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Entrevista a Galo Chiriboga, ministro de Petróleos y Minas de Ecuador

«La seguridad jurídica debe ser recíproca entre el Estado y las petroleras extranjeras»

Fuentes: Americaeconómica

Galo Chiriboga, ministro de Petróleos y Minas de Ecuador, ha declarado a Americaeconomica.com que el Gobierno ecuatoriano «mantendrá el equilibrio económico de los contratos con las petroleras foráneas», entre ellas la hispano-argentina Repsol YPF y la brasileña Petrobras, que se verán afectadas por los cambios en los acuerdos petroleros anunciados en repetidas ocasiones por el […]

Galo Chiriboga, ministro de Petróleos y Minas de Ecuador, ha declarado a Americaeconomica.com que el Gobierno ecuatoriano «mantendrá el equilibrio económico de los contratos con las petroleras foráneas», entre ellas la hispano-argentina Repsol YPF y la brasileña Petrobras, que se verán afectadas por los cambios en los acuerdos petroleros anunciados en repetidas ocasiones por el presidente del país, Rafael Correa. Chiriboga también ha hablado sobre el acuerdo con Venezuela para la construcción de una refinería en Manabí y de las expulsiones de los indígenas de sus territorios en la Amazonía, las cuales asegura desconocer.

– Según ha informado el ministro de Economía ecuatoriano, Fausto Ortiz, su país ha perdido unos 300 millones de dólares (219,6 millones de euros) debido a la bajada de un 10% de la producción petrolera de su país en 2007. ¿A qué se deben estas pérdidas?

– La caída de la producción obedece a varias causas. La primera es debido a que en el Ecuador los campos tienen más de 30 años de explotación y hay una tendencia natural al declive. Una segunda razón es por la falta de inversión en los campos petroleros, sobre todo de la industria petrolera ecuatoriana; inversión que no se ha podido realizar fundamentalmente por problemas de gestión administrativa en Petroecuador [la petrolera estatal del país andino] desde hace muchos años atrás. En tercer lugar, está el que no hemos podido concretar nuevas rondas ‘digitatorias’ que permitan incorporar más producción de petróleo en Ecuador. Estas son las cuatro grandes causas por las cuales tenemos que ratificar la información del ministro de Economía. Ahora bien, en el punto actual, hemos logrado detener la curva decreciente de la producción. Estamos haciendo un esfuerzo por mantener un nivel de producción estable que está bordeando niveles de producción que en el día de hoy, por ejemplo, hemos alcanzado 172.215 barriles de petróleo. El sector privado también tiene una producción que, sumada a la estatal, se acerca casi al medio millón de barriles diarios. Entonces el esfuerzo en este momento está en mantener niveles cercanos en cuanto a la producción pública cercanos a los 170.000 barriles diarios.

– ¿Qué medidas tomarán para relanzar la producción de crudo?

– Aspiramos hasta diciembre incorporar 5.000 barriles más y llegar a una producción promedio de 175.000 barriles diarios. Tengo varios indicios de que en el Bloque 15 vamos a acercarnos a finales de diciembre a los 98.000 barriles diarios aproximadamente. Estamos dotando de recursos económicos a Petroecuador para que pueda tener recursos para la exploración. Espero que, en unas dos semanas más, podamos avanzar con la licitación de campos marginales. Si concluye, como espero que así sea, este proceso de licitación nos traerá el próximo año unos 30.000 barriles diarios más. Y para ello se estima una inversión privada de aproximadamente 230 millones de dólares. Todo esto nos va a permitir, sin duda, que el próximo año tengamos una mejor producción petrolera. Los campos marginales han tenido una licitación donde participaron empresas privadas y estatales, como Ecopetrol, que también participó.

– ¿Cuánto petróleo tiene que producir Petroecuador para que el país llegue a la autosuficiencia energética de este combustible?

– Entre lo que exportamos y lo que importamos debemos mantener, por lo menos, 173.000 barriles de producción estatal diaria. Nosotros exportamos 10.304.000 barriles de petróleo en el mes de marzo y el consumo interno de Ecuador está en el orden de 5.180.000 barriles en el mismo mes. Estamos en una situación adecuada, es decir, nuestra exportación petrolera duplica a nuestro consumo.

– Ecuador construirá en la provincia costera de Manabí una refinería con ayuda de Venezuela. ¿Cuál será la capacidad de producción de esta planta y cuándo se prevé que comience a funcionar? ¿Cuántos puestos de trabajo se crearán?

– Con la construcción de la refinería y el cambio de las exportaciones de crudo por derivados de petróleo, esta planta puede tener fácilmente una capacidad de producción de 300.000 barriles diarios. Ahora apenas tenemos los estudios que tanto Pdvsa [petrolera estatal de Venezuela] como Petroecuador van a desarrollar para el proyecto de la refinería en Manabí. Estimamos que esos estudios estén concluidos a finales de este año o principios del que viene para ver la caracterización de la demanda de capital y personal de la refinería de Manabí.

– Ecuador recibirá en octubre y noviembre dos torres de perforación venezolanas. Según anunció usted mismo, su país ha adquirido estas torres por 40.000 dólares, mientras que en el mercado internacional cuestan 250.000 dólares diarios. ¿Cómo explica esa diferencia tan grande?

– Ahí hubo un error de mi parte en cuanto a la cantidad que dije inicialmente. Esa cifra se produjo en una conversación con el ministro de Energía de Venezuela y cuando le pregunté por el coste aproximado en el mercado me dijo que la demanda es tan grande por torres de perforación que podría estar en este orden. Pero se trata de una cifra que no corresponde con la realidad del mercado, sino que puede estar en los 40.000 ó 45.000 dólares diarios. Esta semana irá a Venezuela una comisión integrada por miembros del Ministerio de Minas y Petróleos de Ecuador y de Petroecuador para que conversen sobre los detalles técnicos de esta operación en Venezuela.

– ¿Tienen otros proyectos energéticos conjuntos con Venezuela?
– El tema de la refinería está ligado a que nosotros también exploremos en el Orinoco. Esta comisión va a tratar también el tema de las condiciones con las que Ecuador participará en la exploración en Venezuela.

– El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha anunciado varias veces durante su mandato que el Gobierno va a modificar los contratos entre el Estado y las petroleras extranjeras. ¿Cómo van a afectar estos cambios a los inversores foráneos?

– Queremos incorporar sobre la base del diálogo y la concertación con nuestros contratistas esos criterios a cada uno de los contratos y analizar en cada uno de ellos lo que el estado ecuatoriano podría incrementar, y digo podría si es que esto es posible hacerlo. De modo alguno no es nuestra intención afectar el equilibrio económico de los contratos. Mi preocupación está en crear un espacio de concertación y diálogo con los contratistas. Tenemos ya algunas empresas que nos han pedido iniciar ese proceso. Espero en una semana y media o dos semanas anunciarle al país con qué empresa vamos a comenzar eso. Para ello voy a conformar un equipo que estará formado por abogados, personas del mundo de las finanzas, expertos de la industria del petróleo y la asistencia permanente de la Procuraduría del Estado, que es, digamos, el abogado de la nación.

– Hace días usted dijo que su Gobierno se ocupará de asegurar un marco de seguridad jurídica para que no se vayan los inversores extranjeros…

– Mantener la seguridad jurídica es una obligación de cualquier país democrático. Pero no es una seguridad jurídica solo para las empresas, sino también una exigencia del Estado para que las empresas le den seguridad jurídica en sus contratos, es decir, que tengamos un serio compromiso de ambas partes para cumplir las obligaciones.

– ¿En qué punto se encuentran las negociaciones entre el Ejecutivo y las petroleras foráneas?

– Estamos iniciando ese proceso. No es un proceso fácil. No podemos tener un criterio único, sino que tienen que ser criterios sectoriales para cada contrato analizando la situación específica de cada contrato. No debe de ser una norma general porque los contratos y las condiciones de cada uno de ellos son diferentes.

– ¿Cuáles son los principales obstáculos en sus conversaciones?

– No veo obstáculos con nadie y si los hay tenemos que hacer esfuerzos para superarlos.

– ¿Qué propuestas energéticas va a plantear el Gobierno de cara a la nueva Constitución que redactará la Asamblea Constituyente?

– El tema de la reforma de la Constitución lo manejará directamente la Presidencia de la República y nos consultará a nosotros para plantear los temas sobre el petróleo, la minería y la energía para que le demos nuestra opinión.

– Luis Macas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), ha explicado a este diario que multinacionales como Texaco, Petrobras y Repsol YPF han arrebatado territorios a las comunidades indígenas en su país debido a las concesiones del Gobierno, lo que les ha obligado a marcharse a otros lugares. ¿Se han posicionado al respecto?

– No. No conocemos la existencia de empresas mineras y petroleras expulsando a pueblos originarios. Esto no puede darse. Estas compañías tienen que, en términos de seguridad jurídica, respetar las condiciones medioambientales del país, las condiciones sociales de las comunidades de estos pueblos. No he conocido que las empresas Repsol, Petobras y Texaco hayan originado una expulsión de pueblos originarios en las zonas petroleras.

– ¿En qué se diferencia el Gobierno de Rafael Correa de otros gobiernos en materia energética?

– Que tenemos una política nacionalista vinculada al respeto al medioambiente y a las comunidades en donde las empresas mineras y petroleras ejercen su actividad. Además, se trata de un Gobierno que dará seguridad jurídica a las empresas que tratan con el Estado.

– ¿Por qué cree que no resultaría efectiva en Ecuador una nacionalización de los recursos naturales ‘a la boliviana’?

– Porque son procesos distintos. Bolivia es un país soberano que ha creído que la vía de la nacionalización es la más adecuada en su caso. Ecuador observa este hecho como observa cualquier hecho latinoamericano. Las políticas de Venezuela, de Bolivia o de Ecuador son diferentes en cada caso.