«Estamos detectando los pasos que se están dando en la dirección del magnicidio contra Hugo Chávez. La vida del presidente corre un grave peligro. Se han multiplicado las informaciones y los datos que confirman la disposición al asesinato de los grupos que han perdido toda esperanza de derrocar a Chávez porque no tienen posibilidad en […]
«Estamos detectando los pasos que se están dando en la dirección del magnicidio contra Hugo Chávez. La vida del presidente corre un grave peligro. Se han multiplicado las informaciones y los datos que confirman la disposición al asesinato de los grupos que han perdido toda esperanza de derrocar a Chávez porque no tienen posibilidad en los cuarteles, ni en la calle, ni en las elecciones», afirmó el vicepresidente venezolano José Vicente Rangel en el Encuentro Internacional contra el Terrorismo, por la Verdad y la Justicia que se ha desarrollado durante los días 2 al 4 de junio en La Habana.
Asimismo, denunció la vinculación para este magnicidio entre paramilitares colombianos que han entrado en Venezuela, sicarios colombianos y cubanos de Miami. «Moviendo todos los hilos está la agencia de inteligencia norteamericana, sería un crimen de la CIA, del gobierno norteamericano y de Bush», afirmó Rangel.
«No vacilo de responsabilizar aquí al gobierno de Bush de lo que le suceda a Hugo Chávez», añadió.
El vicepresidente de Venezuela también se refirió a las relaciones de Venezuela con Cuba. «Aceptamos la injerencia de los educadores y los médicos, no la de los policías que es lo que sucedía antes», afirmó. Recordó que Venezuela vende a Cuba petróleo igual que lo hace a Jamaica o a Costa Rica, al mismo precio, porque el presidente cubano, allí presente, «por su sentido de la dignidad no aceptaría dádivas».
También desveló una anécdota con el embajador norteamericano quien hace unos años le comentó que estaba preocupado porque «en Venezuela había muchos cubanos». «Estoy de acuerdo con usted -le respondió Rangel- en Venezuela hay treinta mil cubanos anticastristas y mercenarios al servicio de Estados Unidos que quieren conspirar contra Cuba».
José Vicente Rangel también hizo pública diversa documentación procedente de los servicios de inteligencia venezolanos durante el periodo anterior al gobierno de Chávez, en el que se informa de la presencia en 1975 de grupos terroristas organizados de cubanos anticastristas que planificaban acciones armadas contra objetivos civiles cubanos. Entre esos terroristas se encontraban Orlando Bosch y Posada Carriles, ambos responsables de múltiples atentados, entre ellos la voladura de un avión de Cubana de Aviación, provocando la muerte de 73 civiles. Tanto el gobierno cubano como el venezolano han exigido a Estados Unidos su extradición a Venezuela para ser juzgados. El vicepresidente venezolano Rangel adelantó que Venezuela llevará a la OEA esa demanda.