La guerra mundial de clases es una realidad. En todo el mundo se lucha por acabar no con la pobreza, no contra el hambre, no por la salud y la dignidad, sino por defender los intereses de las oligarquías colonialistas y violentas dispuestas a defender sus capitales a misilazos y sus riquezas con otra guerra mundial.
Lo que ocurre ahora en Gaza y Cisjordania, la Palestina ocupada es consecuencia del colonialismo vigente y que la anglosfera defiende al objeto de favorecer su poder y por tanto sus riquezas, las de sus élites y oligarquías y en esta estrategia el papel del estado de Israel es decisivo, pues es una gran base militar y gendarmería, clavada en plena ruta comercial y marítima, un portaviones permanente armado y potencia nuclear en el corazón del mundo, en el Mediterráneo, cerca del Bósforo, el Canal de Suez y a las espaldas de Rusia y China.
Se lucha por defender los intereses de las oligarquías colonialistas y violentas dispuestas a defender sus capitales a misilazos y sus riquezas con otra guerra mundial
La anglosfera dominante, es decir, los EEUU y el Reino Unido más sus colonias de Canadá y Australia unidas al sionismo y con intereses comunes si no superpuestos, conforman un eje de dominio real que tiene en la Unión Europea no solo un fiel aliado. La UE, es una zona que controlan y que carente de soberanía real presta sus servicios a la anglosfera renunciando a la defensa de sus intereses y los de sus pueblos. Esto lo puedo afirmar más alto, pero no más claro.
Pero para mantener ese poder colonial en primer lugar hay que contar con otras potencias colonialistas de la Unión, como Francia, Italia y España, la parte más influyente de la Unión Europea sin olvidar a Bélgica u Holanda con intereses en América, África y Asía.
Israel es igualmente una potencia colonialista y ocupa Palestina con mano de hierro, a sangre y fuego. Las colonias israelíes no solo son un apartheid sino también un foco de riqueza aunque esto siempre se oculte, con mano de obra barata y una agricultura que controla para su comercio exterior el invasor.
La Anglosfera no solo controla y esa sería la segunda premisa a la UE, sino también otros estados mediante la corrupción de sus dirigentes, monarquías inestables pero fieles a EEUU o naciones empobrecidas que necesitan recursos y préstamos del FMI y del Banco Mundial.
Israel es igualmente una potencia colonialista y ocupa Palestina con mano de hierro, a sangre y fuego
A pesar de todo ello cada vez hay más movimientos de libertad, han surgido potencias muy fuertes en el Sur y Eurasia y se planta cara al imperio anglosajón comenzando por nuevos entes económicos y el objetivo a medio plazo de des dolarizar sus economías.
Hay potencias que juegan a dos barajas luego el coste de dominio es mayor y mucho más costoso, de hecho el estado más endeudado del mundo son los EEUU y la economía británica está en una posición muy delicada, pero basando los EEUU sus negocios en el dólar y poder militar dominan lo cual les lleva a estar siempre en la guerra contra los pobres, impidiendo soberanías y colonizando por la fuerza.
El problema surge cuando el poder militar está al menos equilibrado y la capacidad de destrucción del mundo es la misma en ambos bandos como de hecho ocurre.
Carentes de estructuras internacionales políticamente coherentes los estados pobres, pero sobre todo las personas pobres y las clases obreras, sufrimos y estamos lejos de alcanzar nuestros objetivos que no son sino la paz, la dignidad, el techo, la salud, la educación y una vida con felicidad y libertad, sin desigualdades.
Creo que hay que apoyar las iniciativas que surgen en SUR global como parte de la crisis del dominio colonial de la anglosfera
Pero el mundo cambia. La invasión de Ucrania por Rusia con todas sus negatividades ha de ser tenida en cuenta necesariamente. Tras las sanciones a Rusia se fortalece su alianza con China y una con una posición independiente y de gran potencia resurge la India. Los BRICS que son parte de esta nueva iniciativa nos llevan a no olvidar, pues son más importantes de lo que parece, los golpes de estado anticolonialistas en África contra sus élites corruptas.
Ante esto tres consideraciones:
En primer lugar creo que hay que apoyar las iniciativas que surgen en SUR global como parte de la crisis del dominio colonial de la anglosfera. Iniciativas que van desde alianzas y pactos de estados a golpes militares anticolonialistas en África.
En segundo lugar a los movimientos de liberación, partidos y sindicatos del SUR global que con problemas e incluso incoherencias, inician el duro camino de la soberanía con el apoyo de su pueblo pobre y sus clases obreras, todo nuestro apoyo y humilde colaboración. Porque ellos son más valientes y capaces que nosotras y nosotros, las clases trabajadoras occidentales. Hemos además de pedirles auxilio o ayuda.
En tercer lugar apoyar la creación de un movimiento internacionalista e internacional, pero en el que ellas y ellos, los del SUR deben jugar el papel de dirección que se lo han ganado a pulso. Internacionalismo de clase y solidario. Ante esto y hay que saberlo y decirlo, las internacionales eurocéntricas y anglosajonas, impulsadas por la clase media ilustrada y progresista europea y/o del Norte global, están condenadas al fracaso y a la intrascendencia.