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El manifiesto catequista de 300 santos intelectuales

Fuentes: Sakurambo tsumamu

  «La problemática es económicay en lo teórico no son unánimes,los hay escépticos, los hay fanáticos,pero en la práctica no ves apóstatassino en los márgenes o con prismáticos. Y unos son míseros, otros son prósperos,en las antípodas todo es idéntico,idéntico a lo autóctono.» (Javier Krahe) Andaba un servidor por las antípodas en el octubre del […]


 

«La problemática es económica
y en lo teórico no son unánimes,
los hay escépticos, los hay fanáticos,
pero en la práctica no ves apóstatas
sino en los márgenes o con prismáticos.

Y unos son míseros, otros son prósperos,
en las antípodas todo es idéntico,
idéntico a lo autóctono.»

(Javier Krahe)

Andaba un servidor por las antípodas en el octubre del año pasado cuando se desató la tormenta de pánico. Las bolsas de Corea caían una docena de puntos por día, la de Tokio a razón de la mitad. Decían: «cuando nuestro amigo americano estornuda, nosotros nos resfriamos». Sarkozy amenazaba con refundar el capitalismo junto a Bush desde la cumbre. Lo que a Javier Ortiz (que de vivir apuesto a que no hubiera firmado otro Manifiesto que el comunista) se le antojaba metafísicamente imposible.

«A decir verdad, lo de «refundar el capitalismo» tiene su aquel. Primero, porque el capitalismo no procede de ningún acto fundacional: fue un destilado histórico, inicialmente medio francés medio británico, que hizo fortuna y acabó imponiéndose en el planeta entero, en algunos países por maduración de las condiciones económicas internas y en otros -sobre todo en el Tercer Mundo- por imposición. Segundo, porque los «nuevos fundamentos» a los que apela Sarkozy no tienen nada de nuevos: los propuso John Maynard Keynes tras estudiar las razones del gran crack de 1929. El hallazgo teórico del presidente francés, según el cual los estados deben intervenir en la economía para corregir los excesos del libre mercado y mitigar los efectos más perniciosos de las crisis cíclicas, tiene nada menos que 72 años.»

Como según la visión profética de la globalización del Krahe (nos la cantó desde el pasado siglo y sin necesidad de meterse la paliza del viaje)

En las antípodas todo es idéntico,
tienen teléfonos, tienen semáforos
con automóviles, con sancristóbales,

pude hacerme con un ordenador, aunque con unos caracteres rarísimos que no me impidieron mandar esto a los amigos de Rebelión: ¡Cómo nos ibamos a creer sus nuevas lecciones de neoliberalismo, ya acudiera o no Zapatero, que por aquí pasaba por lo más importante!

Tienen políticos más bien estúpidos
pero son súbditos muy pusilánimes.

Tambien me asustó que intelectuales de la izquierda profetizaran con menos arte y dudosa ciencia el final del capitalismo, a ellos aludía en el citado diario, y especialmente, al más escuchado en su visita a Madrid: Wallerstein. Así que ha pasado un año esperando ver como se caía el árbol sin necesidad de moverlo. Y pueden pasar 30 más, fecha máxima de caducidad (sic) mientras los de arriba siguen forrándose.

Pero en el reino de España tal apatía ha resultado engañosa: un grupo de bienintencionados intelectuales encabezados por este siniestro angelito(Fortes-García Montero: los hechos son los siguientes) estaba elaborando un concienzudo manifiesto.

Hay mundo artístico con gente excéntrica,
mundo científico con catedráticos
y cuerpo médico y casos clínicos.

Me llama poderosamente la atención por una vez la unanimidad de críticas que ha despertado desde la izquierda que les lee (ver los numerosos comentarioa aquí, por ejemplo)

A esta gente la veo más encabezando una reunión hacia la bodeguiya del socialista de turno (con alguna honrosa excepción: no me veo a Isaac Rosa o al bueno de Reig riéndole los chistes al brillante -lo digo por su bronceado y maquillaje- presidente); que abanderando un movimiento anticapitalista, como el que aquí proponen Esther Vivas y autores de más fuste y carrera. Tal es el caso de Alfonso Sastre, a cuya sombra menos confortable no se acercan. Por si mancha.

Ya veo a los banqueros temblando (Martín Seco ni se lo imagina), a Zapatero que os hace caso, y corre a dar cuenta veloz a casa de su amo Botín, de que se terminó el festín. ¡Qué risa!

y los pacíficos, actos inútiles.

Entre los lúcidos cunde el desánimo.

Sobran más comentarios. De hecho, por la pequeña muestra que he leído, manifiestamente han sacado los colores -es un decir- de estos firmantes tan adiestrados. ¿Por cierto, adiestrados vendrá de diestra, de estar sentados a la diestra del poder?

En fin, gracias una vez más al maestro Javier Krahe por la música y su letra:

grandes espíritus viven recónditos

Tranquilos, no pasará nada mientras el doping no salpique al fútbol:

En otros términos, que están incómodos.

Pero es fantástico, martes y miércoles,
jueves y sábados, lunes y vísperas,
dan espectáculo con el esférico,
y allí, al unísono, arman escándalo
y es como un bálsamo para sus ánimas.

Fuente: http://sakurambotsumamu.blogspot.com/2009/11/el-manifiesto-catequista-de-300-santos.html