El secretario general de la opositora Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), Víctor de Gennaro, abogó por una mejor distribución de la riqueza y fustigó los planes asistenciales para combatir la pobreza.De Gennaro se pronunció por el cese del ‘genocidio que crea la planificación de las desigualdades sociales’, a través de una distribución más equitativa […]
El secretario general de la opositora Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), Víctor de Gennaro, abogó por una mejor distribución de la riqueza y fustigó los planes asistenciales para combatir la pobreza.
De Gennaro se pronunció por el cese del ‘genocidio que crea la planificación de las desigualdades sociales’, a través de una distribución más equitativa de los recursos en este país sudamericano.
Entrevistado por la agencia oficial de noticias Télam, el sindicalista estatal criticó el programa económico del gobierno del presidente Néstor Kirchner, en particular sus políticas asistenciales de ayuda en la lucha contra el hambre.
Tras denunciar el saqueo a los argentinos por parte del Fondo Monetario Internacional, el líder de la CTA estimó que no es posible seguir pagando una ilegítima e ilegal deuda externa, sobre todo después del rol de los organismos financieros en la década de 1990.
Al respecto recordó que esas entidades de crédito fueron cómplices de la desgracia social y por tanto no pueden ser acreedores privilegiados.
En su opinión, con apenas el cinco por ciento del Producto Interno Bruto se terminaría el drama de la pobreza que padecen millones de sus compatriotas, por lo que se impone utilizar el superávit fiscal para resolver esa realidad.
En otro tramo del reportaje, el dirigente obrero destacó que luego de la crisis de 2001 en Argentina y Latinoamérica, se produjo un avance de los sectores populares y de la organización social en la base de la comunidad.
Defendió la democratización del sistema judicial, el cual, precisó, continúa ‘criminalizando’ la protesta social en lugar de juzgar a quienes ‘vaciaron la Argentina’.
De Gennaro declaró que ‘Argentina es gobernada por los mismos grupos económicos que administran a las 500 empresas que más facturan y, el 73 por ciento de ellas, tiene sede en el exterior’.
Denunció que esos consorcios manejan a ‘sectores partidarios, institucionales, judiciales, de comunicación e intelectuales’, por lo cual la construcción de ‘un nuevo poder pasa por unificar a todos aquellos que luchan por otro país’.