La economía de Venezuela, beneficiada con una sólida tendencia a la expansión, tiene hoy en la inflación y el exceso de liquidez dos de los principales retos que debe enfrentar a corto plazo. El Indice de Precios al Consumidor (IPC), previsto inicialmente para este año en torno al 10 por ciento, fue revisado por las […]
La economía de Venezuela, beneficiada con una sólida tendencia a la expansión, tiene hoy en la inflación y el exceso de liquidez dos de los principales retos que debe enfrentar a corto plazo. El Indice de Precios al Consumidor (IPC), previsto inicialmente para este año en torno al 10 por ciento, fue revisado por las autoridades y se llegó a una meta inflacionaria entre el 14 y 15 por ciento. Precisamente, analistas de organismos especializados y fuentes gubernamentales reconocieron que el comportamiento de ese indicador constituye un tema pendiente de solución para el ejecutivo. Los datos mas recientes del Banco Central de Venezuela (BCE) revelaron una tasa de inflación del 0,7 por ciento en octubre, muy inferior al 1,9 correspondiente a septiembre y cercana a la registrada en igual mes del 2005 (0,6 por ciento). Sin embargo, ya el acumulado de los primeros 10 meses del 2006 llega al 13,4 por ciento, superior al de similar periodo del pasado año (12,3 por ciento) y cercano al objetivo inflacionario para el actual ejercicio. Por otra parte, la economía nacional enfrenta en los últimos dos meses del 2006 la presencia de factores susceptibles de estimular el aumento en el IPC, con un incremento previsto en los niveles de liquidez y el repunte de la demanda en el mercado interno. Para los expertos, la liquidez actúa como incentivo en el alza de los precios y ya al cierre del 20 de octubre la masa monetaria en circulación alcanzó los 98,1 billones de bolívares (45 mil 600 millones de dólares). Esa cantidad representa un crecimiento superior a los 28 billones de bolívares (unos 13 mil millones de dólares) desde enero a la fecha mencionada, con claras opciones de ganar terreno. En efecto, el 1 de noviembre el gobierno inició el pago de los aguinaldos a los empleados públicos, equivalentes a 90 días de salario, con lo cual se inyecta una suma importante al sistema financiero nacional. Hace varias semanas el gobierno e instituciones como el BCV activaron medidas para frenar el repunte inflacionario, varias de ellas con efectos a mediano plazo. El paquete incluyó el aumento en las autorizaciones de divisas para importaciones de los organismos competentes, mecanismos vinculados a las emisiones de bonos y el control sobre los ingresos adicionales por las ventas de petróleo. El control sobre el IPC es importante para las autoridades, pues en caso contrario el encarecimiento del costo de la vida reduciría el efecto positivo generado por el incremento del salario mínimo hasta los 238 dólares mensuales.