Alertan durante foro en Cancún sobre creciente proceso de mercantilización de la enseñanza
Cancun, QR, 13 de marzo. Educadores y dirigentes sindicales de América Latina advirtieron que, como efecto de las políticas neoliberales promovidas en la región, hay 40 millones de personas que no saben leer y escribir y 120 millones de analfabetas funcionales, la misma cantidad de hace dos décadas.
Advirtieron asimismo que existe un creciente proceso de mercantilización de la enseñanza.
En el arranque del quinto Foro Mundial por la Educación de los Pueblos, el presidente de la Confederación de Educadores Americanos (CEA), el uruguayo Fernando Rodal, se manifestó por que en los acuerdos de libre comercio que establezcan los países latinoamericanos se regule la inversión de las empresas trasnacionales en la educación, porque va en aumento en la enseñanza media superior y universidades.
El CEA concentra a 3 millones 250 mil educadores de la región, agrupados en 42 organizaciones, entre ellas el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), la de mayor membresía.
Notable ausencia de Gordillo
En la inauguración del encuentro fue notable la ausencia de la presidenta del gremio, Elba Esther Gordillo Morales. El secretario general del SNTE, Rafael Ochoa, justificó que la maestra sigue con problemas de salud y también ha preferido mantenerse lejos del ruido político.
Dirigentes del sindicato magisterial comentaban en los pasillos que en los últimos años el SNTE ha perdido protagonismo en la CEA, organismo presidido por la misma Gordillo Morales en los 90.
Los sindicatos de Sudamérica han cobrado relevancia, sobre todo a partir de que la confederación ha conseguido financiamiento de organismos internacionales más allá de lo que aporta el gremio mexicano.
Docentes y sociedad, relegados
En la quinta versión del foro, que concluirá este lunes, dirigentes sindicales y educadores insistieron en culpar a los gobiernos de la aplicación de políticas educativas modernizadoras adversas.
Después, en conferencia de prensa, se les preguntó en qué medida los sindicatos han sido obstáculos para que mejore la calidad de la educación en América Latina. Hugo Yasky, dirigente de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República de Argentina, respondió que sí han sido un obstáculo, pero para que avance la privatización del sector.
»En los años 90 hubo en América Latina una especie de tsunami neoliberal que tuvo una fuerza arrolladora y que se planteaba como núcleo de las reformas la privatización de los sistemas educativos. Estamos orgullosos de haber sido un obstáculo, porque si no todos los sistemas educativos estarían privatizados», afirmó.
El dirigente del SNTE, Rafael Ochoa, también se quejó en la sesión inaugural de que existe una obsesión del Estado por restringir su responsabilidad y acción, y delegarlas al mercado.
Después, en conferencia de prensa, Rodal señaló que el problema de las reformas educativas implantadas en América Latina es que se han hecho sin la participación de los docentes y la sociedad, aunque se mostró optimista en que esta tendencia cambie con el ascenso de gobiernos de izquierda, como está ocurriendo en Brasil, Argentina y Uruguay.
En entrevista, explicó que la educación pública tiene muchos rezagos y uno de los grandes retos es acabar con el analfabetismo. Tan sólo en México más de 7 millones de personas no saben leer ni escribir, y el gobierno pretende bajar esta cifra a la mitad, pero sin contar con recursos para hacerlo.
Indicó que en la región hay 40 millones de personas analfabetas, lo que representa la misma cantidad de hace dos décadas, aunque en menor proporción frente a la población total, además de que existen 120 millones de analfabetas funcionales, es decir, que fueron a la escuela pero tienen dificultades para entender y comprender un texto, hacer operaciones matemáticas y explicar procesos históricos.
Rodal indicó que América Latina tampoco ha alcanzado la meta de que los jóvenes de 15 años estén en la escuela, y la principal causa es económica.
Sobre la mercantilización de la educación, Rodal dijo que la enseñanza pública debe ser preservada como derecho y que, por tanto, no puede formar parte de los acuerdos de integración y de libre comercio.
La creciente competencia de las multinacionales por instalar instituciones educativas en la región va a generar una situación «más caótica» de la que se tiene ahora, y por eso algunos gobiernos están planteando revertir este problema en los niveles medio y superior, añadió.