Traducción de Susana Merino para Rebelión
La mayoría de los diputados europeos (360 a favor, 299 en contra) pidió el martes en Estrasburgo la aplicación de un impuesto a las transacciones financieras «a escala europea»
Pascal Canfin, diputado europeo (Europa ecología)
«Un impuesto a las transacciones financieras es políticamente posible si Francia y Alemania continúan haciendo verdadera presión para lograrlo, en conocimiento de que España, Luxemburgo y Austria están a favor. Es decir que la mayoría de los países de la zona euro está de acuerdo. Ya no se habla de un impuesto mundial pero sí europeo. Existen dos niveles posibles: o la Europa de los 27 o la zona euro.
Vista la oposición británica tendría que encararse a nivel de la zona euro, en forma de una «cooperación reforzada» entre sus diecisiete miembros. Los Países Bajos e Irlanda son los más reticentes. Pero en vista de la situación de los irlandeses estaría mal chantajearlos cuando los países de la zona euro acaban de salvarlos de la bancarrota.
Con Alemania a la cabeza de la regulación financiera estarían reunidas las condiciones políticas, si Nicolas Sarkozy pasa a la acción. Los Estados son conscientes de que tienen un grave problema de evasión fiscal y de encontrar nuevas fuentes de impuestos que no sean sobre el trabajo.
Lo ideal sería tener un impuesto a nivel mundial
Un impuesto sobre las transacciones financieras le permitiría recaudar a la zona euro unos 100 mil millones de euros. Su uso es tema de debate, pero un compromiso posible sería el de volcar una tercera parte a los países del sur, otro tercio al presupuesto de la UE y otro tercio a los presupuestos de la zona euro.
Lo ideal sería disponer de un impuesto a nivel mundial. Pero en la zona euro se puede aplicar inmediatamente sobre tres grandes clases de mercados: el de cambios, el de acciones y obligaciones y el de los productos derivados. El de cambios en euros sería el más simple. Podemos establecer la regulación de nuestra moneda.
Todas las transacciones financieras del mundo en euros dejan su traza, en determinado momento, en las cuentas de los bancos comerciales o de los bancos centrales. La UE puede decidir imponerles, de golpe, un micro impuesto del 0,05%
Para los otros dos mercados ¿existe el riesgo de que los mercados financieros arbitren en perjuicio de los valores europeos? Sí, pero un micro impuesto reduciría los flujos especulativos sobre las acciones y las deudas públicas europeas. Que es lo que se quiere lograr. El Parlamento ha pedido hablar rápidamente con la Comisión que en lugar de ser la impulsora de la propuesta es la menos entusiasta. Por lo tanto se discute también con Francia y Alemania al mismo tiempo.
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