Europa, donde hay seis monarquías hereditarias y diez regímenes políticos con relección ilimitada de sus gobernantes, «es la reina del cinismo», dijo hoy el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, al defender su proyecto de reformas constitucionales que le autorizaría someterse repetidamente al voto popular y establece cuatro formas de propiedad, además de la privada. «Están […]
Europa, donde hay seis monarquías hereditarias y diez regímenes políticos con relección ilimitada de sus gobernantes, «es la reina del cinismo», dijo hoy el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, al defender su proyecto de reformas constitucionales que le autorizaría someterse repetidamente al voto popular y establece cuatro formas de propiedad, además de la privada.
«Están montando un alboroto porque aquí estamos proponiendo que el pueblo decida sobre una figura que en Europa existe desde hace siglos», afirmó Chávez en su programa dominical de radio y televisión Aló, Presidente.
Alemania, Francia, Italia, Portugal, Eslovaquia, Chipre, Estonia, Eslovenia, Grecia y Letonia tienen relección indefinida, señaló Chávez, quien agregó que «a estas alturas del siglo XXI todavía quedan reyes» en España, Suecia, Dinamarca, Países Bajos, Luxemburgo y el Reino Unido.
«¡Ojalá en Europa consultaran a los pueblos sobre sus sistemas políticos y económicos; ellos que tienen reyes y reinas que nadie elige y se perpetúan por su carácter hereditario», sugirió el gobernante.
Chávez presentó a principios de agosto ante la Asamblea Nacional un proyecto para reformar 33 de los 350 artículos de la Constitución vigente desde 1999, que una vez aprobada en el cuerpo legislativo deberá ser sometida a referendo, presumiblemente en diciembre.
El Consejo Nacional Electoral dio a conocer hoy su decisión de que la consulta popular sea votada en bloque y no artículo por artículo, como había propuesto la oposición. Uno de los cambios propuestos es que el presidente sea relegido indefinidamente y no sólo en una ocasión, como lo estipula actualmente la Carta Magna.
El presidente arreció esta semana la defensa general de su iniciativa para responder a la campaña emprendida por la oposición, entre quienes destaca el ex candidato presidencial en los comicios del año pasado, Manuel Rosales, quien perdió ante Chávez.
Al reunirse el sábado con la Asamblea Nacional de Batallones Socialistas, aliada del mandatario, Chávez propuso que una vez aprobada la reforma, la portada de la Constitución deje en el pasado su portada azul y se convierta en «el libro rojo, rojito».
Para contrarrestar las especulaciones de la oposición Chávez precisó: «estoy proponiendo un sistema muy amplio: la propiedad social, colectiva, del Estado y comunal», así como la privada.