Primeramente, se ha evidenciado que una estructura mundial se ha venido imponiendo sobre las naciones a través de la fuerza del chantaje y la dominación económica, y nos lleva a un enramado de relaciones internacionales peligrosas. Esta nueva agenda mundial demanda la activación de nuevos modelos y esquemas de actuación a las FFAA con el […]
Primeramente, se ha evidenciado que una estructura mundial se ha venido imponiendo sobre las naciones a través de la fuerza del chantaje y la dominación económica, y nos lleva a un enramado de relaciones internacionales peligrosas. Esta nueva agenda mundial demanda la activación de nuevos modelos y esquemas de actuación a las FFAA con el fin de confrontar exitosamente esos retos, puesto que según las realidades y amenazas emergentes se requieren cambios profundos en sus tácticas y estrategias. De no lograr adaptarse a las nuevas circunstancias, las FFAA podrían verse en el mundo como parte del problema y no de la solución. Mientras tanto, la pobreza, el hambre, el terrorismo, la injusticia social, el narcotráfico, el imperialismo, el odio racial, las trasnacionales, y el Plan Colombia, se distinguen como serias amenazas contra la humanidad. Observando el accionar de las agendas de las grandes potencias, se ha podido apreciar la intención de crear un neocolonialismo que marca la nueva agenda mundial y, para nosotros, este no tiene sino el propósito de refundar un nuevo pensamiento geopolítico basado estrictamente en lo económico y más específicamente en lo comercial, pero que pasa por rendir de hambre al mundo en desarrollo. Por ejemplo si nos fijamos en el concepto de interés nacional de Estados Unidos, allí se cambió su concepción pues ahora deben atender no sólo a la seguridad militar y la seguridad económica, sino que todo lo que atente contra su desarrollo y su economía es una amenaza. Venezuela es el primer suplidor de petróleo de USA, lo que nos hace un asunto de interés nacional para ellos. Y es el caso, por ejemplo que el 24 de Marzo de este año (2004), el Comandante de las Fuerzas Estadounidenses para Americalatina, el General James Hills, Jefe del Comando Sur, compareció por ante el Comité de las Fuerzas Armadas del Congreso de USA y les hizo una exposición sobre la situación de su área de operaciones. Hills manifestó que había aparecido en el horizonte la Amenaza Emergente que afectaba la Seguridad Hemisférica. Esa amenaza era el Populismo Radical. Dicha amenaza era visualizada como muy peligrosa y que existía con ahínco en Venezuela, Haití, y Bolivia. Él lo veía también en el contexto de Buenos Aires y en los acuerdos del Presidente Kishner (Argentina) y del Presidente Lula (Brasil) porque ese acuerdo cuestiona la validez de las reformas neoliberales y hace énfasis en el respeto por los países pobres y por ende era una amenaza para los intereses norteamericanos. En este tenor y a propósito de la XX reunión de Directores de Colegios de Defensa Iberoamericanos, entre sus conclusiones cuestionaron duramente el Modelo Unipolar norteamericano señalándolo con un asunto que afecta nuestras soberanías, y enfatizaron como amenazas a la seguridad hemisférica al terrorismo y a la pobreza y resaltaron la injerencia de superpotencias, como Estados Unidos, en asuntos internos de otros países, exigiendo la clarificación del contenido de la carta de las Naciones Unidas, la OEA, y otros foros multilaterales. En este mismo orden de ideas, el presidente Hugo Chávez sentenció, mientras supervisaba el TO1 debido a la reciente masacre a militares venezolanos producida por insurgentes colombianos, «…que quienes pretenden dominar el mundo tienen que ver mucho del agravamiento del conflicto en Colombia, en vez de mandar tropas y armas, se debe procurar la paz con la intermediación de la ONU y la OEA, de ser así, dicho conflicto tomaría otro rumbo. Los hechos violentos tienen su origen en la «mentalidad imperialista» que ha vuelto recrudecida«. Por lo tanto, hay que fortalecer los entes internacionales para evitar la imposición de unos sobre otros a instancia de su poderío económico y militar. La ortodoxia militar que alienta la forma convencional de hacer la guerra, esta siendo relegada. Los conceptos de Nación en Armas, la Doctrina de Guerra de Todo el Pueblo y la Unidad Cívico-Militar, están abriéndose paso en la teoría y en la práctica. El punto central, es que en el pensamiento militar y las tácticas y estrategias militares que se estaban usando no tienen vigencia contra las nuevas amenazas y contra los nuevos enemigos, porque simplemente en este momento no funcionarían. Hay que pensar de un modo distinto, pues el nuevo estado de cosas degenera una guerra NO convencional. Esto nos retrotrae a 1871 cuando los barrios obreros de París se alzaron en armas, sin contar con entrenamiento militar, pusieron en duros aprietos al ejército prusiano, el mejor de Europa y al ejército francés. Como segundo aspecto , los nuevos tiempos y nuevos giros de la política internacional, muestran la posibilidad cierta de la integración política y militar, especialmente en Latinoamérica. Se está pasando de la retórica diplomática a la acción de Estados y gobiernos. En fecha muy reciente, la prensa internacional dio cuenta de un cable en donde se informara que el Ministro de la Defensa Argentino, José Pampuro , informaba sobre la posible creación de una Secretaría Permanente de Asuntos Militares del Mercado Común del Sur, MERCOSUR, más Chile y Bolivia. Esto fue señalado por el ministro en el acto de clausura de una reunión de jefes de los ejércitos de los países miembros del Mercosur, en la ciudad de Bariloche. La propuesta tiene consenso político en los altos gobiernos de los países y será llevado a consulta de los ministros de defensa de Sudamérica. Este tipo de propuesta va de la mano de iniciativas impulsadas por el Presidente Hugo Chávez cuando lanzó la idea de una OTAN para el sur, llamándola; OTAS y también se parece a la idea que defiende Hienz Dieterich sobre el Bloque Regional de Poder (BRP). Estos hechos dan a entender que la región tiende a unirse y tratar temas cruciales, como la integración militar, con mucha más autonomía. Y por su puesto evidencia también que en el Hemisferio, hay un rechazo uniforme por la Doctrina Monrroe, lo cual la ha debilitado hasta casi su muerte. Sin embargo, los resultados de este trabajo de campo registran que, ésta integración política, energética y militar Latinoamericana sólo se dará si entendemos las coyunturas actuales y si entendemos que la construcción de la liberación de los pueblos tienen que darse con el concurso de los las fuerzas civiles y las fuerzas militares democráticas con clara conciencia de que esta liberación es la que, hace 200 años, soñaron Bolívar, Sucre, Martí, O´ Higing, Abreu E´ Lima, entre otros. Afortunadamente, se han erigido nuevos actores sociales, políticos, culturales, y militares que retan la imaginación y la conformación de estrategias alternativas para afrontar los cambios con eficacia. Venezuela es una propuesta de una agenda de esperanza, no afincada precisamente en dogmas, ni en pensamientos meramente ideológicos, sino, Venezuela es una propuesta concreta. Tal como lo ha pregonado el Presidente Hugo Chávez, Venezuela no hará alianzas con ningún país para la guerra y sólo si nos necesitan para llevar aliento y ayuda humanitaria allí estará el país de Bolívar. Queremos la paz en el mundo, el único camino a la paz es la justicia, la igualdad entre los seres humanos, y la confraternidad. Los cambios de la política militar venezolana son vistos muy positivas, especialmente en cuanto a la integración con países latinoamericanas y extracontinentales en formas de maniobras conjuntas, puesto que sus finalidades podrían ser complementarias si las posibilidades de asociación estratégica que ofrecen se enlazan con el potencial de unificación militar suramericano». Ciertamente, la alianza Comunidad Suramericana-Unión Europea crearía un balance ante las pretensiones de unipolaridad norteamericana. Un Nuevo Estado de Cosas demanda también nuevas alianzas. Por ejemplo, nuestro Vicepresidente Ejecutivo, José Vicente Rangel, dirigió una nutrida delegación para revisar los acuerdos recientemente suscritos entre Venezuela y la Federación Rusa, las cuales abarcan diversos aspectos, desde lo científico, económico y social pero también la cooperación militar, al punto que se están concretando la adquisición en ese país, de unos 44 helicópteros de combate, artillados y preparados para el apoyo cercano a operaciones militares en las zonas selváticas fronterizas con Colombia, se revisa la implantación satelital al igual que el estudio de la compra de aviones de combate. En este mismo orden de ideas, la cooperación y la integración crece con otras naciones, como la China Popular, por ejemplo. Muy profusamente ha crecido el intercambio comercial, la inversión, las visitas diplomáticas, los show rooms binacionales, y el intercambio en el campo militar, etc,. La República Islámica Iraní también incrementa su presencia en nuestro país, sobretodo en el área de la fabricación de tractores agrícolas, pero sabemos que la tendencia es a avanzar en otras áreas de interés común. Nuestra FAN vuelve a salir al mundo a dar libertad y apoyo humanitario. En su programa «Aló Presidente» del día 3 de Octubre de 2004, el Presidente Hugo Chávez Frías anunciaba al país que unas Unidades Cívico-Militares al mando de un General del Ejército Venezolano, actuando en apoyo directo a escuadras de Protección Civil, estaban acantonadas en algunas Islas del Caribe las cuales fueron devastadas por la ola de huracanes que sacudieron esa área en los últimos meses; Cuba, Grenada, República dominicana y Hiati, estaban recibiendo apoyo directo en acciones de salvamento, traslado de alimentación a sobrevivientes, llevando medicinas a zonas afectadas, etc. Las operaciones fueron supervisadas in sito, por el GD. Raúl Isaías Baduel, Comandante General del Ejército. Como tercer punto importante; Un Nuevo Pensamiento Militar comienza a emerger. E n la revisión del Caso Venezolano frente al «nuevo estado de cosas», el Estado, a través de una novísima Constitución inspirada en la formación de una Democracia Participativa y Protagónica con un Estado Social de Derecho y de Justicia, se alista a enfrentar esos cambios del mundo globalizado. Por su parte el gobierno el Presidente Hugo Chávez Frías, ha emprendido un «Proceso de Cambios Revolucionarios» en dónde la Fuerza Armada Nacional (FAN) es misionada también en la formulación y especialmente en la ejecución de políticas sociales. Vale decir que la FAN participa activamente en garantizar la Seguridad Integral de la Nación y emplea, como elemento fundamental, la corresponsabilidad y la unidad cívico-militar , como instrumento acelerador de las políticas gubernativas que persiguen la seguridad y defensa y al mismo tiempo, el desarrollo económico y social. Con la incorporación de la FAN, en Teatro de Operaciones Sociales, bajo el control operacional del Comando Unificado de la FAN (CUFAN), los militares cobraron un rol protagónico en programas como el Plan Bolívar 2000, el Proyecto País, emblemático de la política social del gobierno de Chávez, y concretamente en el proyecto Propaís, y a la incorporación activa en la ejecución de las Misiones Sociales; Misión Mercal, Misión Vivienda, Misión Robinson I y II, Misión Ribas, Misión Barrio Adentro. Así mismo la FAN ha participado en le ejecución del rescate y ahora en la seguridad integral de la industria petrolera nacional (PDVSA), también la FAN ha consolidado la Unidad Cívico-Militar y ha sido puntal en el éxito de la gestión de gobierno del Presidente Hugo Chávez Frías, que se inclina mayormente por amainar la tremenda deuda social que el país tiene con los pobres. La misión; la búsqueda de la «Redención Social del Venezolano». En la lucha contra su más enconado enemigo; la pobreza, el gobierno venezolano ha organizado un Cuerpo de Reserva sin precedentes. La lucha es para eliminar ese flagelo social y más allá de prepararse para batallar contra un enemigo en armas, los casi cien mil hombres con los que cuenta, la Reserva más grande de Latinoamérica, pone su empeño en desarrollar la organización de las comunidades como herramienta del sostenimiento de la seguridad del Estado. A los reservista se les provee de un reentrenamiento básico de la Escuela del Soldado, prácticas de armas individuales y colectivas, y se capacitan para conformar cooperativas agrícolas, pecuarias, comercio, entre otras, se les otorga créditos blandos y microcréditos, se les incorpora a los proyectos endógenos de producción, asimismo, se les capacita y se les vinculan a la seguridad de las instalaciones petroleras. Por ejemplo, la presión ejercida por esa unión cívico-militar, el pueblo en armas, que es la Reserva, salvó la democracia venezolana el 13 de abril. La unión cívico-militar fue a la raíz de las bases sociales, por primera vez, puesto que la Fuerza Armada Nacional y pueblo trabajaron juntos para conseguirle comida al pueblo, gas al pueblo, gasolina al pueblo, enseñar a leer al pueblo, defender la soberanía nacional en sus elementos: soberanía popular y soberanía sobre nuestros recursos naturales, y eso, es el gran triunfo de este Proceso de Cambios: el resguardo de la energía, seguridad y defensa a través de la unión cívico-militar. En fin, la organización de la Fuerza Armada Venezolana ha demostrado cualidades que resultaron primordiales para consecución de los objetivos planteados. La disciplina y el orden organizativo de manera importante ha incidido en las tendencias latinoamericanas respecto a una redefinición del concepto de seguridad integral, que incorpora la participación del cuerpo castrense de modo activo en tareas del desarrollo nacional para combatir la pobreza y otros problemas sociales. Y esta acción social ha insertado a la FAN en la población, en especial a los sectores populares, a fin de viabilizar el proceso de cambios profundos y revolucionarios de Venezuela.
El Tcnel (r) (GN) Héctor Herrera Jiménez, es Licenciado en Ciencias y Artes Militares, graduado en la EFOFAC en 1982, Caracas, posee un Magíster en Ciencias y Artes Militares con especialización en Planificación Estratégica, otorgado por la Universidad de Comando y Estado Mayor del Ejército de los Estados Unidos, con sede en la ciudad de Leavenwoth, Kansas, 1997.