para construir nuestras propias instituciones, nuestro propio […]
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, insistió el sábado en la creación de un sistema financiero regional para echar a «la basura de la historia» organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
«La situación económica mundial ofrece a América Latina una oportunidad histórica para construir nuestras propias instituciones, nuestro propio sistema financiero regional y ya no depender tanto del sistema financiero internacional», aseguró el mandatario durante su cadena radial sabatina.
Correa consideró que en el sistema actual los pobres son quienes más pierden, mientras que cuando la situación afecta a los países ricos, todos deben colaborar.
«Es la oportunidad para ser más autónomos, para ser verdaderamente soberanos, para marchar con nuestros propios pies, con nuestras propias fuerzas, se necesita sólo voluntad política», indicó.
El dignatario, un economista de izquierda, lamentó que exista todavía gente con «mentalidad colonial» en América Latina, «demasiada gente que habla español pero piensa en inglés».
El mandatario aseguró sin embargo que en América Latina existe también un núcleo fuerte de países dispuestos a avanzar solos para la construcción de un sistema financiero regional, sin depender de ese sistema financiero internacional «que nunca nos ha tomado en cuenta, excepto cuando tenemos que pagarles sus crisis».
Correa destacó la importancia de mantener la unidad en América Latina y lograr la capacidad para emerger como un poder autónomo.
En opinión del presidente ecuatoriano, el FMI y el BM son los grandes culpables del desastre latinoamericano y de que Ecuador no haya crecido en los últimos 20 años.
La posición ecuatoriana en la Cumbre Iberoamericana que concluyó el viernes en El Salvador, fue construir una estructura financiera regional con pilares como el Banco del Sur, un Fondo de Reserva Común y una unidad de cuenta común, aunque sea electrónica, señaló el gobernante.