Desde el momento mismo que se hace evidente la recesión económica vivida por los Estados Unidos y la denominada crisis económica y financiera en que se encuentra sumida la económica norteamericana, y con los coletazos respectivos al resto del mundo, hemos comenzado a asistir impávidos a la subida permanente de los precios del petróleo, el […]
Desde el momento mismo que se hace evidente la recesión económica vivida por los Estados Unidos y la denominada crisis económica y financiera en que se encuentra sumida la económica norteamericana, y con los coletazos respectivos al resto del mundo, hemos comenzado a asistir impávidos a la subida permanente de los precios del petróleo, el encarecimiento de los productos de la denominada canasta básica y el crecimiento gradual de la inflación, todo lo que por cierto va teniendo un efecto en las condiciones de vida de la clase trabajadora y los sectores sociales de menores ingresos a escala global.
Ni la mala gestión económica del gobierno terrorista y genocida de la Casa Blanca, ni todos los dioses y expertos económicos del capital neoliberal, aglutinados en la FED, en el FMI, el BM y otras entidades mafiosas al servicio de los intereses del capital multinacional, fueron capaces de «prever» se dice, la actual catástrofe en que esta sumido el capital neoliberal en los más diversos países del planeta y cuyo origen esta en los Estados Unidos.
Pero no solo eso, los medios de comunicación de centro derecha del planeta, que han comenzado a desatar una campaña feroz en contra de China, para hacer fracasar los Juegos Olímpicos, ahora pretende decir que todos los males de la economía mundial son producto del crecimiento económico de China y la India, puesto que estos países ahora consumen más alimentos y más energía, cuestión que no deja de ser verdad, pero que por otro lados nos indica que las condiciones de vida en estos dos países han ido mejorando gradualmente, mientras que en el mundo occidental las injusticias, las desigualdades sociales y la brecha entre ricos y pobres crece paulatinamente.
Lo cierto y lo concreto es que al escribir esta nota, los precios del petróleo del barril de crudo de Texas superó los 115 dólares minutos antes de concluir la sesión en Nueva York, en una jornada muy volátil y en la que se conoció además que «bajaron las reservas de crudo y gasolina en Estados Unidos», en nada menos que 5,5 millones de barriles, durante cinco semanas consecutivas.
Mientras que el petróleo procedente de la OPEP, su precio alcanzaba los 106,65 dólares por barril. Pero junto con la subida de los precios de la vital materia prima energética, hemos venido asistiendo además, a la debacle del dólar de forma paulatina. El dólar estadounidense sufrió en estos días su peor caída frente al euro en tres semanas debido a la subida de la inflación en EEUU a su nivel más elevado en el transcurso de16 años, lo que a su vez ha estado tirando para arriba los precios del crudo.
Al parecer los expertos alemanes del Instituto Alemán de Investigaciones Económicas (DIW), se han quedado corto en sus predicciones con respecto al precio del crudo, puesto que según ellos el precio del petróleo seguirá subiendo y alcanzara un precio entre los 100 y 150 dólares en el transcurso de cinco años, según publicaba en su edición de enero pasado el diario germano ‘Berliner Zeitung’. Sin embargo en el lapso de casi cuatro meses del presente año, el valor del dólar ya va en los 115 y 106 dólares respectivamente el barril. De acuerdo a los especialistas alemanes del DIW, como Claudia Kemfert, señalan que «las reservas de petróleo son cada vez más escasas, y eso seguirá impulsando los precios. Advirtió además que la última subida del precio del crudo está vinculada en gran medida a la especulación: «La parte del precio del crudo que se debe a la especulación podría ser del 20 por ciento», afirmó la experta energética. Especulación que tiene su origen en el manejo de la propia economía decadente estadounidense, expresan otros expertos económicos internacionales.
Ahora la desbocada subida de los precios del crudo en sus dos expresiones (Texas Brent-Opep), va a seguir teniendo una incidencia en los precios de los alimentos de primera necesidad en todo el mundo. Pero además todos los productos que dependen del petróleo para su elaboración, tendrán que ir al alza de forma gradual y como lo determine la crisis económica y financiera en que nos a sumido el criminal de guerra G.W. Bush y las mafias económicas del capital neoliberal a través del mundo.
Ahora la subida en los precios del petróleo y por ende de los precios de los alimentos básicos, no solo van afectando de manera brutal a los países más pobres, sino que además el alza de los alimentos ha comenzado a afectar desde Estocolmo hasta Santiago de Chile. De allí que el alza del precio del petróleo como de los alimentos se esta tornando en una gran amenaza para el poder adquisitivo de los sectores de menores ingresos de cualquier país del mundo. Al respecto el presidente de turno de la OPEP, el argelino Chakib Jelil, (05.03.08) replicó con dureza que los altos precios no se deben a la falta de oferta de crudo, sino a la ‘mala gestión’ de la economía estadounidense, responsable de ‘la crisis financiera, la devaluación del dólar y las especulaciones en el mercado’.
Pero vamos viendo, los propios sostenedores del sistema capitalista mundial sin ningún tipo de impudicia expresan que…» habrá muchas víctimas por la crisis financiera global», así lo indicó el ex presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan (16.03.08). El presidente del BM, Robert Zoellick, ha pronosticado que los precios de los alimentos seguirán altos este año y el próximo. Zoellick ha señalado que la situación es producto de varios factores, como el mayor énfasis en la producción de biocombustibles, que ha reducido el espacio de tierra que se destina al cultivo de otros alimentos. ‘Al mismo tiempo uno se encuentra con que las existencias mundiales de alimentos son bastante bajas’, enfatizó el titular del BM, quien ha indicado que no hay mucho margen para aumentar los niveles de producción, lo que explica que la tendencia de los precios sea alcista (07.04.08).
Lo cierto es que los precios de los alimentos de primera necesidad se han encarecido un 80% desde 2005 y amenazan con desestabilizar a distintos países en Latinoamérica Africa, Asia , según el Banco Mundial. ‘Estados Unidos, la Unión Europea, Japón y otros países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) deben actuar ahora para cubrir ese vacío o muchas más personas sufrirán y pasarán hambre en el mundo’, ha expresado Robert Zoellick.
Por su parte el director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, señaló los peligros que están ocasionando el alza de los precios de los alimentos en todo el mundo y advirtió de que cientos de miles de personas pasarán hambre si continúan subiendo. Strauss- Kahn destacó también la crisis social que están causando las últimas subidas de precios y añadió que pueden llegar a producirse conflictos sociales que afectarán a los más diversos puntos del planeta» (13.04.08).
Ahora como resultado de la debacle económica y financiera del gobierno de Bush y las mafias del capital neoliberal, representadas por la FED, el FMI, el BM y otras entidades dedicadas a la especulación económica internacional se comienza a disparar la inflación, que de acuerdo al país es como tiene que enfrentar este flagelo de la economía capitalista, la que por cierto tiene una incidencia directa en el precio de los producto alimenticios, en donde además nadie tiene cojones para parar el contubernio entre grandes productores de alimentos, distribuidores y comercializadores de la canasta básica de la alimentación.
Lo que si esta claro, es que producto de la globalización unilateral del capital neoliberal, es que se comienza extender la hambruna por el mundo. Por otro lado la producción de biocombustibles esta significando el uso de enormes cantidades de tierra en la producción de granos que sirva para la producción de etanol, en perjuicio de la producción de alimentos, por ello el encarecimiento de la canasta básica va teniendo una consecuencia brutal en los países en vías de desarrollo.
Para nadie es un misterio que la economía reinante en el mundo, es la de capital neoliberal, disfrazada de libre comercio, de un salvaje y alienante mercado libre, y que es la única responsable de la actual crisis económica y financiera que viven los capitales, pero que afecta en primer lugar a los que tienen ingresos de sobre vivencia en cualquier parte del mundo.
La pregunta final que cabe hacerse al respecto, es saber hacia donde se encaminan los intentos y los objetivos de los diferentes polos del capital mundial, al continuar empujando la crisis en una escalada que ya se conoce como ha comenzado, pero no como va a terminar. Lo claro hasta el momento, es que los Estados Unidos y sus empresas trasnacionales, van por el saqueo del planeta, por el control de todos y cada uno de los recursos naturales más importantes, están por desarrollar los conflictos bélicos preventivos y de baja intensidad con el objeto de imponerle su hegemonía económica, política y militar al resto del mundo, incluso a sus aliados más inmediatos, si es necesario.