Grandes y chicos disfrutarán de un nuevo espacio artístico cultural en el centro de la ciudad. Un lugar de encuentro de agrupaciones de música, teatro, danza y circo social para la formación integral e integradora de las comunidades. Los toros dejarán de ser el espectáculo en la antigua plaza taurina Nuevo Circo de Caracas para […]
Grandes y chicos disfrutarán de un nuevo espacio artístico cultural en el centro de la ciudad. Un lugar de encuentro de agrupaciones de música, teatro, danza y circo social para la formación integral e integradora de las comunidades.
Los toros dejarán de ser el espectáculo en la antigua plaza taurina Nuevo Circo de Caracas para dar paso a agrupaciones independientes de música, danza, teatro y circo social. La sangre dejará de correr en este escenario y circularán en su lugar jóvenes artistas, instructores y cultores populares que buscarán llenar estos espacios de vida, a través del arte.
Este proyecto, que cuenta con la aprobación del Ejecutivo Nacional en el quinto gabinete móvil regional del año 2005, busca una nueva visión en el rescate de las instalaciones del Nuevo Circo, abandonadas 15 años atrás. La idea central consiste en formar académicamente a las agrupaciones culturales que necesiten reforzar sus conocimientos, tanto en la ejecución de técnicas artísticas como en la producción de sus obras, para mejorar su calidad profesional.
Pero atendiendo a una deuda histórica con la comunidad artística en el área de salud, también se contará con la creación de un Barrio Adentro que prestará asistencia médica preventiva en las áreas de mayor incidencia de enfermedades de los trabajadores culturales como traumatología, foniatría, fisioterapia. Para evitar lesiones temporales y permanentes producto de las malas posturas cometidas en la ejecución de sus piezas.
Las comunidades de San Agustín, La Vega, Caricuao, Catia, Tacagua Vieja y Santa Rosalía, en Caracas, conocieron las propuestas del Núcleo Endógeno Artístico Nuevo Circo a lo largo del año 2005. A finales de enero de 2005, un grupo de creadores de calle independientes, de las distintas artes, que trabajan con las comunidades y están a favor de la toma de espacios para la formación, comenzaron a trabajar para el rescate de las instalaciones del Nuevo Circo.
Este grupo de jóvenes artistas escogen los espacios del Nuevo Circo debido a que este edificio se encontraba en total abandono y no existía para ese momento ningún proyecto para su rescate.
A partir de esos antecedentes, y aprovechando la actual coyuntura política social venezolana, se decidió crear un proyecto comunitario que pretenda evitar la sub utilización del antiguo corredor de toros, así como también darle un uso a tono con el proyecto de Estado, respetando a nuestros semejantes y nuestros animales. Por eso estamos a favor del arte y la cultura y no de la tortura.
Así queda fijada la idea de crear un centro pedagógico y de esparción cultural. Un espacio donde se impartirán herramientas para la formación de las comunidades en el área artística y técnica, para el disfrute del arte en movimiento, e incluso para la conformación de cooperativas de producción que se dediquen a la prestación de servicios artísticos culturales.