No es por profecía es algo parecido a la intuición de los tiempos. Un gobierno que se derrumba y con el ha derrumbado a toda una nación, evidentemente que hará lo posible por preservarse, impedir el derrumbe y seguir a como diera lugar disfrutando del poder. Pareciera que la trampa sobre la cual se ha montado, el beneficio particular de la corrupción sin límites forjara en sí misma la necesidad de acudir a todo tipo de fraudes, ilícitos de toda clase, una traición inaudita a un proyecto que sin lugar a dudas ya andaba muy mal, pero estos lo convirtieron en un revés asqueroso y represivo. Son prácticamente diez años en esta decadencia sin fondo. Se dirá que no hay mística, suerte de religiosidades fruto de bonapartismos instalados en liderazgos casi mesiánicos, por más irracional que sea que no sea política y sin lugar a dudas que lo que precede a este gobierno es una mística de masas, una creencia del sí poder por más errores y corruptelas que traía consigo el gobierno Estado que fue imponiéndose con Chávez. Es decir de la mística como credo mayoritario, bajo una decadencia impuesta, pasamos a lo mas parecido al odio masivo. Es el revés en forma de derrumbe. Por tanto, no hay posibilidad de una mística, o puede decirse suavemente, de una esperanza política real y posible sino todo lo contrario.
Ahora llegamos a los finales, se va a elegir un candidato que apelan a ser oposición, quizás son varios aquellos candidatos, el gobierno les ajusta la fecha para sus primarias y con eso quizás va avanzando en una disputa interna además de ir ganando las condiciones para que una abstención masiva mientras se multiplican los candidatos lo convierta en una mayoría obsoleta pero mayoritaria, o sencillamente se apela al fraude, al fin y al cabo manejan todas las instituciones a su antojo. Ha sido tan brutal la violación a todo principio establecido desde la constitución que nos obliga a pensar que aquí ya todo es posible. Y es allí donde viene la intuición del acontecimiento en un tiempo parejo al electoral. Hablando mas claro. El odio tiene una explicación que bien que conocemos, demasiado es lo que se ha destruido, pero la mística esperanzadora con que se inició este siglo pareciera que vuelve a multiplicarse por todo lo ancho del país, dentro de una multiplicidad de organizaciones dispersas pero existentes. Ya no es solo un inmenso rechazo, una ignorancia rabiosa y en muchos casos desesperante ante el deterioro imparable de las condiciones de vida. La manipulación mediática que rompe y evita las verdades del tiempo que vivimos, ha sido uno de los pilares para seguir sobreviviendo dentro de un mundo que no hace más que deteriorarse más día a día, siguiendo las pautas de la ingeniería social de control de masas que se aplica a nivel global. Pero el tiempo del engaño sostenido en absurdos argumentales como la «guerra económica», las sanciones producidas por EEUU, claro que han hecho daño pero jamás explican la suerte de apocalipsis que vive este país. Más bien indican algo muy probable y es la posibilidad de que esta calaña instalada en el poder haya participado en el diseño externo de semejante política de destrozo. Venezuela de esta forma se convierte en un laboratorio complaciente entre los imperios externos globalizantes y el poder nacional. Pero ese laboratorio es lo que precisamente esta llegando al final de su eficiencia operativa aunque la destrucción de instituciones y empresas en manos del Estado siga su curso, pero así mismo la lucidez colectiva también sigue su curso en este caso ascendente.
Por ello decimos que se trata de una vuelta a la organización preparando una confrontación que bien podría ser violenta. La nueva mística actúa y se va convirtiendo en agrupaciones dispuestas a la confrontación y eso el gobierno lo sabe. Por ello se inventa el absurdo mafioso de sus nuevas «brigadas de paz», sumadas al sin número de bandas y colectivos que actúan a su favor, es su lenguaje desesperado reiterando una y otra vez que todo se debe a la culpa imperialista y conspiraciones fantasmas. Es la paz que esconde la represión sin freno, preparando la confrontación que cada día posee menos salidas pacíficas.
¿Y porqué hablamos de confrontación?. Dos hechos se han vivido, además de la cantidad de presos políticos, y acusaciones de todo orden. Primero la írrita y descarada desaparición del PCV real e histórico, sin fuerza propia para apelarla de ningún modo, calle o legislación. Luego el caso de María Corina Machado. Bien merecido si hablaríamos de una notable neoliberal y vendepatria. Pero en este caso se trata de un nuevo ilícito donde pierde todo chance pacífico la ultraderecha que ella representa no lejos de la derecha en que se han convertido este gobierno, es una confrontación de iguales, desde personajes muy distintos. Pero estos hechos no son suficientes como todo poder de Estado utiliza no solo utiliza las instituciones, utiliza los que es un quehacer ancestral desde que comenzaron a crearse los Estado cual es la represión física, desde ella en siglos de evolución se fue creando la tecnología de guerra que es invisible a los seres humanos porque se trata de una represión cognitiva, distribuida a través de los aparatos informáticos y la intervención en ellos. Toda estas circunstancias nos dan un pronóstico que nos aproxima a la certeza de una confrontación entre mafias que se pelean el poder. Aunque esa confrontación si va mas allá de la pelea intermafiosa podría convertirse en una insurrección masiva, es decir adopte un carácter de clase, en otras palabras supere el orden de partidos y se coloque en el orden social.
¿Qué carácter tendrá esta confrontación? Aún no tenemos idea, ¿se dividirán las FFAA?, al menos en la parte honesta y patriótica que quedan en ella al conocer de la enorme trampa que no solo las elecciones preparan, sino la realidad de todos estos tiempos de destrucción inducida. Lo cierto es que toda confrontación remite a hechos de violencia sobre una causal, y esa causal está en la propia naturaleza del poder que viene creándose incluso antes de la muerte de Chávez. Se trata del afán de eternización en el Estado. Utilizando en este caso los chantajes del enemigo como argumento perfecto para seguir conteniendo en sus manos la incalculable riqueza que le han quitado y siguen quitándole al pueblo venezolano, causa fundamental del deterioro tanto institucional, empresas de producción como poblacional. Ese chantaje o sencillamente política de sanciones, contrario al caso iraní o ruso por ejemplo, tienen todo el sabor de un acuerdo cerrado donde nuestra parte, la clase trabajadora, tiene todas la que perder, se salva y enriquece aquella élite que ha producido este desastre desde el gobierno o la propia oposición. Usan la realidad nacional como fórmula de negociación para la conservación de sus intereses. El día que EEUU elimine las sanciones, ese mismo día podrán descansar en paz esta cuerda de mafias y el país estará definitivamente en venta, y quien estará totalmente asegurado son las sumas gigantescas de dinero robado. En ese contexto no tendrán los imperios dominantes ningún interés en que la oposición tome el poder, seguirán al mismo ritmo que estos desfalcadores y utilizando lo que su poder les da en términos de dominio sobre el suelo y subsuelo de la nación. No cuesta nada a esta cuerda de vándalos que este país entre a ser una neocolonia prácticamente declarada bajo la condición de salvar sus fortunas y mantener el dominio sobre el espacio nacional.
Pero digamos que esto constituye el sueño del poderoso, volvemos y repetimos esta opción neocolonial esta próxima a llegar a su fin. Nuestra tarea en estos momentos es preparar las condiciones de ese fin y para ello hemos escrito varios textos que se desprenden de la opción opositora y toma en cuenta lo que hemos llamado el tercero excluido. Donde dejaremos los lamentos y comenzaremos por lo mas esencial dentro de este caos y es la recuperación del salario y la reapropiación de los fondos secuestrados.
¿Será posible que el gobierno deje avanzar esta posibilidad? ¿Será posible que alguien que nada tiene que ver con lo que ha sido la llamada oposición y recoja tras su liderazgo ese 80% de la población que ha expuesto su odio y dejen marchar su candidatura, como sería el caso de María Alejandra Díaz?. Lo mas probable es que no, al menos bajo la pacífica vía electoral. Ese es el enredo que nos encontramos, la alternativa no está clara desde una posibilidad violenta o pacífica, ambas opciones están sobre el tapete, y a decir verdad como siempre es el pueblo el que elije a nosotros preparar las condiciones de ambas… el pueblo definitivamente no esta vencido mas sí confundido.
* Roland Denis Luchador popular revolucionario de larga trayectoria en la izquierda venezolana. Graduado en Filosofía en la UCV. Fue viceministro de Planificación y Desarrollo entre 2002 y 2003. En lo 80s militó en el movimiento La Desobediencia y luego en el Proyecto Nuestramerica / Movimiento 13 de Abril. Es autor de los libros Los Fabricantes de la Rebelión (2001) y Las Tres Repúblicas (2012).