Según la autora del Código Chávez, uno de los frentes es el financiero, expresado en el financiamiento de la oposición; el segundo, es el diplomático. Y el último, la clasificación que impone sanciones por no cooperar contra el terrorismo. ABN La intervención de Estados Unidos (EEUU) en Venezuela está siendo encauzada desde tres frentes de […]
Según la autora del Código Chávez, uno de los frentes es el financiero, expresado en el financiamiento de la oposición; el segundo, es el diplomático. Y el último, la clasificación que impone sanciones por no cooperar contra el terrorismo.
ABN
La intervención de Estados Unidos (EEUU) en Venezuela está siendo encauzada desde tres frentes de ataque, informó la abogada Eva Golinger, autora del Código Chávez, en entrevista al periódico australiano Green Left Weekly (GLW).
Según Golinger, uno de los frentes de ataque es el financiero, sobre el cual EEUU ha venido operando durante los últimos cinco años y que se expresa en el financiamiento de la oposición, con recursos que que se incrementaron el año pasado, y que en algunos casos fueron duplicados, señaló el portal www.zmag.org.
«En en efecto, el financiamiento de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en Inglés), a través de su Oficina de Iniciativas para la Transición, es en la actualidad de 7,5 millones de dólares anuales. Pero, más interesante aún, los receptores de estos recursos han aumentado dramáticamente», explicó Golinger.
En la entrevista, concedida al periodista Jim McIlroy, la abogada recordó que hace tres años había alrededor de 63 organizaciones recibiendo dinero y hoy día, de acuerdo con los documentos recientes, los grupos han aumentado a 132.
«Cuando hablamos de poder financiero, no nos referimos a dinero sino a la penetración de la sociedad venezolana mediante la utilización del dinero para llegar a los más variados sectores. Ellos encuentran grupos que son supuestamente de derechos humanos, grupos que trabajan en el sistema educativo, y así sucesivamente, pero que en realidad trabajan para la oposición».
Refirió que EEUU financia dichas organizaciones en la sociedad civil para obtener el control de ellas en diferentes regiones del país. «Hay gran concentración de programas en Mérida, por ejemplo; también en Táchira y Zulia. En el interior del país, en lugares como Barquisimeto y los estados Lara, Monagas y Anzoátegui».
Golinger explicó que la segunda mayor área de intervención de EEUU es en el frente diplomático, mediante el ejercicio de terrorismo diplomático hacia Venezuela.
«Ello incluye sanciones contra Venezuela por cosas ficticias. En estos momentos, hay tres áreas de posibles sanciones. EEUU señala que Venezuela no está colaborando en enfrentar el tráfico de drogas, lo cual no es cierto. El gobierno norteamericano publicó un nuevo reporte diciendo que estaban sancionando a Venezuela de nuevo por no cooperar en la guerra contra las drogas».
La otra área de confrontación, según la abogada, se expresa en la nueva clasificación creada en mayo de este año -y en la cual Venezuela es el único país en la lista- que impone sanciones por no cooperar en la «lucha contra el terrorismo».
«Aunque EEUU no ha clasificado a Venezuela como nación terrorista, el país suramericano recibe las mismas sanciones que el resto de los países que EEUU considera terroristas», comentó la abogada Eva Golinger al periódico Green Left Weekly.