Invitado por su par Hu Jintao el presidente Venezolano Hugo Chávez cumplió su primer día en China y abrió una agenda de nueve reuniones orientadas a crear convenios estratégicos
Sin dudas, la visita de Hugo Chávez a China reafirma su estrategia económica antiimperialista y un sistema de alianzas a nivel global.
En su primer día en el país asiático, Chávez y su comitiva se entrevistaron con empresarios chinos de la Corporación Nacional de Petróleo China (CNPC), la mayor productora y suplidora de petróleo y gas natural de toda China.
Chávez arribó ayer a Pekin, e inició su discurso centrado en la importancia que tiene la energía en la relación bilateral. En el acto inicial recordó que las empresas chinas explotarán petróleo en la Faja Petrolífera del Orinoco, al sureste venezolano, donde se estiman reservas de 235.00 mil millones de barriles de crudo pesado.
La segunda ronda de negocios fue con los integrantes de la Corporación China de Petróleo y Química (Sinopec), y con el vice director general de la Oficina de Cooperación Exterior, Deng Hanshen.
En una acción marcada en cuanto a su política exterior, Venezuela amplía su diplomacia. Tras las visitas a Argentina, Brasil, Rusia, Irán, Vietnam y Malí, y después de ver al líder cubano Fidel Castro, la llegada a China muestra sin dudas que la agenda no es casual.
En su visita se estima que venezolanos y chinos estudiarán la posible participación de compañías chinas en los proyectos de desarrollo de los yacimientos petrolíferos en Venezuela.
Después de abandonar su dependencia del petróleo de Medio Oriente, el acercamiento con Venezuela fue acelerado por las importaciones del tigre asiático. Pero si bien las cercanías comerciales son notorias (el año pasado alcanzaron la cifra de 1.682 millones de euros) Chávez busca alinearse con la potencia que compite codo a codo con la industria norteamericana.
El cuanto al intercambio energético, la semana pasada cifras del Banco Mundial (BM) mostraron un crecimiento de China de 9,5 a 10,4 de su economía dejando a la luz grandes dividendos para Caracas.
La diplomacia continuó hora tras hora y fue seguida de un encuentro en la que la comitiva venezolana se reunió con el director de Asuntos Exteriores Zhang Xin y el jefe de la División de Asuntos Exteriores, Wang Wei.
En plena actitud de buscar aliados puertas afuera, su visita deja ver mucho más que un viaje de negocios. Es claro que la política exterior de Chávez centra sus fuerzas en la insistente lucha contra la conducción política de Washington en el plano internacional y el discurso de la Casa Blanca. Entretanto las líneas de acción ya se están marcando y preocupan a George W. Bush.
Según la prensa internacional, con la nueva diplomacia, Caracas se propuso «alianzas estratégicas» con países como Rusia, China, Irán y sus socios en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sostiene en voz de su líder que «en las próximas décadas el imperio norteamericano dejará de existir».
Luego de incluir como destinos a Malasia y Angola en el viaje por Asia se perfila como otro de los objetivos para este recorrido sumar puntos, ganar apoyos y vencer en la disputa con Guatemala para obtener su lugar en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La lucha antihegemónica que llevó al presidente Chávez a retirarse este año a su país de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) luego que Bogotá y Lima negociaron Tratados de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos se incrementa luego las compras de armas a Rusia y España por unos 5.000 millones de dólares.
Entre los más destacado de la agenda figura el próximo jueves la recepción oficial de Chávez en una ceremonia que se llevará a cabo en el Palacio del Pueblo, en la plaza de Tienanmen, en la que luego de reunirse con su homólogo chino, Hu Jintao, procederán a la firma de convenios de cooperación en materia agrícola y vivienda.
De este modo el presidente Chávez realza la apuesta en materia de relaciones internacionales y comercio exterior en un contexto previo a su reelección por un nuevo período sexenal el 3 de diciembre. Perfilado como el principal candidato dentro de su país, por estas horas es sin dudas el principal dolor de cabeza para Bush y sus halcones.