Más policía y concienciación a la disidencia: Internet será criminalizado hoy de nuevo. Pedro Tur, secretario de la Junta Directiva de la Asociación de Internautas y abogado, nos analiza las repercusiones que tendrá el nuevo plan antipiratería: Pregunta: ¿Qué opinión te merece el Plan antipiratería que se propone aprobar mañana el Consejo de Ministros? Pedro […]
Más policía y concienciación a la disidencia: Internet será criminalizado hoy de nuevo.
Pedro Tur, secretario de la Junta Directiva de la Asociación de Internautas y abogado, nos analiza las repercusiones que tendrá el nuevo plan antipiratería:
Pregunta: ¿Qué opinión te merece el Plan antipiratería que se propone aprobar mañana el Consejo de Ministros?
Pedro Tur: Si las filtraciones habidas acerca de las cinco medidas del denominado Plan Antipiratería son ciertas, a partir de mañana los internautas podremos llegar a ser carne de mazmorra por ejercitar legítimos derechos como es el tan traído y llevado intercambio de ficheros sobre el que representantes cualificados de las entidades de gestión de derechos de autor siguen empeñados en criminalizar de forma generalizada, salvo cuando se encuentra en sus manos o a través de sociedades interpuestas, paralelas, participadas…; tesis que la Ministra de Cultura ha debido acoger con evidente agrado porque a nosotros no nos ha consultado al respecto.
Pregunta: Pero no todo van a ser medidas policiales…
P.T..: Una de las medidas anunciadas, varias veces filtrada, es una vieja ansia de las gentes de orden de toda la vida contra los disidentes: más policía, más represión, unida a «la concienciación» que muchos podemos considerar «lavado de cerebro». Si los defensores de tales medidas abrigan la esperanza de que incrementando la presencia policial, lanzando además anatemas contra Internet-aburridos-pederastas y el intercambio de ficheros, y que todo ello hará que cesen las actividades que sí son de verdad ilegales, andan muy errados. No tienen sino que mirar a los Estados Unidos (país en el que no existe copia privada ni compensación equitativa o canon alguno), país tan querido en materia de «guerra sin cuartel contra la piratería» por los prebostes nacionales de la materia, para comprobar que ni siquiera intentando sentar en el banquillo de los acusados a niños y ancianos han conseguido detener lo que allí no es legal, pero que aquí sí lo es, mientras el Parlamento no diga lo contrario.
Pregunta: ¿Y el resto de medidas?
P.T.: No sólo yerra esa medida del Plan. Nos encontramos con una serie de medidas unidas bajo la pomposa denominación de «Plan Integral para la Disminución y la Eliminación de las Actividades Vulneradoras de la Propiedad Intelectual» que pretenden, nada menos, que «concienciar» a los ciudadanos, jueces, fiscales y policías, pero sin contar con todos nosotros. Es la vuelta al despotismo ilustrado: todo para el pueblo, por el pueblo, pero sin el pueblo.
Para comenzar, ya saben que tienen enfrente a quienes ni siquiera han sido consultados: los consumidores y usuarios, los que defienden modelos alternativos de derechos de autor, quienes siguen pensando que el derecho penal debe seguir rigiéndose por el principio de mínima intervención porque sigue sin ser el remedio para todos los males, quienes defienden otros modelos de negocio musical y audiovisual en Internet, etcétera, etcétera; demasiada gente como para ser ignorada y, sobre todo, demasiada gente para ser reprimida, fundamentalmente cuando, además, se nos está esquilmando con un canon por nada y se nos pretende esquilmar con otros cánones por nada, mientras tenemos que soportar, además, que se nos insulte llamándonos ladrones mientras vemos cómo se pretenden organizar batidas policiales con mensajes de concienciación al más puro estilo nazi y soviético contra los disidentes, los que osamos discrepar.
Pregunta: Una de las propuestas del Plan es crear una Comisión en la que estarán presentes las administraciones, sociedades de autores, consumidores…
P.T.: Para quienes siempre hemos sido respetuosos con la legalidad y hemos acudido a las mesas de negociación y de debate a las que hemos sido invitados, atentados como el que parece quiere perpetrarse criminalizando definitivamente lo que no es delito (el intercambio de ficheros) y asociando -de nuevo- Internet a nido de delitos y de todo tipo de males, no permitirán que luego acudamos como siervos de esta nueva gleba a la que se quiere dar carta de naturaleza a ninguna comisión que analice el resultado de la represión-lavado de cerebro social que rechazamos y frente a la que nos van a encontrar, informando y luchando con los medios de que podamos disponer en un Estado de Derecho que no nos resignamos a perder, ni siquiera en favor de quienes quieren llevarnos al mejor de sus mundos, pero que para nosotros, si se confirman los peores vaticinios y flitraciones, es lo más parecido a un Gulag, además de pago y en contra de nuestra voluntad.