Una guerra económica que se dirime en los anaqueles de los establecimientos y los medios de difusión precede hoy las elecciones parlamentarias, como ocurre ante cada proceso electoral en Venezuela durante la última década. «Estamos en guerra económica por culpa de la burguesía apátrida y parasitaria», aseguró el presidente Hugo Chávez, quien al mismo tiempo […]
Una guerra económica que se dirime en los anaqueles de los establecimientos y los medios de difusión precede hoy las elecciones parlamentarias, como ocurre ante cada proceso electoral en Venezuela durante la última década.
«Estamos en guerra económica por culpa de la burguesía apátrida y parasitaria», aseguró el presidente Hugo Chávez, quien al mismo tiempo ha advertido que no permitirá acciones de acaparamiento y especulación como se han venido manifestando.
Para las autoridades se trata de acciones programadas por algunos de los grandes empresarios del país, encaminada a provocar un ambiente de inseguridad y caos, junto con una ofensiva informativa para culpar al gobierno.
En este contexto, uno de los casos de mayor difusión ha sido el de la orden de aprehensión dictada contra el empresario Guillermo Zuloaga por almacenamiento irregular de 24 vehículos.
La orden contra Zuloaga es presentada en medios opositores como una persecución contra la libertad de prensa, a partir del hecho que el empresario es dueño del canal Globovisión, uno de los principales ejecutores de la campaña mediática contra Chávez.
Al respecto el Ministerio Público aclaró que Zuloaga y su hijo fueron imputados por usura genérica y agavillamiento (asociación delictiva), delitos previstos en la Ley para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y Servicios y el Código Penal.
En el ojo del huracán se encuentra también Polar, una de las grandes empresas de alimentos del país y a cuyo dueño, Lorenzo Mendoza, se le atribuyen aspiraciones presidenciales con vista a los comicios de 2012.
«Quiere ser presidente Lorenzo Mendoza, y los yanquis lo están guiando», afirmó Chávez en relación con las aspiraciones del empresario, uno de los más ricos del mundo con un capital estimado por la revista Forbes en tres mil 200 millones de dólares.
En este contexto el ministro de Comercio Richard Canán advirtió que el Gobierno Nacional continuará actuando contra los comercios y mayoristas que especulen y acaparen los alimentos.
Las medidas van desde ocupación temporal, procesos administrativos, multas y decomiso de la mercancía hasta expropiación.
Según cifras oficiales en el año se han realizado más de 100 mil fiscalizaciones a establecimientos comerciales y se detectaron 28 mil con algún tipo de irregularidades, de los cuales tres mil 900 fueron cerrados y 18 están en proceso de expropiación.
En el caso de Polar, junto a las apetencias presidenciales atribuidas a Mendoza, se expresa asimismo un cambio de condiciones que terminó con la capacidad de manipular la ley atribuida tradicionalmente a los grandes empresarios en Venezuela.
Al respecto el diario VEA alerta hoy en su columna La piedra de tranca que por primera vez en el país hay un claro deslinde entre los grupos económicos y el gobierno.
«Como tiene que ser en una verdadera democracia. Porque si no, los grupos económicos terminan imponiéndose a los gobernantes, es decir, a quienes el pueblo elige en comicios. Que fue lo que aquí sucedió», afirma la columna firmada por Marciano.
Para Chávez, se trata de una batalla económica que precede los comicios del próximo 26 de septiembre para elegir la nueva Asamblea Nacional en un panorama marcado por dos campos que define como revolución y contrarrevolución.
«La burguesía parasitaria y apátrida que gobernó nuestro país durante cien años declaró la guerra, estamos en plena batalla económica «, apuntó Chávez en su más reciente programa radio televisado Aló Presidente.
Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=197203&Itemid=1