El sector de la Organización de las Naciones Unidas para los pueblos indígenas divulgó el martes, día 18, un informe sobre la situación de los indios en Brasil. El documento critica, entre otras cosas, la demora en la demarcación de las tierras indígenas, que viene contribuyendo para la desprotección de los indios por parte del […]
El sector de la Organización de las Naciones Unidas para los pueblos indígenas divulgó el martes, día 18, un informe sobre la situación de los indios en Brasil. El documento critica, entre otras cosas, la demora en la demarcación de las tierras indígenas, que viene contribuyendo para la desprotección de los indios por parte del poder público.
La ONU apunta que el gobierno brasileño precisa encontrar una armonía entre la economía y los intereses de los indios. Son pocos los avances en las políticas para los indígenas, de acuerdo con el informe, y faltan garantías de participación en las decisiones, sobre todo en los casos que afectan directamente a los indios, como proyectos de construcción de carreteras, explotaciones de recursos minerales y represas.
El secretario del Consejo Indigenista Misionero, Saulo Feitosa, cree que Brasil precisaría integrar la política de todos sus órganos gubernamentales con las necesidades de los pueblos indígenas.
«Entre el derecho conquistado en el papel y la práctica hay una distancia muy grande. Lo que podemos entender es que el informe critica la política nacional, que no incorpora la política indigenista. Esta política tiene que ser entendida dentro del conjunto de las acciones del gobierno.»
Dentro del informe de la ONU, datos muestran que los indios viven en condiciones precarias. La falta de control de la tierra por los pueblos es vista como un agravante para el aumento de la pobreza y la disminución de la salud. Mientras el país presenta una tasa de 15% de pobreza, entre los indios el índice supera los 35%.