A Liga Obrera divulgó esta semana una nota de repudio por el asesinato del líder campesino Luiz Lopes Barros, encontrado muerto el último lunes (15), en el municipio de Conceição do Araguaia, con tiros a quemarropa. Desaparecido desde el día 12, Luiz coordinaba la Liga de Campesinos Pobres de Pará-Tocantins (LCP-PA/TO) y era uno de […]
A Liga Obrera divulgó esta semana una nota de repudio por el asesinato del líder campesino Luiz Lopes Barros, encontrado muerto el último lunes (15), en el municipio de Conceição do Araguaia, con tiros a quemarropa. Desaparecido desde el día 12, Luiz coordinaba la Liga de Campesinos Pobres de Pará-Tocantins (LCP-PA/TO) y era uno de los dirigentes más conocidos del movimiento campesino del estado. La Liga exige la inmediata investigación del caso y el castigo de los delincuentes.
El líder campesino desapareció el día 12 cuando se dirigía a una reunión del gremio. La nota afirma que, el día anterior, un pistolero fue a la casa de una activista de la LCP y los amenazó, a ella y a Luiz. «Ustedes se ganaron un premio y lo van a recibir esta semana», habría dicho el pistolero, conocido por trabajar para el latifundista José Hernandez.
Según la nota, Luiz era el principal testigo de la acusación contra Hernandez, acusado de ser el autor intelectual del asesinato de otro campesino, De Assis, dirigente del asentamiento Nazaré.
La Liga Campesina recuerda, en la nota, que Luiz llegó a denunciar las amenazas de muerte que sufría por liderar movilizaciones campesinas en Pará, como en la toma de la Hacienda Forkilha, en noviembre de 2007. Según la nota, la toma fue duramente reprimida «por orden directa de la gobernadora Ana Júlia Carepa (PT)».
La medida del Estado de Pará es parte de la operación «Paz en el Campo», denominada por la entidad como «operación de terror en el campo». Según la Liga Obrera, la operación terminó con más de 200 campesinos presos y decenas de hombres, mujeres y niños «cobardemente torturados». Para la entidad, la operación de Estado convierte a la gobernadora en «cómplice de otro asesinato».
Según la liga, doce campesinos fueron asesinados durante la operación «Paz en el Campo», que estimuló la ejecución de líderes y activistas del movimiento, en especial, a los integrantes de la toma de la Hacienda Forkilha.
La Liga Campesina pide en una nota que la población envíe mensajes de protesta a la gobernadora Ana Júlia (a través de la opción «hable con la gobernadora», en el sitio web www.pa.gov.br); al secretario de Estado de Justicia y Derechos Humanos de Pará, José Roberto da Costa Martins ([email protected]); al juzgado especial del campo ([email protected]); al ministro Paulo Vanuchi, de la Secretaría Especial de Derechos Humanos ([email protected]); al secretario adjunto Rogerio Sottili ([email protected]); al despacho de María Victoria Hernandez ([email protected]); al juez General de la Ciudadanía, Fermino Fecchio ([email protected]); al presidente de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de la Asamblea Legislativa de Pará, Arnaldo Jordy ([email protected]); y al presidente de la CDH de la Cámara Federal, Luiz Couto ([email protected]).
La representante de la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT) en la región sur de Pará, Ana de Souza Pinto, afirma que todavía no existen indicios de supuestos mandantes. «Aquí en la región nosotros no tenemos conocimiento de casos concretos de mandantes. Pero este clima, este historial de impunidad en la región causa una reacción de mucha indignación». Ana evalúa que la falta de castigo hace que «el agronegocio avance con luz verde y atente contra la vida de los trabajadores y se envilezca la lucha».
Traducción: Daniel Barrantes – [email protected]