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Carta a Pascual Serrano, de Rebelión

En referencia al artículo «Internet y participación ciudadana»

Fuentes: Rebelión

Hago una visita de rutina a los sitios de internet que me aportan otra perspectiva del estado de cosas. Me encuentro con el artículo de Pascual Serrano que menciono en el título. Me pregunto si ya de entrada no es contradictorio criticar el activismo en internet, cuando uno ha creado un periódico, precisamente en Internet. […]

Hago una visita de rutina a los sitios de internet que me aportan otra perspectiva del estado de cosas. Me encuentro con el artículo de Pascual Serrano que menciono en el título. Me pregunto si ya de entrada no es contradictorio criticar el activismo en internet, cuando uno ha creado un periódico, precisamente en Internet. Sigo leyendo.

…El objetivo es hacernos creer que sentados delante de nuestro ordenador escuchando música y tomando un café estamos luchando por un mundo mejor, escribes. Pues claro. Así es. Así es una de las formas por las cuales se cambian las cosas: mediante internet. Luego pones unos ejemplos seleccionados para la ocasión, para mostrarnos a todos, lo absurdo -según tú- de tal activismo. Sigo leyendo.

…La página me informaba de los miles de personas que habíamos, firmado, ¿y qué más da que fuésemos mil o cien mil?, sigues escribiendo. Hombre Pascual, ¿cómo que qué más da? ¿Cómo que qué más da que 100.000 personas firmen en contra de algo? ¿Acaso esas 100.000 personas, no nos están indicando que quizá están dispuestas a algo más? Sigo leyendo.

Luego recurres a Santiago Alba. Pues me parece muy bien. Cada uno recurre a las autoridades que cree conveniente. Pero vamos Santiago Alba, puede indignarse lo que quiera. Y tú también. Precisamente es la evidencia de que los medios de formación de masas dominan la infoesfera, por lo que la gente participa en el show. Pero ¿cuánta gente ha abierto los ojos a la participación política gracias a internet? De eso, no dices nada. Sigo leyendo.

Nos creemos que estamos cambiando el mundo, escribes. Algunos no nos lo creemos, es que estamos convencidos de que cambios el mundo a cada momento. Es que gracias a internet, fabricamos oxígeno con el que respirar. Y una vez respiramos, hacemos amigos, compartimos información, hacemos propuestas, alteramos la comunicación, creamos y re-creamos mundo todos los días del año. Sigo leyendo.

…Existe algo peor que desmovilizar a los ciudadanos y es hacerles creer que se están movilizando cuando sólo están tomándose un café frente al ordenador, escribes, por último. Y me quedo perplejo. Me pregunto cómo alguien que ha creado un periódico en internet puede pensar así. Te diré una cosa: gracias a internet, en muchos sitios de España, se puede luchar contra el provincianismo más reaccionario, contra el folclore identitario que todo lo impregna, contra la maquinaria de los partidos, que a nivel local, consiguen controlar todo el espacio público e institucional.

Me parece que en tu artículo, olvidas muchas cosas y supones otras tantas, que no voy a detallar por hastío. Pero quisiera decirte algo: No se puede criticar a la ligera una tecnología que posibilita un grado de libertad como no habíamos conocido nunca. Menos aún cuando no se sabe muy bien qué alternativa nos ofrecen sus críticos. ¿La revolución? ¡Ja! En mi ciudad, es gracias a los blogs, que la gente -seamos progresistas o conservadores-, nos hemos encontrado en la red, y esto está teniendo consecuencias muy interesantes, como son, en primer lugar, compartir información, aprender a respetarnos y sobre todo, comprender que frente a la globalización hace falta sentir que vamos todos -seamos políticamente lo que seamos- en el mismo barco. Te digo más: en mi ciudad, es gracias a los blogs que la gente está al tanto de la información politica local que se produce. Ya que los partidos, especialmente Izquierda Unida, son cadáveres que no proporcionan más que información autorreferente. La libertad de expresión que nos otorga internet no es algo con lo que podamos jugar a la ligera, como en mi opinión, lo haces con ese escrito.

Si la gente no hace uso de la posibilidad de autoorganizarse, no te preocupes, ya aprenderán, ya irán abriendo los ojos; ya les ayudaremos a que los abran, pero de ahí, a decir lo que dices, media un abismo.

…Toda esa ciudadanía ha dejado de participar en asambleas vecinales, asociaciones políticas y sindicales o movilizaciones en la calle, dices. ¿La calle? la calle es un puro desierto de anomia. ¿Asamblesas vecinales? ¿Asociaciones políticas? ¿sindicales? No me hagas reír. Eso son dinosaurios. Pero unos dinosaurios muy lentos y normalmente muy bien subvencionados.

Para no extenderme mucho -porque no considero que haga mucha falta, a la vista del éxito de internet entre la gente- si somos incapaces de utilizar Internet para organizarnos con inteligencia, es porque a lo mejor no somos tan inteligentes, ni tan capaces. Porque la gente está ahí, está en internet, pero no ven que la $izquierda$ tenga ninguna alternativa consistente al estado de cosas. No ven nada más allá de los tópicos manidos, de los dogmas, y del recurso a las citas de las autoridades. Eso sí, sectarismo no falta. Autoritarismo, tampoco. Y sobre todo, algo que me duele especialmente, ese narcisismo extremo, por el cual, cualquiera se siente legitimado a pontificar sobre cualquier cuestión social, recurriendo a los clásicos.

Internet, es una tecnología que posibilita democracia. Que la $izquierda$ todavía no haya sabido como potenciarse y autoafirmarse mediante ella es su problema. Yo he comprobado, cómo textos que había escrito, a los que yo no les daba ningún valor, eran recibidos con alegría en sudamérica, con lo cual puede comprender la importancia y el poder de la red. Era mi problema, no haber captado de veras que cualquier cosa que uno lanza a Internet, está potencialmente en cualquier parte.

Por otro lado, dejémonos de hipocresías ¿acaso no debo yo a la Multitud norteamericana, creativa, inteligente y alegre, mucho de lo que he aprendido en los últimos 10 años? Por supuesto. Es gracias a la Multitud norteamericana que he podido ampliar mis perspectivas en una escala enorme. ¿Acaso mi blog no existe gracias a una empresa norteamericana como es WordPress, acaso no está en un servidor norteamericano? ¿Acaso Estados Unidos no es una gran nación? O es que estamos totalmente ciegos. Si fuésemos inteligentes, ayudaríamos con todas nuestras fuerzas al pueblo, a la Multitud norteamericana.

Y en fin, para acabar, quiero agradecer a toda la comunidad hacker y hacktivista la cantidad de tiempo que invierten en la comunidad, creando herramientas, enseñando, compartiendo. Quiero agradecer a los indymedias, a Sindominio, Nodo50, Traficantes de Sueños, Rebelión, y a todos los portales y blogs en general, a todas las singularidades de internet, a la comunidad Linux, a todas las personas que ofrecen su perspectiva, su alegría, su ánimo, su know-how, la riqueza que me aportan a diario. Gracias por todo lo que me habéis enseñado. Gracias por todo lo que habéis hecho posible hasta ahora.

P.D. Thomas Bernhard, uno de mis escritores favoritos, decía que no había nada más absurdo, ni patético, que las «peleas de comunistas». Para hacerse una idea del grado de absurdo, sólo hay que ver la situación de la $izquierda$ en Valencia. De mi ciudad, ni os cuento.

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Internet y participación ciudadana
Pascual Serrano 28-09-2007