El sistema de pensiones sueco es el que ha ido más lejos -y desde hace mucho tiempo- en la lógica de las llamadas cuentas nocionales. Incluso si el sistema de puntos propuesto para Francia no es un puro calco, se reclama de los mismos principios de contributividad y universalidad. Como al modelo sueco se le […]
El sistema de pensiones sueco es el que ha ido más lejos -y desde hace mucho tiempo- en la lógica de las llamadas cuentas nocionales. Incluso si el sistema de puntos propuesto para Francia no es un puro calco, se reclama de los mismos principios de contributividad y universalidad. Como al modelo sueco se le atribuyen todos los méritos, es esclarecedor analizarlo en detalle y ver el fondo del escenario 1/ .
La ley de bronce de las pensiones
Las reformas de pensiones a menudo contienen una cláusula oculta: que no aumente la proporción de las pensiones en el ingreso nacional. La adopción de esta regla, a menudo llamada de sostenibilidad financiera, conduce aritméticamente a una disminución relativa de la pensión, ya que el número de las personas pensionistas aumenta más rápido que el de las activas (véase el anexo para una demostración). Por tanto, sea cual sea el sistema de pensiones, las reformas se distinguen solo por la elección de los dispositivos adoptados para hacer cumplir esta regla general que implica un empobrecimiento relativo (incluso absoluto) de las y los pensionistas.