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Falta de consenso amenaza frente opositor venezolano

Fuentes: Prensa Latina

La falta de consenso amenaza hoy acuerdos unitarios en la oposición venezolana, que aspira a establecer un frente único ante los seguidores del presidente Hugo Chávez con vistas a las elecciones parlamentarias de septiembre. Las discrepancias entre los partidos de derecha agrupados en una denominada Mesa de Unidad provocaron la postergación para la próxima semana […]

La falta de consenso amenaza hoy acuerdos unitarios en la oposición venezolana, que aspira a establecer un frente único ante los seguidores del presidente Hugo Chávez con vistas a las elecciones parlamentarias de septiembre.

Las discrepancias entre los partidos de derecha agrupados en una denominada Mesa de Unidad provocaron la postergación para la próxima semana del anuncio para realizar primarias en 12 circunscripciones electorales.

La cifra de por sí es sumamente pequeña si se considera que el Consejo Nacional Electoral estableció 87 circunscripciones en todo el país para la elección de 165 diputados a la Asamblea Nacional el próximo 26 de septiembre.

Contrariamente a esta situación, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), liderado por Chávez, informó que realizará primarias internas el 26 de mayo entre más de tres mil 500 auto-postulados para elegir sus candidatos a los comicios.

En las filas opositoras, sin embargo, ni siquiera el espíritu de reconciliación de la Semana Santa de los católicos pudo evitar la continuidad de las desavenencias, que en ocasiones han llegado a contactos físicos.

En este caso el punto de fricción fue la solicitud del gobernador de Miranda, Henrique Capriles, de realizar «primarias» también en ese estado, donde promovió al ex dirigente universitario Yon Goicochea.

La propuesta contradice el criterio de dirigentes de partidos opositores que decidieron en los circuitos donde no se harán primarias elegir a los candidatos «por consenso», es decir acuerdos entre las cúpulas de las organizaciones.

Goicoechea, integrado al partido Primero Justicia, apoyó la posición de Capriles opuesta -dijo- a grupos que preferían discutir el acuerdo «en un cuarto cerrado».

Pero la propuesta de Capriles, fue recibida en medios opositores como el diario El Universal como una jugada política estrecha que podría afectar muy negativamente los acuerdos que con gran dificultad ha logrado avanzar la alianza.

El peligro es que la insubordinación de Capriles ante la llamada Mesa de Unidad pueda ser seguida en otros estados, donde se sabe hay muchos sectores y aspirantes disgustados por los candidatos seleccionados por un supuesto consenso.

Las elecciones parlamentarias de septiembre, que centran la actividad política nacional desde ahora, poseen una importancia relevante para Chávez quien pidió a sus seguidores ganar dos tercios de la Asamblea Nacional, como mínimo.

El mandatario venezolano estima que ello es necesario para proseguir los cambios iniciados bajo su mandato en 1999 y profundizar su enfoque socialista.

La oposición, por su parte, aspira a ganar la mayoría y comenzar a revertir algunas de las medidas aprobadas en los últimos 11 años como preámbulo a sacar del poder a Chávez en las elecciones presidenciales de 2012.

Según estimados opositores, este sector tiene la posibilidad de ganar un mínimo de 40 de los 165 diputados, pero podría llegar hasta 80, cercano a la mayoría simple de 83, a partir de lo cual comienzan a sacar cuentas con posibles deserciones «chavistas».

En este caso se apuntan las aspiraciones de atraer a diputados del pequeño Partido Patria para Todos (PPT), un tradicional aliado del PSUV ahora en disputa con Chávez, con lo cual se convertiría en un partido «bisagra» capaz de inclinar la balanza parlamentaria.

Más allá de las cuentas de la oposición, los dirigentes del PSUV afirman que confían en la unidad del partido y la amplia participación mostrada con las auto-postulaciones para garantizar una cifra superior a los 110 diputados, la mayoría calificada.

Para el vicepresidente del PSUV Aristóbulo Istúriz el proceso interno de los socialistas contrasta con las contradicciones de la llamada Mesa de Unidad y da garantía de una cohesión que debe propiciar el triunfo y la continuidad del proceso liderado por Chávez.

Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=175279&Itemid=1