Irán se ha convertido en la manzana de la discordia entre Estados Unidos y el resto de las naciones económica y políticamente más importantes del mundo después de que el presidente Donald Trump rechazara el acuerdo nuclear firmado en el 2015 por la nación persa con los seis mediadores internacionales (Rusia, Estados Unidos, el Reino […]
Irán se ha convertido en la manzana de la discordia entre Estados Unidos y el resto de las naciones económica y políticamente más importantes del mundo después de que el presidente Donald Trump rechazara el acuerdo nuclear firmado en el 2015 por la nación persa con los seis mediadores internacionales (Rusia, Estados Unidos, el Reino Unido, China, Francia, Alemania) al tildarlo de «uno de los peores» que Washington haya signado jamás.
La Casa Blanca anunció además que impondrá sanciones a compañías que comercien con Irán lo que provocó una escalada en los precios del petróleo y lo más peligroso, continúa echando leña al fuego al ya caldeado ambiente en Oriente Próximo.
Todo indica que Trump ha tomado como línea a seguir las declaraciones de uno de los halcones más siniestros del país, Henry Kissinger, exsecretario de Estado durante la gobernación de Richard Nixon, quien también fue uno de los gestores principales del golpe de Estado contra el presidente chileno Salvador Allende y propulsor de la operación Cóndor.
«Dijimos a los militares, afirmó en una entrevista, que tendrían que conquistar más de siete países de Oriente Medio por sus recursos y casi han completado su trabajo. Es solo la última piedra del camino, es decir, Irán, la que realmente inclinará la balanza. ¿Cuánto tiempo pueden China y Rusia esperar y ver a América poniendo orden? El gran oso ruso y la hoz china se han despertado de su letargo, y aquí es cuando Israel tiene que luchar con todas sus fuerzas y armas para matar a tantos árabes como pueda. Esperemos que si todo va bien, la mitad de Oriente Medio será israelí».
De todas formas, el rechazo internacional contra la escalada norteamericana hacia Teherán ha sido amplio.
La Unión Europea, que al parecer dejará de seguir al pie de la letra las órdenes y dictámenes que le impone Washington, en esta ocasión se rebeló y anunció que activó medidas de bloqueo que permitirán neutralizar las resoluciones.
Ese estatuto permite a las empresas europeas contrarrestar las consecuencias extraterritoriales de las sanciones estadounidenses e invalida el efecto en la Unión de toda sentencia de cortes extranjeras basadas en ellas, según un comunicado.
Las contradicciones entre el bloque comunitario y Washington se han disparado desde la llegada a la Casa Blanca del magnate Donald Trump que ha motivado reacciones adversas de Bruselas.
La cancillera alemana, Angela Merkel, dijo recientemente que «hay conflictos a las puertas de Europa, la época en la que podíamos confiar en Estados Unidos se acabó y Europa debe tomar su destino en sus propias manos. Washington ha dejado de ser aquel antaño seguro aliado».
Rusia mantiene por su parte una estrecha relación económica y política con Irán, que va desde la colaboración en conflictos regionales como en Siria, hasta la ampliación del intercambio comercial.
En Beijing, el portavoz del Ministerio de Comercio, Gao Feng reafirmó que seguirán colaborando con Irán en el sector económico y comercial a pesar de las sanciones estadounidenses pues Teherán es un socio sumamente importante.
En 2017 el intercambio comercial entre China e Irán creció en 19 % frente a 2016 y alcanzó 37 100 millones de dólares, y en los primeros cinco meses de 2018, aumentó un 10,1 % alcanzando 16 700 millones de dólares en relación con el mismo período del año anterior.
En tanto, la ministra de Exteriores de la India, Sushma Swaraj significó que no reconocerán e ignorarán las sanciones estadounidenses contra el país persa pues las relaciones entre ambas naciones no se limitan a la compra y venta de gas y petróleo sino que además es una cuestión de seguridad nacional.
Aseguró waraj que Nueva Delhi no formula la política exterior en función de las presiones de otros países, o sea, reconocen las sanciones de la Naciones Unidas y no las de un Estado en concreto.
La India, puntualizó, continuará comprando petróleo a Irán -su tercer proveedor- y quiere empezar a pagar en rupias a través del UCO, su banco estatal, porque no está expuesto a Washington. Nueva Delhi compró 114 % más de petróleo a Irán entre enero y marzo de este año que durante el mismo periodo de 2017.
Un estudio elaborado por US News and World Report destaca que Irán se halla en el lugar 13 entre los países más poderosos del mundo por delante de otros como India, Australia, Italia y España y ha mejorado su posición global respecto a 2017 en influencia internacional y fuerza económico, político y militar.
Revela el documento que el país posee una de las economías más poderosas y desarrolladas de Oriente Medio que refleja el altísimo nivel que despierta Irán dentro de las potencias mundiales unido a sus cuantiosas reservas petroleras. Esto sucede a pesar de haber soportado durante varios años duras sanciones económicas y políticas de Estados Unidos y la Unión Europea.
La nación persa, con 82 203 000 habitantes, posee una fuerte economía que la ubica en el lugar 17 de mundo por su Producto Interno Bruto estimado en 1 006 millones 540 000 dólares. Es el tercer exportador de petróleo del orbe.
Ubicada en una estratégica zona del continente asiático en la zona del Golfo, tiene una extensión de 1 745 150 kilómetros cuadrados y limita al noroeste con Turquía, Armenia y Azerbaiyán; Irak al oeste; Turkmenistán al noreste; Afganistán al este; Pakistán al sureste y el Golfo al sur.
Irán ha trabajado durante años por desarrollar el país con medios propios, sin desechar los adelantos tecnológicos y científicos internacionales, lo cual le ha permitido mantener un crecimiento sostenido que le ha posibilitado esquivar y amortiguar las agresivas maniobras occidentales.
Todo esos elementos enumerados hacen pensar que la política del magnate Donald Trump contra Irán esta encaminada al fracaso ante el rechazo de la comunidad internacional.
Hedelberto López Blanch, periodista, escritor e investigador cubano.
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