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El nuevo Duce

Fuentes: Rebelión

En 1933 el psicoanalista y militante del partido comunista alemán, Wilhelm Reich publica un libro lamado «psicología de las masas del fascismo». En él se pregunta porque una nación como Alemania, que estaba «madura» para la revolución socialista y que incluso había tenido su propia insurrección en 1818, la cual culminara con el asesinato de […]


En 1933 el psicoanalista y militante del partido comunista alemán, Wilhelm Reich publica un libro lamado «psicología de las masas del fascismo». En él se pregunta porque una nación como Alemania, que estaba «madura» para la revolución socialista y que incluso había tenido su propia insurrección en 1818, la cual culminara con el asesinato de Rosa Luxemburgo, había desembocado en el nazismo. Más concretamente su pregunta era ¿por qué las masas votaron por Hitler?. Su respuesta como buen marxista no podía desestimar las causas materiales de dicha elección: la crisis del capitalismo mundial desatada en 1929.

Pero lo interesante del planteo de Reich es que debía haber en esa elección por el nazismo un componente psicosocial. Reich lo encuentra en el carácter autoritario de las masas alemanas. Gran parte de estas masas vieron reflejado en el caracter autoritario y de naturaleza germana de Hitler el único capaz de salvar el barco y de ahuyentar el » fantasma rojo» del comunismo Judio.

Hay en la elección de Bolsonaro en Brasil muchas coincidencias con el análisis del psicoanalista alemán, pero también muchas discrepancias. En primer lugar Hitler surge en una nación imperialista que ha perdido su botín en la primera guerra mundial. Esta humillación que sufren desde el tratado de Versalles, es sentida por el pueblo germánico y la figura fuerte y autoritaria de Hitler viene a traer ese puesto de nación dominante perdido. En cambio, Brasil fue un país colonial y ahora semicolonial y dependiente. Es decir, nosotros las y los latinoamericanos nunca fuimos los comensales, siempre fuimos la torta.

Sin embargo, Bolsonaro es también una gran figura autoritaria que según sus votantes va a devolverles ese «gran Brasil» perdido. Con el circo mediatico y la manipulación creada en torno a la hipercorrupción del gobierno del PT que llevaría a brasil a ser como Venezuela o cuba se machacó una apoliticidad que generó un vacío y una pérdida de esperanza que se va a llenar con una figura «viril» como la de Jair Bolsonaro.

Coincide también el marco de una crisis y que Bolsonaro al igual que Hitler llego al poder por la via «democrática». Esta vía democrática sin embargo es ilegítima por que el principal candidato al cual se opone Bolsonaro estaba proscripto. Es algo que suele estar ausente en los medios de comunicación: si Lula no hubiera estado preso sería el nuevo presidente de Brasil. Todas las encuestas lo dicen. Es más, también se olvida que quien es hoy presidente ( el nefasto y ajustador Michel Temer) llego ahí gracias a un golpe parlamentario. La proscrición de Lula seria el golpe dentro del golpe. Dentro de ese marco se dieron estas fraudulentas elecciones.

Hay otra coincidencia: una gran crisis del capitalismo. Son muchos los analistas que comparan lo que viene sucediendo desde la crisis de 2008 con el crac del 29 del siglo pasado.

Hay muchas diferencias sin embargo. Como Brasil es un país dependiente no tiene ninguna expansión nacional que recuperar como Alemania, sino que a Brasil se le pide que se achique. Quien se lo pide? El imperialismo estadounidense y el fmi. El saqueo de los bienes naturales, la eliminación de los derechos laborales para bajar el «costo brasilero» son los objetivos que Bolsonaro debe cumplir. EL mismo lo dijo » este país es muy injusto con los patrones por que los trabajadores tienen muchos derechos».

El plan que viene a cumplir Bolsonaro es entonces aumentar la rentabilidad del capital imperialista y de la oligarquía brasilera a toda costa.  Los mismos que sostuvieron la dictadura que asolo a Brasil desde 1964 hasta 1985 hoy están detrás del espectáculo Bolsonaro. ¿Por qué lo eligieron? Por que resume lo más reaccionario de la sociedad brasilera. SU paso por el ejército y su vinculación con la iglesia evangelista lo confirman. Por eso desde hace meses el asesor de campaña de Donald Trump esta en Brasil aconsejando al nuevo Duce.

El ascenso de Hitler tuvo grandes repercusiones internacionales. El de Bolsonaro también. Sobre todo para america Latina. El eje nazi-fascista que conformaron Hitler Musolini y Franco se puede replicar con distinta escala y obviamente en otra coyuntura en el eje Bolsonaro-Macri-Piñera. Lo primero que buscara este eje es fortalecer el llamado grupo de Lima. El objetivo de este grupo es denostar, malinformar y atacar a Venezuela, Cuba y Bolivia. Están completamente de acuerdo con una injerencia militar de estados unidos contra el gobierno de maduro. Son fervientes defensores de apretar más las tenazas del bloqueo sobre Cuba y Venezuela. Son enemigos declarados de cualquier tipo de integración latinoamericana y fieles impulsores de los tratados de libre comercio o los prestamos del FMI. Son los melancólicos del ALCA.

Estos paladines de la democracia son en realidad títeres del imperialismo en su armado geopolítico. Por eso se expanden cada vez más las bases yanquis en nuestramerica con su entusiasmo de lacayos.

Hay una coincidencia ( nada aleatoria por cierto) entre Bolsonaro y las dictaduras militares de los 70’s: El lenguaje higienista. Este lenguaje típico de la derecha más reaccionaria concibe que la sociedad es un gran organismo en el cual hay elementos que deben ser limpiados. «Hay que limpiar a los rojos, las feministas y los petistas que han atrofiado la sociedad brasilera» es el discurso del nuevo Duce. Recordemos a Videla hablando de «extirpar el cancer de la subversión para salvar el cuerpo nacional» Este lenguaje es una forma más de la batalla ideológica.

En resumen, que Bolsonaro haya ganado las elecciones son muy malas noticias para todes les trabajores brasileros y les más humildes. También lo es para latinoamerica ya que se conforma un eje mucho más duro en el cúal la injerencia de estados unidos y el fmi sólo puede significar más expoliación.

Hay sin embargo gran resistencia del pueblo trabajador brasilero que debe generar nuevos canales de organización para enfrentar el ajuste y la represión que se viene. Vamos a tener que dar una batalla por la hegemonia, por la conciencia para que las y los trabajadores nunca más vuelvan a exclamar que nuevos verdugos vengan a salvarnos.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.