El 5° Congreso del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra será realizado entre los días 11 y 15 de junio, en el Gimnasio Nilson Nelson, en Brasilia. Más de 17 mil delegados y delegadas de asentamientos y campamentos de 24 estados van a participar del encuentro, que tiene como lema «Reforma Agraria: por Justicia Social […]
El 5° Congreso del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra será realizado entre los días 11 y 15 de junio, en el Gimnasio Nilson Nelson, en Brasilia. Más de 17 mil delegados y delegadas de asentamientos y campamentos de 24 estados van a participar del encuentro, que tiene como lema «Reforma Agraria: por Justicia Social y Soberanía Popular». El evento ya es considerado el mayor de la historia del Movimiento.
Durante toda la semana que viene, trabajadores y trabajadoras rurales van a permanecer acampados alrededor del gimnasio, donde tendrán lugar los debates sobre el actual estado de la cuestión agraria, el papel del estado en el Gobierno de Lula y la coyuntura política internacional. Desde el 1° Congreso, realizado en 1985, el MST viene logrando reflejar el contexto político y económico del país y señalar los desafíos del movimiento, de las organizaciones de trabajadores y de la sociedad brasilera para la realización de la Reforma Agraria en Brasil.
Según la dirección nacional del Movimiento, el MST está debatiendo con sus bases y sus aliados un nuevo programa de Reforma Agraria. Una Reforma Agraria que debe comenzar con la democratización de la propiedad de la tierra, pero que organice la producción en forma diferente, priorizando la producción de alimentos para el mercado interno, combinada con un modelo económico que distribuya la renta. El MST quiere una Reforma Agraria que fije a las personas en el medio rural, combatiendo el éxodo del campo, y que garantice condiciones de vida dignas para el pueblo, con educación en todos los niveles, vivienda adecuada y empleo para la juventud.
Para el MST, la Reforma Agraria no es un problema que se restringe sólo a los Sin Tierra. Es una necesidad para toda la sociedad brasilera y, fundamentalmente, para el 80% de la población que vive de su propio trabajo y que necesita un nuevo modelo de organización de la economía, con renta y empleo para todos.
Pensando en esto, el MST va a presentar a la sociedad su propuesta para el campo brasilero, titulada «La Reforma Agraria necesaria: Por un proyecto popular para la agricultura brasilera». El programa agrario presenta objetivos y propuestas concretas para la resolución de la cuestión agraria, con la garantía de buena calidad de vida y trabajo a los Sin Tierra y la superación de la brutal desigualdad social en el campo.
El programa también propone el modelo de soberanía alimentaria, con la producción de alimentos para toda la población y la preservación de la naturaleza. «En el Congreso, queremos fortalecer al MST y a nuestro proyecto para la sociedad brasilera, en particular en relación con la lucha por la Reforma Agraria, que significa actualmente enfrentar a las grandes corporaciones ligadas al capital financiero, enfrentar el agronegocio y, por sobre todo, discutir con la sociedad un nuevo modelo de agricultura», afirma Gilmar Mauro, integrante de la coordinación nacional del MST.
El evento va a ser una gran fiesta para celebrar las conquistas de los trabajadores Sin Tierra en los últimos 23 años de lucha. Según Mauro, será un momento de fortalecimiento y consolidación del Movimiento, trabajando mística y valores. «El Congreso es un espacio de confraternización interna, donde tenemos la posibilidad de encontrar a todos los compañeros que llevan adelante la lucha de norte a sur en el país. Es un momento sin igual donde podemos realizar discusiones, estudios y establecer tácticas», resalta.
Durante el encuentro, el grupo de Teatro del MST de Río Grande do Sul «Pieza para el Pueblo» va a presentar una adaptación de Ayuca Karaipe («Muerte a los Blancos»), de autoría del escritor y teatrólogo paulista César Vieira. La pieza busca retratar la historia de resistencia indígena contra el proceso colonizador, haciendo un paralelismo con el período actual y la resistencia de los trabajadores del campo.
Traducción: Daniel Barrantes – [email protected]