Los nuevos números divulgados esta semana que marchan el aumento de la deforestación en el Amazonas preocuparon al gobierno brasileño, pero las reacciones todavía están lejos de significar una acción preventiva por la preservación de la selva. El número divulgado informa que entre agosto y diciembre de 2007 fueron perdidos 3 mil 235 kilómetros cuadrados […]
Los nuevos números divulgados esta semana que marchan el aumento de la deforestación en el Amazonas preocuparon al gobierno brasileño, pero las reacciones todavía están lejos de significar una acción preventiva por la preservación de la selva.
El número divulgado informa que entre agosto y diciembre de 2007 fueron perdidos 3 mil 235 kilómetros cuadrados de área verde en la Amazonia.
Es un aumento considerable debido a la falta de lluvia en la región que facilita el transporte de madera por entradas ilegales no asfaltadas.
Además de la prolongada seca, la ministra del Medio Ambiente, Marina Silva, afirmó que el aumento del precio de la soja y de la carne de vaca en el mercado internacional tiene relación con el avance de la deforestación.»No creo en la coincidencia», expresó Silva.
Un problema es que el Ministerio de Agricultura no acepta que las plantaciones de soja y de pasto para vacas que avanzan por el sur de la selva sean la causa de la deforestación.