Así se desprende del informe anual de empleo publicado este jueves por el Ejecutivo comunitario, según el cual también Irlanda y Portugal han afrontado la recesión incrementando el paro, aunque en menor medida.
Según el informe, la Comisión Europea considera que España es el único país de la Unión Europea donde todo el ajuste de la crisis se ha hecho destruyendo empleo, lo que se ha traducido en un aumento de la tasa de paro desde el 8,3% en 2007 hasta el 20,8% en la actualidad, el doble que la media comunitaria. «En contraste con los patrones de ajuste en la mayoría del resto de Estados miembros, sólo España ha hecho frente a la recesión únicamente a través de reducciones de empleo, mientras que Irlanda y Portugal estaban casi en esta situación», asegura el documento.
En el extremo contrario, Alemania, Austria y Bélgica reaccionaron a la crisis reduciendo las horas por trabajador y la productividad por hora, lo que ha tenido un «efecto positivo» en el empleo y permite a estos países «empezar la recuperación en la mejor posición», ha explicado el comisario de Empleo, László Andor, en rueda de prensa.
En un tercer grupo se encuentran Reino Unido y Países Bajos, que se han ajustado reduciendo el empleo y la productividad por hora en lugar de disminuir la media de horas trabajadas por empleado.
El comisario de Empleo ha admitido que estas diferencias se explican «por las diferentes condiciones financieras y económicas» pero también a que «algunos países han sido más previsores que otros» en las reformas para aumentar la flexibilidad del mercado laboral y atajar el aumento del paro.
Según Bruselas, un «factor clave» que explica el mayor aumento del paro en algunos Estados miembros es «la importancia de la construcción, uno de los sectores golpeados con más fuerza por la crisis económica y que acapara una proporción especialmente alta del empleo en países como Irlanda o España». En este sentido, las diferencias entre los Estados miembros reflejan también los niveles de productividad en los sectores más afectados. «Por ejemplo, en Alemania el sector manufacturero se vio gravemente afectado por el desplome de las exportaciones, pero los altos niveles de productividad llevaron a una caída del empleo menor en comparación con la caída del PIB, mientras que en España la gran contracción en un sector con bajo nivel de productividad como la construcción ha llevado a una gran reducción del empleo en comparación con la caída del PIB», señala el informe.
Otro motivo del mayor impacto de la crisis en el empleo, según el Ejecutivo comunitario, es la alta temporalidad. «En el caso de España la alta tasa de trabajadores con contratos temporales, que pueden ser despedidos fácilmente, también explica en parte su mayor reacción a la crisis en términos de empleo», apunta Bruselas. «El uso extensivo de contratos de trabajo temporales en países con contratos indefinidos muy regulados (como España) amplifica la volatilidad del empleo en respuesta a las crisis económicas», afirma la Comisión.
Por ello, el Ejecutivo comunitario ha recomendado esta semana generalizar el contrato único indefinido con indemnización creciente para los países con alta temporalidad, como España, con el objetivo de reducir la brecha entre trabajadores fijos y temporales.
La Comisión alerta en su informe de que la creación de empleo seguirá siendo baja durante las primeras fases de la recuperación y de que existe el riesgo de que aumente el paro de larga duración.