El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunció este lunes que en la reunión que sostendrá este martes con su par de Venezuela, Hugo Chávez, revisarán «la primera transacción» del Sistema Único de Compensación Regional (Sucre), la nueva arquitectura económica de los países de América Latina. «El día de mañana es un día histórico, pues revisaremos […]
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anunció este lunes que en la reunión que sostendrá este martes con su par de Venezuela, Hugo Chávez, revisarán «la primera transacción» del Sistema Único de Compensación Regional (Sucre), la nueva arquitectura económica de los países de América Latina.
«El día de mañana es un día histórico, pues revisaremos la primera transacción a través del Sucre», afirmó el mandatario ecuatoriano desde la Asamblea Nacional (Parlamento), con motivo a la celebración de la declaración de la Independencia de Venezuela.
Este martes, los presidentes de Venezuela y Ecuador encabezarán el VIII Encuentro Presidencial Ecuador-Venezuela.
Correa manifestó que desde la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), organización de la cual es presidente pro témpore, «podemos y debemos» crear una nueva arquitectura económica regional.
El jefe de Estado ecuatoriano ha reiterado la necesidad de que Latinoamérica cuente con su propia moneda y no dependa de la estructura financiera de los países ricos.
«Una nueva arquitectura regional es un paso fundamental de ahorro», aclaró Correa, es una manera de que Suramérica sea «menos propensa a la crisis internacional, en donde no fuimos causantes, sino víctimas».
Asimismo, consideró absurdo que durante mucho tiempo, los países «pobres somos los que sostienen a los ricos», depositando dinero en sus entidades financieras. Pero, ya el Sucre es un «paso fundamental» para frenar la dependencia con los países del norte, puesto que ya existen en los países miembros de la Alianza Bolivariana para los pueblos de Nuestra América (ALBA) el Sistema Único de Compensación Regional para no depender del dólar.
Correa abogó por la creación del Banco del Sur, el Fondo Común de Reservas, y Sistema de Pagos, instituciones que contemplan la nueva arquitectura financiera de la región.
En cuanto al Banco del Sur y el Fondo Común de Reservas el gobernante explicó que «su justificación es simple, las naciones tienen millones en reservas» depositados en los bancos del norte, que «es un absurdo», porque «nos prestan nuestros mismos dólares a precios más altos ¿quién entiende esto?», preguntó Correa.
El nuevo sistema de pagos, «más que un imperativo económico, es un imperativo de sentido común», debido a que «nos permitirá políticas monetarias más autónomas, sin caprichos del mercado internacional», indicó.
La semana pasada, el Banco Central de Ecuador, aprobó el funcionamiento del Sucre, un mes después de que la Asamblea Legislativa le diera luz verde al Tratado Constitutivo del mecanismo que cuenta con el respaldo de los países adscritos al ALBA.
El máximo organismo del Sucre será el Consejo Monetario Regional que implementará las políticas, normas y medidas para su desempeño e, igualmente, asignará las monedas virtuales a cada nación que participa en el tratado.
Con el uso del Sucre se disminuirá la utilización del dólar para transacciones comerciales con el exterior, sin afectar los mercados comerciales, así como también habrá una mayor eficiencia y disminución de los costos de las transacciones y de las fuentes de riesgos.
El Sucre es una de las tantas iniciativas que algunos gobiernos de América Latina han emprendido para instaurar la Nueva Arquitectura Financiera Regional (NAFI) con la intención de fortalecer las economías de los países latinoamericanos, indicaron autoridades ecuatorianas.
Esta entidad financiera fue convenida con un capital de 20 mil millones de dólares en un acta fundacional firmada por los Gobiernos de Argentina, Brasil, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Paraguay y Venezuela en diciembre de 2007.